Enamorándose en línea de un antiguo general (P2)

C238

Qin Yuchuan estaba un poco confundida. ¿Por qué le pidió su opinión y luego eligió otra cosa?

- ¿No es lindo este conejo? - preguntó.

Feng Qingyi escaneó el código para pagar. "Solo estaba pidiendo tu opinión para que te sientas parte de la experiencia. Además, este panda es obviamente más lindo que el conejo. Tu gusto es cuestionable".

Qin Yuchuan volvió a mirar la cabeza de Feng Qingyi. Las dos orejas cortas y negras que llevaba tenían una flor de colores en la parte superior, que parecía un poco fuera de lugar, pero en su cabeza, de hecho, era muy linda.

—Mm, es muy lindo —concordó.

Feng Qingyi empujó a Qin Yuchuan hacia adelante. Se encontraron con una persona disfrazada de conejo que saltaba por la calle, rodeada de una multitud que tomaba fotografías.

Feng Qingyi miró a Qin Yuchuan. "Este conejo es mucho más lindo que el que acabamos de ver. ¿Podemos ir a tomarnos una foto con él?"

Antes de que Qin Yuchuan pudiera responder, Feng Qingyi ya lo había detenido. Sacó su teléfono y le pidió a una joven que estaba cerca que los ayudara a tomar una foto.

"Joven, señorita, acérquense más. Sean más íntimos, no sean tan serios", instruyó la mujer.

Feng Qingyi miró en dirección a Qin Yuchuan y lo encontró de pie como si estuviera firme, luciendo extremadamente serio.

Ella se acercó a él. "Sonríe un poco, no seas tan inexpresivo. Puedes poner tu mano sobre el hombro del conejo".

Qin Yuchuan nunca había tomado fotografías antes, por lo que estaba un poco rígido, pero siguió las instrucciones y sonrió levemente.

Pronto, la joven les tomó varias fotos. Feng Qingyi miró las fotos en su teléfono.

En las fotos, Qin Yuchuan seguía de pie, erguido como un pino. Su mano parecía estar sobre el hombro de la mascota conejo, pero en realidad estaba flotando en el aire. La sonrisa en su rostro parecía algo forzada.

En las cinco fotografías, su sonrisa era exactamente la misma, como si fuera un copia y pega, mientras que ella había cambiado su pose varias veces.

Qin Yuchuan se inclinó. "¿Qué pasa?"

"Cuando te veo sonreír normalmente, no estás tan rígido. ¿No te gusta tomar fotos?", preguntó Feng Qingyi.

Qin Yuchuan negó con la cabeza. "No estoy acostumbrado. ¿Seguimos?"

"Está bien", dijo Feng Qingyi, guardando su teléfono en su bolsillo.

El parque de atracciones estaba muy animado, con globos de colores visibles por todas partes y la risa de los niños llenando el aire.

Los dos caminaron uno al lado del otro y pronto llegaron al carrusel. Una música alegre resonaba por el lugar.

"¿Quieres montar en el carrusel conmigo?", preguntó Feng Qingyi expectante.

Al ver su rostro emocionado, Qin Yuchuan asintió: "Por supuesto".

Feng Qingyi lo arrastró hacia la cola. Después de que los pasajeros anteriores se fueran, los dos entraron.

Caballos de varios colores, música alegre... Feng Qingyi estaba sentado justo delante y a la izquierda de Qin Yuchuan. Ella podía verlo con solo girar la cabeza.

Qin Yuchuan siguió mirando a Feng Qingyi. Cuando sus ojos se encontraron, Feng Qingyi le dirigió una sonrisa radiante.

Los caballos giraban lentamente, la música se hacía más animada y algunos niños detrás de ellos cantaban desafinando.