Lucifer sintió algo suave en su rostro una vez sintió que el sueño lo abandonaba. Suspiro de forma bastante fuerte y escuchó suaves ronquidos con retroalimentacion en ellos...
Alastor.
Se apartó un poco del demonio pecador y sonrió de una manera bastante boba sin saber el porqué.
Alastor estaba descansando...y tomando en cuenta que era demasiado raro que el durmiese, hacía que se sintiera un poco menos preocupado por la salud del pecador que había estado a punto de abandonar este mundo por culpa de la herida de su querido amigo el primer hombre(Eso, era sarcasmo, señores.)
Su brazo estaba siendo aplastada por el Overlord y afortunadamente no requería ninguna molestia para el. Solo se dedico a admirar los rasgos más pacíficos en los que podrías encontrar al demonio de la radio.
Lucifer paso su mano desocupada por los cabellos libres del pecador quien suspiro medio dormido ante eso y abrió los ojos ligeramente sin muchas ganas de charlar.
─Buenos días, cervatillo.
─Estoy sorprendido de como en una sola palabras logras arruinar mi día.
Lucifer carcajeó ante lo dicho por Alastor, sin embargo no se apartó. Y Alastor tampoco tenía muchas ganas de hacerlo. Le dolían sus caderas y no tenias que ser un genio para adivinar el porqué.
Alastor vio como las marcas en el cuerpo de rey seguía intactas y se ruborizo ligeramente al saber que si Lucifer hubiese querido, ya no estuviesen en esos lugares.
Prefirió suponer que se le había olvidado. Era mejor para su estropeado corazón.
─Majestad...
─¿Mhm?
─Creo que se le olvidó ciertos detalles.─Musitó señalando a la zona de marcas en su clavícula y posiblemente en su espalda.─No queremos que el Rey del Infierno sufra inconvenientes en su día a día por eso.
─¿Quién dijo que se me habían olvidado, Alastor?
Míerda.
Lucifer sonrió ampliamente al ver la reacción del ciervo. ¿Desde cuando su vida se había vuelto de...esa forma? Alastor no era una persona de lo más amorosa y seguramente si le dijeras que se preocupa por alguien, te arrancaría la lengua antes de que terminaras esa oración, pero con el...era diferente.
Y Lucifer no pudo evitar preguntarse el porqué.
No quería sonar pretencioso(seguramente lo era, no lo juzguen. Es el pecado del orgullo, deberían estar aconstumbrados), Pero la realidad era que podía ver mucho más allá de la capa sádica y psicópata de Alastor.
Quería pensar en Alastor como una cebolla.
Por supuesto que Alastor era malo, era parte de el y estaba mal de la cabeza; Era demente, seguramente era uno de los tipos más sangrientos del infierno, pero a su vez tenía capas más complejas además de la que te hacía llorar. Alastor tenía corazón, se preocupaba genuinamente por las personas a su manera y tenía ambiciones propias lejos de sus motivaciones llenas de sangre. Tenía emociones más complejas que solo un ser "inhumano".
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¿Puedes Sonreír?
Fiksi PenggemarAlastor es el enigmático demonio de la radio que sufrió una herida angelical por parte del líder de los exterminadores, Lucifer es solo el Diablo quien porque su hija le pidió, fue a sanarlo. O eso es lo que todos creen. Pero Lucifer y Alastor se co...