9-El accidente

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El joven en sus ratos libres miraba las redes, todavía sorprendido por la magnitud de lo que se suponía su relación con Emma. Veía las fotos y no podía dejar de sonreír como un idiota embobado ya que se veían geniales en ellas. La que más vergüenza le daba era sin duda la que salían besándose y tomados de la mano.

—Es increíble lo guapa que puede llegar a ser—pensó mirando la foto.

—¿Por qué miras una foto cuando me tienes a mí en el set?—preguntó una voz haciendo que se le escapase el móvil y empezase a hacer malabares con este antes de agarrarlo.

—¡Emma, menudo susto me has dado!—exclamó él recobrando un poco el aliento.

—¿Por qué mirabas las fotos?

—Es que todavía...me cuesta creer que estés conmigo—se rascó la mejilla algo nervioso y mirando a otro lado.

—Ay, que tierno eres—le dio un abrazo—¿te apetece que demos una vuelta por afuera del set?, hace un día algo frío pero se está bien.

—Claro, deja que vaya a por mi chaqueta.

Ambos salieron una vez ya preparados para aguantar ese pequeño frío y caminaron por fuera del set ya que el lugar era bastante amplío. Ella iba saludando a algunos actores secundarios del reparto o trabajadores. El chico le iba contando algunas cosas sobre la música y Emma le preguntaba sobre algo en específico.

—Bueno, no es que sepa demasiado sobre ese tema...pero algo sé. Si quieres saber más deberías preguntar a mi padre—ella se detuvo y lo besó—¿y eso?—preguntó sonrojado.

—Me apetecía besarte, ¿acaso no puedo?

—Claro que puedes—esbozó una gran sonrisa de idiota.

Se sentaron en una pequeña muralla de piedra y baja que había por el lugar a contemplar el cielo mientras charlaban. Estaban un poco cansados de tanto andar y solamente querían sentarse un poco.

—¿Qué te está pareciendo el personaje de Enid está temporada?—preguntó ella con una sonrisa.

—Me está gustando mucho. La verdad es que entiendo porque a la gente le gusta tanto tu personaje—la miró—aunque en esta temporada aún es más chismosa.

—Si—reía ella—todavía más.

—Como su actriz...—dijo en voz baja antes de ser tomado de la oreja.

—¿Decías algo?—le preguntó ella con una sonrisa y manteniendo el agarre.

—¡Nada, nada, nada!—respondía él antes de ser soltado y sobarse la oreja.

Los dos se echaron a reír antes de continuar allí hablando y pasar el tiempo juntos cuando escucharon unos truenos. Al mirar el cielo vieron una nubes negras que traían una fuerte lluvia así que regresaron al interior. La diferencia de temperatura de dentro y fuera era palpable y se sintieron aliviados pues casi enseguida de llegar, empezó a llover.

—¡Tn!—llamó un hombre al chico. Había llegado corriendo—te estaba buscando.

—¿Qué ocurre?

—Tu padre ha tenido un accidente, se ha resbalado y caído al suelo—respondió provocando que sus sonrisas desapareciesen de golpe.

Enseguida acudieron a ver como estaba, Tim se encontraba en la habitación hablando con él y no parecía tener nada grave.

—¿Te encuentras bien?—le preguntó nada más llegar.

—Tranquilo hijo, solo me he caído y necesito unos días de descanso—respondió—aunque tendrás que trabajar por los dos.

—Eso está hecho—el chico se sentía listo.

—Muy bien, os dejo, regreso a hacer unas cosas—comentó Tim—Emma, tienes que venir para hablar unas cosas de tu personajes que hemos hablado Jenna y yo.

El chico y su padre estuvieron hablando un rato. Se había resbalado y caído de una forma que el hombre consideraba absurda. Por suerte no se había hecho gran cosa y solamente necesitaba unos pocos días de descanso.

—En fin, voy a dormir un poco—dejó el vaso de agua en la mesita—que amarga...ya no recordaba lo mal que sabían.

—Voy a ir a hacer unas cosas, descansa y ten cuidado

—Dios...ya pareces tu madre...

—Bueno, he sacado cosas de ella—ambos sonrieron ante el recuerdo de su madre y el chico se marchó a su cuarto.

Tras un rato en su habitación organizando todo el material que tenía, llegó Jenna quien entró enseguida y cerró la puerta.

—Escucha, pronto...

—Será el cumpleaños de Emma, lo sé—dijo Tn sorprendiendo a la actriz—ya tengo pensado que le voy a regalar, tranquila. Y sí, si quieres hacerle una fiesta sorpresa te ayudaré.

—Vaya, lo tienes todo controlado eh

—Si, es normal.

El día que habían planeado llegó y el padre de Tn estaba ya recuperado. Jenna y compañía grababan en una escena y por fin tras seis intentos después de risas o quedarse en blanco, terminaron de rodarla. Aunque Emma no veía a Tn por ningún lado.

Un trabajador llegó corriendo y les dijo que el joven había tenido un accidente debido a que le cayó un decorado. Enseguida echaron a correr. Emma estaba en shock, no podía estar pasando eso el día de su cumpleaños y al llegar al lugar...

—¡Tn!—exclamó ella antes de ver como el chico le lanzaba unos confetis con uno de esos que vendían en las tiendas.

—¡Sorpresa!—gritó el chico y Emma vio todo lo que habían organizado—tenía que hacerte venir aquí.

Emma se llevó las manos a la cara tras llorar un poco de emoción antes de acercarse y darle un guantazo al chico.

—¿TE PARECE NORMAL ATRAERME CON UNA BROMA ASÍ?—rugió la chica.

Por segundos, tanto Tn como su padre quien estaba en una de las mesas, les pareció ver a la madre de este. Sin duda tenían el mismo carácter.

—Pero...

—¡Pensé que te había pasado algo malo porque te había caído un decorado!—seguía ella.

Tn miró al trabajador.

—¡Te dije que me había caído ayudando a pintar un decorado!—exclamó éste aún con la mejilla roja.

—¡Perdón, te entendí mal!—se disculpó este.

Y acto seguido lo hizo Emma pues vio que todo había sido un malentendido y le dio unos pocos besos en compensación.

—Dios...que fuerza—se sobaba la cara mientras aún comían pastel helado.

—Lo siento—ella se disculpaba avergonzada pues en verdad si que se había pasado un poco.

Luego de la sorpresa y la comida junto al pastel, uno a uno le fueron dando unos cuantos regalos que ella abrió cual niña pequeña. Jenna le regaló unos peluches, otros algo similar como anillos, relojes o una cámara de fotos nueva.

Tn por su parte le regaló unas fotos que se hicieron juntos y un maletín cargado de bolsas de té que tanto adoraba ella. Desde su llegada al set, tomaba el mismo tipo de té. Ahora podría tomar el que más le gustase.

Sin duda alguna, fueron unos días movidos.

Antes de irse a dormir, Emma miraba algunas fotos que se hizo con Tn. No podía terminar de creer que estuviera saliendo con él. Y lo mismo le pasaba al chico con ella.

Y así terminó el día de cumpleaños de Emma.

Espero que les haya gustado.

Un saludo.


Una melodía romántica-Emma x TnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora