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Nota:
Hola,como están? No se olviden de votar o compartir,también si gustan pueden seguirme se lo agradecería mucho 💜,o dejar algún comentario,nos vemos en el próximo cap ^^

La tormenta seguía su curso, y dentro de la habitación el ambiente se había relajado un poco. Taehyung, aunque distante, comenzaba a aceptar la presencia de Jungkook.

Mientras Jungkook se acomodaba en la cama, revisando su teléfono para distraerse, Taehyung estaba sentado en la pequeña silla junto al escritorio, observando el exterior a través de la ventana cubierta de lluvia. El sonido constante del agua y el silencio entre ambos creaban una atmósfera extrañamente íntima.

De repente, el sonido de un golpe en la puerta rompió la calma. Antes de que Taehyung pudiera reaccionar, la puerta se abrió ligeramente y una cabeza curiosa asomó por el marco.

-¿Hola? -dijo una voz joven y emocionado-. Lo siento, no quería interrumpir, pero... ¿es Jungkook?

Jungkook levantó la vista y sonrió al ver al intruso, un joven soldado que lo miraba con ojos brillantes. Era alto, con una expresión claramente nerviosa.

-Sí, soy yo-respondió Jungkook, amable como siempre, sonriendo de oreja a oreja-. ¿Cómo te llamas?

El soldado entró tímidamente a la habitación, cerrando la puerta detrás de él. Parecía emocionado y algo ansioso por la situación.

-Soy Soobin, soldado Soobin -dijo, haciendo una pequeña reverencia nerviosa-. ¡No puedo creer que estés aquí! Soy un gran fan de ilit, especialmente de ti, Gugguk.

Taehyung, que hasta ese momento había permanecido tranquilo, frunció ligeramente el ceño ante la intrusión. No era que Soobin hubiera hecho algo malo, pero había algo en la forma en que miraba a Jungkook, esa admiración descarada, que lo irritaba más de lo que estaba dispuesto a admitir. El soldado no estaba siguiendo el protocolo al entrar sin permiso, y eso lo puso tenso.

-Deberías haber tocado antes de entrar -dijo Taehyung con voz firme, intentando mantener la compostura. No era su intención sonar tan severo, pero la sensación de incomodidad que le provocaba la situación estaba comenzando a afectarlo.

Soobin, nervioso, se enderezó rápidamente, notando la mirada seria de Taehyung.

-Oh, lo siento mucho, soldado Kim. No quería ser grosero, es solo que... es Jungkook -dijo, como si eso explicara su falta de formalidad.

Jungkook soltó una pequeña risa, intentando suavizar la situación.

-No te preocupes, Soobin. Estoy contento de que hayas venido a saludarme. Siempre es genial conocer a fans que están en el ejército -dijo Jungkook, su tono cálido y genuino, lo que hizo que Soobin se relajara un poco.

Taehyung cruzó los brazos, mirando a un lado para evitar mostrar lo que sentía. No estaba seguro si lo que lo molestaba era la falta de respeto por parte de Soobin al no seguir el protocolo o si era la facilidad con la que Jungkook conectaba con otros. Había una ligera punzada en su pecho que no sabía cómo interpretar. ¿Era celos? ¿Molestia por no poder entenderse tan fácilmente con el idol? Era frustrante no tener claridad sobre sus propias emociones.

Mientras tanto, Soobin aprovechó para hacer más preguntas a Jungkook, hablando animadamente sobre sus canciones favoritas, sus actuaciones memorables, y hasta preguntando si podría sacarse una foto con él. Jungkook, siempre dispuesto a complacer a sus fans, sonrió y aceptó de buena gana.

-¿Una foto? ¡Claro! -dijo Jungkook, levantándose de la cama para posar junto a Soobin, quien rápidamente sacó su teléfono y se colocó al lado de su ídolo.

Taehyung, observando la escena, no pudo evitar apretar los labios. Mientras veía cómo Soobin sacaba la foto y sonreía de oreja a oreja, algo dentro de él se agitaba más y más. Intentó convencerse de que era solo molestia por la falta de orden, pero la realidad era más compleja. Había una parte de él que no soportaba ver a Jungkook tan cercano a alguien más. Esa conexión fácil que el idol parecía compartir con otros lo hacía sentir... excluido.

Después de la foto, Soobin se quedó un rato más, charlando emocionado sobre sus experiencias en la base militar y cómo las canciones de ilit le daban fuerza durante las largas jornadas. Jungkook lo escuchaba con paciencia, haciendo preguntas ocasionales y mostrando un interés genuino en la vida del joven soldado.

Finalmente, después de varios minutos, Soobin se dio cuenta de que estaba ocupando demasiado tiempo.

-Bueno, creo que ya los he molestado bastante. ¡Gracias Jungkook! -dijo Soobin con una reverencia, mirando al idol con admiración-. Y lo siento de nuevo, soldado Kim -añadió, dándole una rápida mirada nerviosa a Taehyung antes de salir de la habitación.

Cuando la puerta se cerró detrás de él, el silencio volvió a llenar el espacio. Jungkook se dejó caer de nuevo en la cama, riendo suavemente.

-Vaya, no esperaba una visita así -comentó, todavía con una sonrisa en los labios-. Es raro encontrar fans en lugares como este.

Taehyung permaneció en silencio por unos momentos, sus ojos fijos en la puerta por la que Soobin había salido. Finalmente, habló, su voz más baja de lo habitual.

-Pareces muy acostumbrado a ese tipo de atención.

Jungkook lo miró, sorprendido por el comentario. La expresión de Taehyung era difícil de leer.

-Bueno, es parte de mi vida -dijo Jungkook, encogiéndose de hombros-. Me gusta hablar con los fans, es una de las cosas que más disfruto de mi trabajo.

Taehyung asintió, aunque no pudo evitar un ligero gesto de desdén.

-¿No te molesta que la gente invada tu espacio personal así?

Jungkook lo observó detenidamente, notando por primera vez un tono diferente en la voz de Taehyung. ¿Era molestia? ¿O había algo más?

-A veces puede ser un poco abrumador, pero entiendo que es parte de lo que hago. Y además, la mayoría de los fans son geniales. Como Soobin, por ejemplo. Se veía muy emocionado y... -Jungkook se detuvo, observando la expresión de Taehyung-. ¿Te molestó que viniera?

Taehyung lo miró de reojo y, por un momento, no supo cómo responder. No quería admitir lo que realmente sentía, ni siquiera a sí mismo.

-No me molesta -respondió finalmente, aunque su tono sonaba un poco más frío de lo que pretendía-. Solo creo que deberías tener un poco más de privacidad, incluso aquí.

Jungkook sonrió de nuevo, aunque esta vez con una pizca de diversión en sus ojos.

-¿Te preocupas por mí?

El soldado lo miró, claramente incómodo ante la pregunta.

-Solo hago mi trabajo -dijo, esquivando la mirada.

Jungkook dejó escapar una pequeña risa. Quizás, después de todo, Taehyung no era tan frío como aparentaba ser,no?.

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