Le gustaba demasiado consentir a todos sus amigos, desde entradas a partidos, motocicletas, incluso en una ocasión le regalo a Kara CatCo, simplemente porque lo quería y el dinero no era algo que le importara. Era CEO de la empresa familiar, la cual se encargó de darle un nuevo nombre, nuevas metas de ayudar a las personas, algo totalmente alejado de lo que tanto su hermano como su madre habían hecho cuando estaban al mando.
Por lo que no tenía reparos en sus gastos y desde luego que no aceptaba un no por respuesta, eran regalos y sus amigos aprendieron que no lo hacía para ganarse su afecto o caerles bien...simplemente tenía tanto dinero que no sabía cómo gastarlo. Lo que veía y le gustaba, no le costaba demasiado conseguirlo.
Desde contratos millonarios, incluso que las demás personas millonarias donaran grandes cantidades en las galas benéficas que hacía L- Corp, nadie jamás le había dicho que no y honestamente estaba agradecida por eso. Lo único que quería y no podía tener era paz, pues desde que asumió su puesto alguien siempre estaba intentando matarla, parecía tener una gran diana en su espalda con la cantidad de enemigos que se había ganado su familia.
Ella amaba a su mejor amiga, que casualmente era Supergirl, no tenía problemas con los súper...incluso tenía un dialogo cordial con Clark, algunos de sus mejores amigos también eran seres de otros planetas, pero estaría en contra de aquellos que intentaran lastimar a los demás, eso había de sobre en los últimos tiempos.
Lo que nos traía al presente, nuevamente L – Corp estaba siendo atacada y su vida corría peligro...había activado la alarma de su reloj y sabía que tanto Supergirl como la DEO se encontraban ahí arrestando a los que intentaban lastimarla, controlando la situación rápidamente por lo que al ver a sus mejores amigas cruzando la puerta de su oficina no tardo demasiado en abrazarlas agradecida.
- ¿Algún día terminara esto? – suspiró antes de ver entrar a otra agente, demasiado linda - ¿quién es?
- Es Quinn, está ayudándonos hoy – Alex asintió antes de notar la mirada de interés de Lena – no, de ninguna manera Luthor
- Oh vamos, no tengo idea de lo que estés insinuando – se encogió de hombros antes de ver a Kara con una sonrisa - ¿nos presentas?
- Claro, pero no me hago responsable por sus respuestas – se rio viendo la cara de molestia de Alex – vamos Al, no seas así...sólo quiere conocerla
- Bien – suspiró mirando a la castaña – Quinn, quiero presentarte a alguien – la mencionada levantó la mirada acercándose a las tres – está es Lena Luthor
- Un placer – sonrió estrechando su mano – escuche muchas cosas sobre usted señorita Luthor –
- Espero que hayan sido cosas buenas – sonrió coqueta sintiendo la suavidad y firmeza a la vez en su tacto - ¿te gustaría almorzar conmigo?
- Lo siento, señorita Luthor estoy en horario de trabajo – asintió retirando su mano antes de ver a sus amigas – estamos listos para irnos
- Está bien, te llevo – Kara intentó no reírse de la cara de molestia de Lena
- Prefiero ir con Alex, si no te importa – se rio – la última vez que me llevaste volando casi destrozamos un edificio
- ¿Qué dices de una cena? – Lena intentó nuevamente - ¿está noche?
- Hasta donde sé es noche de juegos con los super amigos ¿verdad? – vio que Alex asentía – que tenga buen día señorita
Salió de la oficina junto con Alex dejando a la pelinegra bastante confundida y contrariada de que alguien le haya dicho que no, no sólo una vez sino dos...en su propio espacio, quería golpear a Kara cuando empezó a reírse por la situación.