Miro al cielo y veo tu sonrisa, miro las flores y me acuerdo de tu risa, miro al frente y me pregunto donde estas?, cariño yo no estoy en tu mente, pero en la mía siempre estas presente, cariño, cada camino y paso que doy, siempre deseo que sea contigo, por favor no me pidas que "te suelte" yo no soy romántica ni menos poeta, pero por ti expreso mis versos en cada libreta.
Y cada día que pasaba, sabía que algo me hacía falta, y en las noches solitarias susurraba tu nombre, anhelando poder abrazarte fuerte.
He buscado en toda mi memoria los mejores recuerdos que tengo de ti, y llegue a la conclusión de que aún nos falta escribir mucho más historias juntos. Los recuerdos inundan mis ojos de agua cristalina que caen cual cascada que arrastra cada momento vivido a tu lado.
Señora Luna:
Por mucho tiempo pensé si buscarte y hablarte de como me sentía. No lo hice, porque no quisiera. Sino porque tengo miedo de la respuesta que me puedas dar. Hoy escribo esto, no sé si lo leerás. Solo quiero agradecerte todos esos momentos tan bellos que alguna vez me diste. Porque alguna vez tu amor me hizo sentir viva, tu amor me ayudó cuando no vi salida. Quizás ya nunca volvamos a tener la misma confianza, quizás ya no volvamos a reír como antes, ni mucho menos volvernos a decir "te amo" .
Señora Luna:
¿Puedes mandarle esta carta por mi? Se que es mucho pedir, pero de mi parte no podrá recibirla.
Desde aquel día dejé de tener un cuerpo físico para ser solo lo que soy hoy en día. Un alma errante. Es raro. Todavía no me acostumbro. Aunque no tengo un corazón, le sigo amándo. Lo necesito. Deseo que sepa que siempre le veo. Y que le voy a seguir amando.
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