Million Dollar Man

︵︵ ݁ 𓂃୨ O2 ୧𓂃 ݁ ︵︵

Hola,voten porfa y pueden seguirme si gustan,tkm 💕.

Ju♡

El concierto había terminado hace apenas una hora cuando el cielo, de repente, se tornó gris oscuro, y los relámpagos comenzaron a iluminar el horizonte. La lluvia caía con una intensidad feroz, golpeando la base militar con fuerza. La gira del grupo estaba a punto de continuar, pero las condiciones climáticas lo hicieron imposible. Nadie iba a salir de allí por un buen rato.

Jungkook miró por la ventana, preocupado. Su equipo, acostumbrado a lidiar con todo tipo de inconvenientes en la gira, también se veía inquieto. Las vans que los llevarían a su siguiente destino estaban atrapadas, y la tormenta no mostraba signos de ceder.

—Parece que nos quedaremos aquí por un tiempo —comentó el manager, suspirando.

En ese momento, un capitán de alto rango entró a la sala donde el grupo de ilit se había refugiado, seguido de unos cuantos soldados, entre ellos Taehyung.

—La tormenta es demasiado fuerte para que viajen. La carretera está bloqueada y la visibilidad es prácticamente nula —dijo el capitán—. Les hemos asignado una habitación aquí en la base donde podrán quedarse hasta que pase lo peor. Soldado Kim —llamó, dirigiéndose a Taehyung—, tú y algunos hombres acompañarán al grupo a las habitaciones.

Taehyung asintió, siguiendo las órdenes sin dudar. Se acercó a los miembros de ilit, quienes empezaron a recoger sus cosas para moverse. Jungkook, que había notado la presencia del soldado desde el inicio, no pudo evitar sentir una ligera incomodidad. Había algo en la seriedad de Taehyung que lo desconcertaba, aunque también lo intrigaba.

—¿Todo listo? —preguntó Taehyung con su tono profesional, sin mirar directamente a Jungkook.

—Sí, estamos listos —respondió el manager.

Taehyung comenzó a guiar al grupo por los pasillos oscuros de la base, mientras la tormenta rugía afuera. El sonido de las botas de los soldados y los pasos de los idols resonaba en la estructura metálica, creando una atmósfera cargada de tensión. Al llegar a las habitaciones, el capitán miró al manager y añadió:

—Hemos tenido algunos inconvenientes con las habitaciones. No hay suficientes espacios privados, así que tendrán que compartir. El soldado Kim Taehyung te cederá su habitación, Jungkook.

—¿Qué? —Jungkook parpadeó, sorprendido, mientras Taehyung tensaba la mandíbula ligeramente—. ¿Compartiré habitación con... él?

—Es una orden, Soldado Kim —dijo el capitán, sin darle espacio a ninguna protesta—. Te encargas de nuestro invitado.

El manager asintió sin problemas, pero Jungkook no pudo evitar sentir un nerviosismo inusual al escuchar que compartiría habitación con el misterioso soldado.

Al llegar a la habitación de Taehyung, el ambiente se sentía extraño. Era pequeña y austera, como se esperaría de la base. Una cama individual, un pequeño escritorio con papeles ordenados y un armario cerrado. Taehyung entró primero, dejando a Jungkook y al resto afuera un momento.

—Puedes quedarte aquí —dijo Taehyung, señalando la cama—. Yo me quedaré afuera por si necesitas algo.

Jungkook frunció el ceño, incómodo con la idea.

—No quiero incomodarte. Si prefieres, puedo quedarme en el suelo o algo así —sugirió, intentando ser considerado, aunque no dejaba de sentir la tensión en el aire.

Taehyung lo miró por primera vez desde el concierto, con una expresión impenetrable.

—No sería apropiado que un invitado durmiera en el suelo. Esta es tu habitación por esta noche.

La manera formal en la que lo decía no ayudaba a aliviar la incomodidad. Jungkook asintió, aunque no podía sacudirse la sensación de que había algo más bajo la superficie de aquel soldado. Algo que le atraía, aunque no quisiera admitirlo.

Ambos permanecieron en silencio durante un rato, hasta que Taehyung, finalmente, rompió la tensión.

—No estoy acostumbrado a compartir espacio, lo siento si es incómodo para ti —dijo, su tono un poco más suave que antes.

Jungkook soltó una pequeña risa.

—No te preocupes. Tampoco estoy acostumbrado a quedarme en bases militares —dijo, intentando aligerar el ambiente—. Pero ya ves, la vida te lleva a lugares inesperados.

Taehyung lo miró, como si estuviera evaluando cada palabra que salía de su boca, antes de asentir.

—Es cierto.

El silencio volvió a instalarse entre los dos, pero esta vez, no era tan pesado como antes. Jungkook se sentó en la cama, mirándolo de reojo. Había algo en Taehyung, en su calma distante, que lo inquietaba. No era solo el respeto que le imponía su presencia; era la sensación de que había más detrás de esa mirada fría.

—Taehyung, ¿cierto? —preguntó Jungkook, probando el nombre en sus labios.

—Sí.

—Te vi en el concierto. Parecías… distante —comentó Jungkook, sin poder evitar sonreír un poco—. No eres muy fan de los idols, ¿verdad?

—No —admitió Taehyung, cruzando los brazos—. No es algo que me interese.

—¿Y qué te interesa? —preguntó Jungkook, con curiosidad genuina, inclinándose un poco hacia adelante.

Taehyung lo miró por un largo momento, como si no supiera cómo responder a esa pregunta. Finalmente, sacudió la cabeza levemente.

—No estoy seguro de tener una respuesta para eso —dijo.

—Curioso —murmuró Jungkook, sonriendo de nuevo—. Un hombre de pocas palabras.

Taehyung no respondió, pero había algo en su expresión que cambió, algo que hizo que Jungkook sintiera que, poco a poco, estaba viendo un lado diferente del soldado. Un lado que quizás, solo unos pocos llegaban conocer.