[Narra Frank]
Me encontraba en la agencia, revisando el dinero y guardando mi Katana. Ya no quería tenerla en mi cuarto; era demasiado estorbosa, después de asegurarla, eché un vistazo rápido a los informes de las dos organizaciones que me habían encargado destruir. El reloj marcaba las cuatro de la mañana cuando recordé que debía regresar a la escuela, de vuelta en la academia, me di una ducha rápida y me puse el uniforme. Aún era temprano, así que me tumbé en la cama y me entretuve un rato con el teléfono. Cuando todos comenzaron a despertar, nos reunimos para charlar brevemente antes de dirigirnos a nuestras clases. La rutina transcurrió sin mayor novedad, pero al llegar la última hora decidí saltarme la clase y dirigirme al club de jardinería. Necesitaba descansar.
Al llegar, abrí la puerta de la pequeña caseta y, para mi sorpresa, me encontré de frente con Louis, que estaba a punto de salir.
-¿Qué haces aquí? Deberías estar en tu última clase -dijo Louis, con un tono que intentaba ser firme, aunque noté un ligero nerviosismo en su voz, algo que pocos podrían percibir.
-Lo mismo te pregunto, Louis -respondí, mirándolo fijamente.
-Vine a ver a Haru. Tenemos que discutir algunos asuntos del club -respondió, desviando la mirada por un momento.
-No creo que la encuentres ahora. Yo venía aquí para dormir un poco, pero si necesitas dejarle algún mensaje, puedo pasárselo cuando la vea.
-No hace falta -respondió rápidamente-. Ya hablé con ella.
-¿Entonces estuvo aquí?
-Acaba de irse. Creo que estará en la cafetería.En ese momento me llegó un mensaje de Damián diciendo que si le puedo encargar un sándwich de huevo de la cafetería, por lo que decidí aprovechar para ver que tenían en el menú, al llegar a la cafetería pedí un par de sándwiches de huevo, entonces le entregué su pedido a Damián y me quedé con el mío, entonces nos separamos por distintos caminos, yo regresé al club y entonces encontré a Haru.
-Hola Frank -dijo Haru, tranquila
-Hola, ¿Cómo estás? -Respondí, empezando a hacer lo que me tocaba del club
-Estoy bien, planeando un poco sobre como haremos el puesto de venta de flores para el festival
-cierto -repetí, recordando la existencia del festival- el festival
-Necesitaremos madera, clavos y otro martillo -Agregó Haru
-Mañana llevo todo al lugar si quieres -ofrecí, mientras movía una maceta
-Claro Frank, entonces yo te esperaré ahí[Deja de narrar Frank]
[Narrador Omnisciente]El día transcurrió tranquilamente y Frank por fin se pudo ir a dormir, ya que se encontraba bastante cansado. A la mañana siguiente, el sol apenas despuntaba cuando Frank se reunió con Haru para empezar a montar el puesto en la zona destinada para la feria. Ambos trabajaron en silencio al principio, pero la calma matutina les permitió intercambiar algunas palabras triviales. Para Frank, los días siempre parecían alargarse cuando no había adrenalina de por medio, pero montar un puesto con Haru era una distracción agradable, terminando el día, regresaron a la escuela y mientras caminaba por el campus, Frank decidió enviarle un mensaje a Legoshi.
{En el chat de Frank y Legoshi}
Hola, Legoshi, ¿cómo estás? _Tú (Frank)
Legoshi: Hola, Frank. Estoy bien, ¿y tú?
Todo en orden, gracias. _Tú (Frank)
Oye, ¿tienes algo que hacer mañana? _Tú (Frank)
Legoshi: No, en realidad no.
Conozco una cafetería cerca. ¿Te gustaría venir? Puedes invitar a Jack si quieres. _Tú (Frank)
Legoshi: Está bien, le diré a Jack.
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Un Amor Entre las Sombras
RomanceFrank, un lobo que decide entrar a una escuela de alto prestigio, se encuentra con Legoshi (otro lobo), ellos se conocen y se enamoran, pero hay una cosa que Frank sabe y que no puede salir a la luz... O eso es lo que el cree.