-Mierda...- dije en voz alta y luego tapando mi boca, mientras veía como el profesor de biología de cruzaba de brazos.
-Señorita Moore veo que este año no quiere quedarse atrás como el pasado. –dijo mirando a Louis.
Louis solo trataba de ocultar su risa. Lo observe se veía como un adolescente ocultando algo. Sonreí con él.
-Quiero hablar con tu padre __________, él no es un chico de esta escuela. –dijo el profesor apuntado a Louis con su dedo.
-Eeem... si él es un estudiante pero todavía no puede entrar a clases. –dije caminando hacia el profesor. Si mi padre se enteraba, Louis no iba a ser el único castigado aquí.
-Tengo clases no puedo discutir esto, pero que no se vuelva a repetir. –nos miro a través de sus gafas.
Cuando quedamos solos nuevamente estallamos en risas.
-Me voy, tu padre debe estar buscándome. –dijo Louis pasando por mi lado.
-¿Te vas así? –dije, elevando una ceja.
-Si nos besamos no significa que somos algo más. Nunca seremos algo __________. –volvió a su camino, dejándome ahí parada y un poco desilusionada.
-Yo sí creo que podemos ser algo. –dije en voz alta pero él no estaba ahí para escucharlo.
Exactamente tres horas después me encontraba en mi auto camino a casa. Volver a la escuela me tendría muy ocupada. Mi teléfono había sonado todo el maldito camino, cuando por fin me vi caminando hacia la gran puerta principal de la gran mansión de Los Moore pude contestar.
-¿Qué quieres? –dije algo molesta.
-Quiero verte. –dijo Billy. Mi supuesto novio.
-Lo siento tengo cosas que hacer. –corte el teléfono.
Sentí una presencia detrás de mí. Pare mi paso en seco.
-No deberías ser así con tu novio. –dijo una voz hueca.
Me di la media vuelta. -¿Estabas escuchando Michelle? No te enseño tu madre a no meterte en las cosas de los demás ¿O necesitas manzanitas para entender?
-Yo sabía que serias así de mala persona conmigo _________. –dijo ella tocando su pecho, como dolida.
-Soy así solo con las personas que me molestan. –dije mirándola fijamente. Su cabello rubio, era un sol llameando.
-Y como veo no te molesta Louis Tomlinson. –dijo caminando más cerca de mí.
-¿A qué te refieres?
-Yo sé todo _________, gran beso en el camarín de chicas. –ella rió venenosamente.
Ella volvió a hablar. –Pero deberías saber quién es realmente Louis Tomlinson.
Ella desapareció de mi vista en menos de diez segundos. Ella quizás tenía razón yo no sé nada de Louis Tomlinson.
Cuando iba subiendo las escaleras, lo vi salir del estudio de mi padre.
-Sígueme necesito hablar contigo. –le dije seria.Capítulo 20Yo iba delante de él, Louis entró a mi habitación y cerré con llave, para que nadie nos interrumpiera. Por ahí podía andar Michelle, y no quería que nos viera juntos.
-¿Es necesario que cierres con llave y las escondas? –dijo mirando cómo me escondía la llave en mis pechos.
-No quiero que te escapes, necesitamos hablar. –dije seria.
-¿Qué quieres? –dijo algo aburrido.
-Dime la verdad Louis Tomlinson ¿Quién eres?
-Soy Louis Tomlinson, solo eso.
-Dime. –demandé.
El no respondió y miro hacia otro lado. Estaba segura de que algo ocultaba. Es como si él, Michelle y Claire estuvieran unidos por algo. Y no sabía que, eso era lo que más me asustaba.
Él volvió a hablar. –Soy guardaespaldas, tengo veinte años, soy hombre y no soy gay. En eso mentí para que me pudieran recibir en la agencia.
-Todavía hay algo más. –dije, dando mi peor mirada.
-Solo eso, ahora déjame ir...-pero antes de que el terminara, yo ya estaba abriendo la puerta.
-Vete. –la puerta estaba completamente abierta, para que él saliera de mi habitación.
Cuando él se fue, fui por mi celular. Me cambie los short por un vestido floreado corto y salí de la casa.
Quería tener un momento a solas conmigo misma.
Me baje del auto, vi aquel parque. Cuando era pequeña y sufría por la ausencia de mi madre, papá siempre me llevaba para pasar un momento en este lugar.
Camine unos minutos. Era un lugar lleno de arboles y juegos para niños. Habían parejas besándose. Era un lugar tranquilo para pensar. O eso creí.
Unas de las ventajas que tenía yo, era que sentía cuando alguien me miraba. En este lugar me sentía observada. Mire a mi alrededor pero nada anormal encontré.
Un viento helado apareció. Me puso la piel de gallina.
Mire hacia mi derecha. Detrás de un árbol vi nuevamente esa persona vestida de negro me que me observaba, al igual como en el funeral de nana. No podía ver su cara, estaba toda tapada. Cuando vio que lo miraba, corrió lejos. Y se me perdió de vista.
Recordé el papel que tenía nana el día de su muerte.
AHORA TE TOCA A TI __________
Camine rápidamente a donde habían personas, para sentirme más acompañada.
Marque el número de Louis Tomlinson.
Sonó una vez y contestó.
-¿Dónde estás? –dijo.
-Estoy en el parque que siempre venia con mi padre. Louis de nuevo... lo vi...- dije sin aliento.
-Quédate ahí, se donde queda. No te muevas __________.-él corto el teléfono y quede sentada en una de las bancas, esperando a que Louis llegara.