Back to us | Alexia Putellas

Capítulo 052: Propuesta.

Isabel POV

Ale y yo llevábamos un par de días en Ibiza, disfrutando de un tiempo a solas antes de que el resto del grupo se uniera a nosotras para pasar el fin de semana. La mayor parte del tiempo lo habíamos pasado durmiendo hasta tarde, yendo a la playa, explorando la ciudad local, disfrutando de buena comida y acurrucándonos juntas por la noche, intentando aprovechar al máximo el tiempo libre que teníamos durante el verano.

Habíamos pasado la mayor parte del día en la villa relajándonos junto a la piscina y durmiendo la siesta al sol, Ale sólo salió para ir a comprar algunas provisiones a la tienda de la carretera. Ale había planeado esta noche desde hacía un par de semanas; una cena romántica en mi marisquería favorita de la ciudad, situada junto a la playa.

Estaba deseando salir con Ale por la noche, Ibiza había sido el lugar donde nuestra relación había comenzado. Compartimos nuestro primer beso aquí, en el jardín de la villa que Ale había alquilado cada año durante los últimos 7 años, admitimos lo que sentíamos la una por la otra aquí, es un lugar especial para nosotras como pareja, y volver aquí me hizo darme cuenta de lo afortunada que era de tener a Ale de nuevo en mi vida.

Había decidido mi atuendo para la noche; unos pantalones blancos de pierna ancha, un crop top a juego que acentuaba mi bronceado veraniego y mi par favorito de tacones rojos. Había buscado en mi joyero el par de pendientes adecuado, pero no encontraba ninguno que combinara con mi atuendo, entonces recordé que Ale había tomado prestados mis aros dorados pequeños para un evento al que había asistido hacía unas semanas.

Abrí la cremallera de su maleta, que seguía sin deshacer a los pies de la cama, en busca de su joyero de viaje que siempre llevaba consigo de vacaciones, pero en su lugar encontré otra cosa... algo más pequeño.

Podía oír los latidos de mi corazón en los oídos mientras miraba la pequeña caja negra que tenía en la mano.

No podía ser... ¿verdad?

Mi curiosidad se apoderó de mí y, antes de darme cuenta, estaba abriendo lentamente la caja, desesperada por saber si esto estaba ocurriendo de verdad. El anillo de diamantes de corte ovalado que había dentro me dio la respuesta... era un anillo de compromiso... Ale me estaba pidiendo matrimonio.

Mi mente iba a mil por hora, cada emoción pasaba por mi cabeza. Me sorprendió que esto estuviera sucediendo ahora, por supuesto que habíamos hablado de querer casarnos, pero ni siquiera habíamos vuelto a estar juntas durante un año, se sentía tan rápido, pero estaba más que emocionada por la idea de que Ale me pidiera que me casara con ella... convertirme en su prometida y estar a un paso más cerca de ser una Putellas.

El sonido de la ducha al apagarse me devolvió al momento presente. Pasé unos segundos más mirando el anillo antes de volver a meter la mano en su maleta y dejar la caja cerrada donde la había encontrado. No podía arruinar este momento, si supiera algo de Ale lo habría planeado durante semanas, cada detalle habría sido pensado y no podía arruinarlo para ella... o para mí.

Estaba de pie frente al espejo del dormitorio, peinándome, cuando Ale apareció del baño, envuelta en una toalla demasiado corta para su pudor, con el dobladillo a la altura del muslo, que apenas le cubría el trasero.

"Estás preciosa" sonrió Ale mientras se colocaba detrás de mí, apartándome el pelo del hombro mientras me miraba a través del espejo, antes de depositar un delicado beso en la base de mi cuello.

"Me encanta cómo te queda", murmuró contra mi piel, y el calor de su aliento me puso la piel de gallina.

"Me encanta cómo te queda la toalla", sonreí, dándome la vuelta para mirarla y jugueteando con la parte inferior de su toalla, con el dedo índice rozando su muslo húmedo.