Capítulo 4

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Tomó un par de semanas pero las cosas volvieron a algo de la rutina normal. Taehyung y Jungkook podían estar en la misma habitación de nuevo sin mucha tensión e incluso volvieron a algunas de sus burlas anteriores.

Taehyung se estaba sintiendo más y más seguro. Aún podía encontrar sus ojos atraídos hacia Jungkook y parecía saber siempre dónde estaba pero le importaba demasiado como para arriesgar perderlo por un romance barato. Le dolía el cuerpo cada noche deseándolo tanto pero estaba acostumbrado a negarse cosas a sí mismo por el bien de los demás.

En este caso estaba poniendo las necesidades de su hijo antes que las suyas, lo que hacía que el sacrificio valiera la pena. Al menos pensaba que valía la pena, o esperaba que lo hiciera.

Lo que hacía el dolor aún peor, era que cada día que estaba alrededor de Jungkook se sentía un poco más enamorado de él. ¿Cómo podía no amar a un hombre que era tan amable con su hijo y tan compasivo con todos los que le rodean? Incluso era un santo cuando se trataba de sus animales.

Aún no le había encontrado ni un solo defecto. No entendía como aún no estaba casado y con diez hijos. Haría el esposo y padre perfecto. Soñó más de una vez estar en el papel de esposo y padre con Jungkook.

Taehyung y Hoseok estaban jugando un juego de Candy Land en la sala de estar cuando Jungkook entró.

—Jungkook, mira, estoy ganándole a papi otra vez —dijo Hoseok mientras le sonreía a su héroe.

—Buen trabajo, amigo. Bo-hyun acaba de traer un poco de torta de chocolate. Si te das prisa a la cocina, puede que obtengas un poco antes de que la guarde —agregó.

—¡Sí! —gritó Bo-hyun y se echó a correr por el pasillo.

—Sabes que lo estás malcriando —advirtió Taehyung, pero la sonrisa que le dio quitó cualquier daño.

—Realmente me encanta tenerlo aquí. Le trae tanta luz a la casa.

—Gracias —dijo Taehyung, mientras las lágrimas le escocían los ojos.

Era una tonto con cualquiera que amara a su hijo.

—Taehyung necesitamos hablar sobre la escuela de Hoseok. El año comienza en unas semanas —comenzó Jungkook cuidadosamente. Estaba preparado para una batalla menor con el padre obstinado.

—Hay una gran escuela aquí. Iba a ir a hablar con ellos la próxima semana —dijo Tae, pensando que la discusión estaría terminada.

—Yoongi me contó todo sobre la escuela en la que Soo-hee está inscrita y no es mucho más lejos de esta zona. Él tendría muchas oportunidades allí que no puede obtener de una escuela pública y podría ir con Soo-hee —le dijo él.

—Jungkook no hay manera en que pueda darme el lujo de poner a Hoseok en una escuela privada.

—No tendrías que pagar nada. Sería una parte de tu contrato.

—No hay manera de que pueda aceptar eso, Jungkook. Ya le das a hurtadillas cosas a Hoseok todo el tiempo, como la sucia bicicleta que le diste la semana pasada. Estará bien en la escuela local de aquí —agregó tercamente. Él ya le debía demasiado a Jungkook y no quería endeudarse más.

Jungkook estaba preparado para su argumento. Él ya había descubierto que Tae no era una persona codiciosa. De hecho, era completamente lo opuesto. Era malditamente frustrante tratar de darle algo a él o a su hijo.

—Sólo déjame explicarme antes de empezar a ponerte a la defensiva y rechazar la idea por completo —empezó él.

—Bien. Adelante, explícate pero te digo que la respuesta seguirá siendo no. Estás perdiendo el tiempo —dijo, mientras cruzaba sus brazos.

Billonarios-the series- KookV (3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora