KonoSuba: Un cuento de este hermoso mundo... por Dknightodin

Cap4: Hermanas en problemas

Parte 1

Justo cuando la oí a punto de responder, la puerta de mi celda se abrió. El guardia que me había atado se quedó rascándose la cabeza en señal de disculpa. "Uhhh, lo siento", dijo. "Estabas... diciendo la verdad".

—¡Ya te lo dije! —dije enfadada—. Espero algún tipo de compensación, ¿sabes?

—Ah, por supuesto. —El hombre desató las ataduras y me dejó salir—. Ah, dijiste que querías hablar con el prisionero, ¿verdad? Puedo...

"Hum, no importa, me voy. Puedes enviar esa compensación a la finca Satou en Axel".

"Espera, ¿Satou? ¿Como Satou Kazuma?"

"Hmm, uh, sí, ¿por qué…?"

El guardia inmediatamente se dejó caer al suelo y se postró. "¡Perdóname! ¡No sabía que eras parte de la Casa de Satou!"

—Eh… —Me aclaré la garganta—. Así es, soy parte de la Casa de Satou; en realidad, soy su miembro más antiguo, por lo que eso significa que soy la figura autoritaria. Kazuma me admira, ¿sabes? Él obtiene todo su conocimiento y sus consejos de mí. Así que, si le dijera que me encarcelaste, se enojaría mucho.

El guardia tragó saliva ruidosamente. "P-por favor..."

-Señorita Aqua.

"—Aqua-sama, no diga nada sobre esto; fue un error honesto."

—Hum, lo consideraré… si te unes a la Orden del Eje. —Saqué una hoja de reclutamiento.

El hombre me miró y miró el formulario en mi mano.

—¿Y bien? —dije, acercando el papel.

—Hmm. —Parecía estar realmente considerando esto cuando la opción debería haber sido obvia.

-Oye, ¿no vas a unirte?

Arrugó el ceño; parecía que realmente estaba sopesando sus opciones... pero debería ser obvio.

-Oye, ¿de verdad estás pensando en esto?

El guardia se rascó la cabeza y apretó los labios con fuerza, pensativo. "No sé... tal vez ser ejecutado sería una muestra de compasión".

Rápidamente agarré al hombre y lo sacudí violentamente. "¡¿Preferirías morir antes que unirte a la Orden del Eje?!"

Rápidamente sacó un amuleto de su abrigo. "L-lo siento, yo... "

—¡Ah, un sucio cultista de Eris! —escupí al suelo.

-Más tarde ese día, por la noche; de vuelta en la mansión de Axel…

—Ja, esta vez te atrapé, Dark... ¡¿Qué?! —gritó Megumin.

Ella y Darkness estaban jugando un juego similar al ajedrez; existía una regla de "no explosión".

"Ah, parece que vas a perder", dije, mirando el progreso fallido de Megumin.

Ella se estremeció levemente ante mi mención. "N-tonterías, Kazuma, todo esto es parte de mi plan", dijo con una falsa bravuconería.

La oscuridad movió una pieza en su lugar; el juego terminó, la oscuridad ganó.

Megumin se agarró la cabeza con desesperación. "Uf, por eso me gusta jugar contra Aqua".

"Hablando de Aqua", dijo Darkness, "no la he visto en todo el día".

Megumin se sentó, con una expresión más seria en su rostro. "Hmm, yo tampoco".

—Irene —llamó Darkness—, ¿Aqua te ha dicho que irá a algún lado?

"Desafortunadamente no lo ha hecho, Lalatina-sama", respondió la criada desde la cocina; tenía calor trabajando preparando la cena.