Bleached Vampire

Capítulo 35: Las consecuencias

Bleached vampire por AgentG

Traducción Migue Hi-hat

Tomó algo de tiempo reunir a todos, Moka interna le quitó el anillo de control a la profesora de arte y lo usó ella misma para asegurarse de que Lilith volviera a todos a la normalidad, por lo que esperaron con una Ishigami derrotada, atada y con los ojos vendados. No se arriesgaban porque parecía que mirarla a los ojos te convertía en piedra. Además, quedarse en un lugar significaba que los demás eventualmente aparecerían.
Comenzaron a aparecer lentamente a medida que las cosas se estabilizaban lentamente, fue bastante fácil encontrarlos eventualmente ya que la energía yokai de Moka interna era bastante fácil de detectar para los demás. El grupo de Renji llegó primero, aunque notaron que Rukia miraba mucho al suelo y se mantenía a cierta distancia de Renji. Chad y Mizore los miraban a los dos con interés dado que habían presenciado algo que ninguno de los dos esperaba.
Kurumu e Ishida fueron los siguientes, ya que Kurumu había estado volando y ella los había visto desde el aire. Parecía extremadamente feliz mientras entrelazaba su brazo con Uryu, quien parecía muy confundido y un poco incómodo como si no estuviera seguro de qué pensar. Kurumu estaba simplemente en su pequeña tierra de fantasía, sin darse cuenta de nada, solo estaba disfrutando la sensación de sí misma envuelta alrededor del brazo de Uryu.
Ichigo y su grupo fueron los últimos mientras arrastraba su Inner Hollow todavía atrapado en los hechizos kido de Urahara.
-¿Qué es eso?- Dijo Mizore mirando al Ichigo blanco y negro atado.
-Ichigo ¿es ese...?- Chad sabía de su hueco interior y ver esto en persona fue algo impactante. Pensó que tendría una máscara y se parecería más a un hueco normal o algo así. Esto no se parecía a nada que hubiera visto jamás, incluso los Arrancar al menos parecía más humano que esto. La piel pálida y los ojos oscuros asesinos con iris dorado hacían que pareciera un verdadero monstruo.
-Sí, lo es- suspiró Ichigo cruzándose de brazos. -Personalmente no puedo esperar hasta que vuelva dentro de mí, donde pertenece-
Kurumu comenzó a reírse de eso mientras todos la miraban. -¿Oh qué? Eso sonó totalmente mal, la forma en que lo dijo-
Hubo algunas miradas en blanco antes de que la imagen mental entrara en sus mentes.
-Oh, no sabía que él era así- Sode no Shirayuki se tapó la boca con la mano, sorprendida.
-No lo entiendo- dijo Hebi pareciendo confundida.
-Eres demasiado joven para esto- Saru le dio unas palmaditas en la cabeza al joven serpiente.
-¡Soy tan viejo como tú!- El chico respondió.
-Ahh, dos Ichigo juntos en una relación prohibida- Yukari sonrió ante el pensamiento mientras su mente joven y muy pervertida comenzaba a pensar en todos los detalles jugosos.
-¡N...No digas cosas así!- Ichigo gritó sonrojándose sintiéndose mortificado. Su hueco parecía igual de horrorizado, de hecho parecía como si estuviera muy enfermo ante la mera imagen mental que lo perseguía.
Renji estaba demasiado ocupado manteniéndose los ojos riéndose a carcajadas para decir algo, esto era demasiado bueno, se alegraba de estar aquí para ver esto.
-¡Cállate, Renji!- Ichigo le gritó y miró a Moka interna -¡Date prisa y vuelve todo a la normalidad ya!-
Ella lo fulminó con la mirada, -No pretendas darme órdenes, primero tengo un par de últimas cosas que hacer- Caminó hacia Tsukune mientras le sonreía con una rara sonrisa mientras colocaba su mano en su mejilla. -Nos volveremos a ver pronto y me gusta lo hombre que te estás convirtiendo-
Ella se acercó a él para susurrar. -Espero verte más seguido- Su aliento en su oreja hizo que un escalofrío recorriera su espalda cuando esta hermosa y sensual mujer le hizo tragar saliva ante la promesa que su voz le estaba dando.
Ella sonrió mientras miraba a su otro yo, -Recuerda, no lo acapares todo el tiempo, quiero salir de vez en cuando para tener un tiempo a solas con Tsukune también-
-Por supuesto, lo prometí, ¿no?- La Moka de cabello rosado le sonrió a su contraparte.
La otra le devolvió la sonrisa antes de mirar a la pequeña hada que sostenía el espejo, -Escuchaste al molesto-
-¡Ey!- Gritó Ichigo.
Moka continuó como si no hubiera escuchado nada -Deshace lo que hiciste-
Lilith asintió mientras usaba el poder de su espejo, hubo un gran destello mientras todos miraban a su alrededor. Ichigo miró sus manos, eran humanas normales ya que estaba en su forma humana nuevamente, no vio a Zangetsu ni a su hueco. Realmente tendría que preguntar qué pasó con su cuerpo cuando el poder de ese espejo lo golpeó en algún momento. Se dio cuenta de que los otros espíritus se habían ido y todos parecían volver a la normalidad. Luego miró a Orihime y se dieron cuenta de lo que habían hecho.
Todavía podía recordar la sensación de sus labios sobre los suyos, cómo su cuerpo había sido presionado contra el de él y su confesión de amor por él. Todo su rostro se puso rojo ya que no podía creer que eso acababa de suceder, ¿por qué había sucedido eso? Los ojos de Orihime se abrieron cuando sintió que quería morir en ese momento, se lo había confesado a Ichigo, le había dicho que lo amaba y ella... ¡lo había besado! ¿Qué le pasaba?
Kurumu concluyo ella misma cuando se dio cuenta de que todavía estaba abrazada a Uryu, aunque no le importaba, sabía que todavía era demasiado pronto. Ella se sonrojó mientras soltaba su brazo con el de él mientras jugueteaba con el dobladillo de su falda.
-Lo siento...-
-E... está bien- dijo Uryu sintiéndose muy incómodo en ese momento. -Dijiste que el espejo desata tus deseos internos-
-¿Lo hace?- Dijo Renji mientras todos notaban la expresión pálida en su rostro. Le lanzó una mirada a Rukia, quien todavía no lo miraba a los ojos. Cerró los ojos porque sintió ganas de golpearse la cabeza contra algo sólido. Acababa de besar a Rukia, prácticamente le había mostrado los sentimientos que había estado tratando de ocultarle durante años. Sí, a él le había gustado desde que eran niños, pero esos sentimientos sólo habían crecido con el tiempo. Ahora aquí estaba, acababa de besar no sólo a su mejor amiga de la infancia... sino también a la hermana de su capitán.
Si Rukia no lo odiara de por vida, podría vivir con eso, pero si su capitán alguna vez se enteraba, lo más probable es que fuera hombre muerto.
Había una atmósfera muy tensa y extraña entre varias personas ahora desde que el poder del espejo se había ido y no pasaba desapercibido especialmente para Urahara y Yoruichi.
-¿Tienes la sensación de que nos perdimos algo?- Ella le susurró.
Él asintió con la cabeza, -Sí, aparentemente lo hicimos, me pregunto qué pasó y cómo se desarrollará esto. Oh, bueno, tenía muchas ganas de estudiar todo esto, me pregunto si puedo tener acceso a ese espejo. Podría ser muy interesante-
-Creo que ya tienes suficiente en tu plato- Ella le dijo.