Vamonos.

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Till estaba en su habitación, normalmente no le permitían salir pero aún así no le gustaba hacerlo, detestaba todo lo que tuviera que ver con los aliens o las demás personas, muchos decían que era un reprimido, enojon, aburrido que solo se la pasa en su cuarto a diario pero... ¿Como no hacerlo?

A este nunca se le enseñó cómo regular sus emociones, como ser bueno con los demás y ese tipo de cosas, solo se le enseñaron las cosas básicas que necesitaba saber para ser la mejor mascota humana que podía ser así que con su pequeña mente creó la siguiente lógica.

El dolor o los sentimientos que no eran positivos eran malos, por qué así es como él le llamaba al no tener a alguien que le explicara las diferencias y al ser incapaz de el mismo diferenciar entre enojo, tristeza, ansiedad, frustración y una gama más de emociones, para su pequeña mente solo existía el blanco y el negro y si no era blanco entonces estaba mal.

A como sus pequeños puños y su pequeños gritos le daba la oportunidad intentaba cambiar su realidad, poner una luz blanca en medio de aquel mundo negro pero al no saber cómo poner aquella luz está simplemente no funcionaba, no brillaba o muchas veces injustamente venía algunas personas a romperle su trabajo.

Así que empezó a aprender de su entorno sin darse cuenta, él sabía que la gente "respetaba" y escuchaba a los que gritaban gracias a su dueño, así que él sería el que gritaría más fuerte, veía que los niños "mal portados" eran golpeados para corregirlos  así que él tendría el puño más fuerte y corregiría lo que para él estaba mal.

Algunos niños tuvieron la fortuna de crecer con un dueño que le interesaría al menos un poco sus emociones o tendrían algún hermano el cual les ayudará a entenderse, pero, Till no tenía esta oportunidad, estaba solo en medio de la oscuridad sin que nadie pudiera guiarlo.

Todos los demás niños nunca se daban el tiempo para entenderle, solo decían que era raro un niño raro y violento y listo ¿pero como culparlos? Eran solo niños también.

Había bastantes niños que se burlaban de él, se reían, hablaban a sus espaldas o algunos eran valientes como para decírselo en la cara y poder recibir un puñetazo de parte de Till, lo cual solo hacía más grande el rumor y la creencia de que Till era solo un niño violento.

Es por eso que Till odiaba salir de su habitación, le gustaba más pasársela dibujando o tocando la guitarra o haciendo cualquier cosa que salir afuera donde se sentía expuesto, cuando estaba afuera este agarraba unas cuantas flores y se escondía para sentirse lo menos observado posible.

Pero entonces cuando estaba más sumergido en aquella oscuridad encontró a un chico que a pesar de su apariencia para nada positiva fue el único el cual fue capaz de quedarse cada día junto a él solo para poder entenderle, era por eso mismo que Till aunque no lo aceptara amaba jugar con ivan cuando era niño.

Nunca aceptaría que amaba jugar con Iván, que aveces se ponía en lugares donde sabía que ivan lo buscaría a propósito a pesar de que se sentía observado por los demás niños, que aveces lo buscaba el mismo pero nunca le hablaba, que la mayoría de veces en las cuales Ivan estaba muy cerca no es que no se diera cuenta o estuviera muy cansado para decir algo o ya se había resignado o cualquier otra excusa que le puso a Iván alguna vez, si no que él mismo disfrutaba el pequeño rose suave que se generaba cuando este apoyaba su cabeza en su hombro.

Pero Till nunca lo aceptaría, nunca sería capaz de tirar a la basura su ego y sus barreras solo para aceptar que el chico que se pasó su vida diciendo que lo odiaba y demás era su mejor amigo... o algo más incluso...

"Los días sin ivan eran aburridos" pensó Till pero al momento callo ese comentario en su cabeza, ah, otra cosa más que tampoco admitiría.

Pero era verdad, Ivan le daba esa sensación electrizante, movida y divertida a su vida, no era lo mismo cuando llegaba a jugar con algunos niños, era divertido, un poco, pero cuando jugaba con Iván no podía aburrirse aunque quisiera, la manera en la que podía hablar de lo que quisiera y no sería callado, reírse de lo horrible que eran las coronas de flores que él hacía, verlo asombrado cada que prendía fuego con dos rocas, e incluso aveces la adrenalina de perseguirse entre ellos o de golpearse era divertida.

Salvando un corazón roto (ivantill fan fic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora