Cuando pienso en él, mi corazón se extasia,
como un ángel caído del cielo, que se cruza en mi camino.
Es el muso de mi alma, la debilidad de mi corazón,
la llama que me consume, y me hace sentir viva.
Amarlo es un pecado, pero yo me condeno,
a quemarme en el infierno, por la pasión que siento.
Mi cuerpo y alma se derriten, como cera en llamas,
al verlo, al sentir su presencia, su mirada que me envuelve.
Su silencio es abrumante, pero sus ojos hablan,
con un lenguaje que solo yo entiendo.
Miles de sus miradas están grabadas en mi alma,
como un sello que no se borra, que no se olvida.
Cada vez que estoy cerca de él, siento,
que mi corazón late con fuerza, que mi alma vuela.
Es como si el tiempo se detuviera,
y solo existiéramos nosotros dos, en un mundo sin fin.
En sus ojos, veo el universo,
en su sonrisa, la eternidad.
Es el dueño de mi corazón,
el rey de mi alma, el señor de mi destino.
~Lex~
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Compañera Del Lamento
Romancepensamientos profundos que vienen desde mi ser, pueden ser algo confusos pero son demasiados profundos una vez que los sientas y descubras
