THE STRIPPER - GARIME

CAPÍTULO 13 - "REGALO, PASEO, CONVERSACIÓN"

POV KARIME

Revisé todos sus compromisos y nada, Gala se quedaría en la empresa todo el día ¿Podría ser peor mi mala suerte? La noche pasada fue un tanto problemática, nunca en mis planes pensé que estaría al lado de Luis. Después del casi beso de Gala y yo, salí un poco distraída del lugar.

"¿Está todo bien Kari?" - oí la voz de chico a mi lado.

- Sí, claro. Solo con un poco de dolor de cabeza, ¿puedes llevarme a casa?

Recibí una mirada molesta, sé que él esperaba más aquella noche, pero con Gala a pocos metros de mí, era prácticamente imposible pensar en Luis, ¿de acuerdo? Alcé los hombros y tomé mi bolso.

-Claro, vamos te llevo a casa. - Mire por última vez la mesa donde estaba Gala antes, pero sin señal de ella por ahí, ¿Ya se fue o salió con alguna chica? Krista tampoco estaba ahí, seguramente ellas ya no estaban más aquí.

El camino de vuelta fue en puro silencio, se notaba a kilómetros cuanto aquella noche había sido un fracaso, no tanto así, Marie Clare y Paola salieron ganando aquel día, pues Rafael y Pablo se mostraron muy buenos partidos mientras Luis se molestó y se quejó desde el momento que puso sus ojos en Gala, quien estaba de mi lado. ¿Será a que él sentía alguna cosa diferente en nosotras? No, no pienses en eso.

- Hemos llegado. - Dijo deteniendo el auto en frente de mi edificio.

- Gracias por la noche, me gustó.

Mentí, o no, ver a Gala fue maravilloso.

- ¿Te gusto? Creo que fue algo irritante, pero puedes entenderme, ¿verdad? Algo en mí no le gusta esa mujer.

- ¿Gala? No entiendo, es una buena persona.

- Contigo, ¿no es así? lo que me parece muy extraño, ella solo es una mujer inútil y arrogante.

- No, porque apenas la conocemos. Además, no debería hablar de ella así.

- No tengo miedo de ella Karime, apenas llegó y estropeó todo, ¿recuerdas las horas absurdas que pasaste trabajando en la hoja de balances?

- Luis de verdad. Estoy muriendo de dolor de cabeza, y no quiero hablar de trabajo ahora. - Hable irritada.

- Discúlpame, fui un idiota. Sé que la noche no fue de las mejores, pero podemos mejorarla.

Mire sus ojos, que por cierto eran lindos, pero no eran esos los que yo quería mirar ahora. Baje mi cabeza, pensando en la forma más educada de decir que por hoy ya fue suficiente. Sin embargo, noté como se acercó más a mí, tocando levemente sobre mi barbilla, haciéndome míralo nuevamente.

- Eres una mujer hermosa Karime.

- Gracias, pero me tengo que ir. Nos vemos mañana. - Salí del carro sin más.