𝗘𝗟 𝗣𝗥𝗢𝗕𝗟𝗘𝗠𝗔 𝗗𝗥 𝗝𝗢𝗡 // 𝗝𝗢𝗡𝗗𝗔𝗠𝗜

𝐢𝐱.

— Jon — llamo Damian con rostro serio.

Jon lo ignoro.

— Jon — repitió con un tono más fuerte.

Siguió sin mirarle.

— ¡Carajo Jon para! — soltó irritado el moreno.

Jon detuvo sus movimientos y lo miro — ¿Que pasa? — pregunto nervioso.

Damian suspiro y lo quito de encima suyo mientras miraba el techo.

— Es un asco — admitió irritado.

— Lo siento — se disculpo el ojiazul recostandose boca arriba para mirar el techo al igual que el mayor.

Un silencio reino la habitación, uno las incómodo de lo que a ambos les gustaría.

— ¿Quieres que volvamos a intentarlo o...? — pregunto curioso volteando la cabeza para mirarle, Damian negó con un suspiro.

Jon asintió apretando los labios.

Ese día se había puesto los pantalones, y había pedido a Damian tener sexo como una persona normal, sin golpes, o azotes, cachetadas, mordazas, ahorcamientos o cera caliente, nada más que ellos dos.

No fue muy divertido.

Damian lucia irritado, molesto r incluso Jon de atrevería a decir que algo triste, y la verdad el también lo estaba un poco.

Por más que le costase admitirlo tampoco disfrutó mucho solo moverse como estupido, solo metiendo y sacando su polla, sin algún tipo de diversión extra.

¿Se había mal acostumbrado acaso?

Suspiro mientras jugaba con sus manos sobre las sábanas.

— Jon — llamo Damian con voz suave, el menor le miro — ¿Ya no te gusto? — cuestiono curioso.

Jon abrió los ojos sorprendido y negó mientras se sentaba en la cama para ver a Damian.

— Nono, me gustas Dami, muchísimo — aclaro con rapidez — Te amo — afirmo con seguridad.

Damian le miro aún recostado y asintió algo distraído, cerrando los ojos y tomando aire.

— ¿No te gusta como tenemos sexo entonces? — pregunto estrañado.

No lo pensó unos segundos, pero finalmente negó.

— Me gusta, es... Divertido, de una extraña forma — comento con una pequeña sonrisa.

Damian abrió los ojos y miro al mitad kryptoniano, mordió su labio y volvió a mirar al techo — No mientras tonto, se que no te gusta — comento con tono apagado.

Jon negó rápidamente con la cabeza, pero antes de decir cualquier cosa el moreno volvió a hablar.

— No lo niegues, se que se lo dijiste a mi padre, y a mis hermanos, y a tus padres — comento con tono calmado.

— Oh — soltó Jon sorprendido.

— Si bueno... No soy tonto, se que no te quedaste ahí para hablar sobre la escuela — admitió, son un suspiro se sentó en la cama y miro a Jon — No tenemos que hacerlo si no te gusta — comento.

Jon le miro sorprendido — ¿Que? — soltó extrañado .

Damian suspiro — No es... Jon no es agradable verte con la mirada perdida mientras lo hacemos — comento con algo de tristeza — Siento que... No lo se me siento sucio — admitió — Y no de la forma sexy quee gusta, es más como... Ni lo sé si te violara —

Comento apartando la mirada y trazando con su dedo las cicatrices de sus muslos.

— A mi me gusta hacerlo Dami — comento el pelinegro con rapidez.

— No Jon, no te gusta — afirmo Damian — Se que odias hacer esto, y tampoco quiero que lo hagamos por qué yo quiero... Si tú no quieres no es una experiencia agradable —

Jon asintió algo perdido.

A él le gustaba tener sexo con Damian.

— Me gusta Dami, hacerlo contigo es muy excitante — comento con una sonrisa el ojiazul — Es solo que... Me éxito tanto que es como si perdiera la razón, no puedo controlar mi fuerza y me da miedo... Hacerte daño, daño real que te lastime — comento con preocupación.

— No lo harás — comento Damian de forma baja.

Jon suspiro — Lo hare, te voy a lastimar, no quiero fracturarte o algo por el estilo — comento con triztesa.

Damian se removió incómodo — puedo lidiar con eso — afirmo con seguridad.

Jon negó — No, no lo harás — recalco.

Damian le miro molesto y bufo — lo hice una vez puedo una segunda — comento molesto.

Jon abrió los ojos con sorpresa — ¿Que? — pregunto asustado y extrañado.

Damian abrió la boca, sabiendo que había cagado todo, la cerro y aparto la vista.

Jon le miro.

— Mierda — soltó levantándose de la cama — No fue un criminal el que te lastimó, ¿Fue esa vez que te espose, cierto? — pregunto asustado.

Damian no respondió, no lo miro siquiera.

— Esto es de lo que hablo Damian — soltó molesto — No te quiero lastimar — afirmo.

— ¡Me da igual que me lastimes Jon! — soltó molesto el mayor mirándole — Podrías matarme a golpes y no me importaría — expreso molesto mientras se acercaba al más alto.

— A mi me importa — afirmo el contrario.

— Me da igual — soltó molesto — ¡Me gusta sentir que voy a morir Jon! — expreso — No es solo que me golpes, quiero sentir que me vas a matar Jon — admitió el moreno.

— ¿Que? —

Toma, tres, pa que no llores.

Y si no me da sueño van a ser 4, bai