☆Nuestro camino☆-(minsung)

Capitulo 7

Llegó un día en que ambos tenían que realizar un trabajo juntos. Así que acordaron reunirse en casa de Minho, donde anteriormente ya había estado Jisung. Al llegar, el ambiente era tan cálido que se sentía feliz de tan solo pisar el suelo.

—¿Listo para empezar a trabajar, Sung? —dijo Minho con una tierna sonrisa en su rostro.

Jisung se sonrojó por el apodo, pero respondió feliz:

—¡Sí, muy listo! —dijo con una gran sonrisa.

Se dirigieron a la habitación de Minho, que estaba llena de posters de sus animes favoritas y una pequeña colección de figuras de acción. Minho se sentó en el escritorio y comenzó a sacar los materiales que necesitarían para el proyecto.

—Vamos a hacer esto rápido para que podamos tener un poco de tiempo para relajarnos después —dijo Minho, mirando a Jisung con entusiasmo.

Mientras trabajaban, la conversación fluía con facilidad. Se reían de pequeñas anécdotas y compartían sus opiniones sobre el tema del proyecto. Jisung no podía evitar sentirse cómodo y feliz en compañía de Minho. La conexión entre ellos se sentía cada vez más fuerte.

—Oye, ¿te acuerdas de la vez que te caíste en la clase de gimnasia? —preguntó Minho, soltando una risa.

—¡No me recuerdes eso! —exclamó Jisung, riendo también—. ¡Fue tan vergonzoso!

—Pero al menos todos se rieron contigo y no de ti —dijo Minho, sonriendo—. Eso dice mucho de tus amigos.

La tarde pasó volando, y antes de que se dieran cuenta, habían terminado el trabajo. Se miraron satisfechos y un poco cansados, pero la energía entre ellos seguía vibrando.

—¿Qué te parece si vemos una película para relajarnos? —sugirió Minho, sus ojos brillando con emoción.

—¡Me encantaría! —respondió Jisung, sintiendo que cada vez se sentía más a gusto.

Minho se levantó y comenzó a buscar una película en su computadora, mientras Jisung se acomodaba en el sofá. Finalmente, Minho eligió una comedia y se sentó junto a Jisung. La atmósfera se volvió más tranquila y acogedora, y mientras la película comenzaba, Jisung se sintió feliz de estar ahí.

A medida que la historia se desarrollaba, ambos se reían y comentaban sobre las escenas, disfrutando del tiempo juntos. En un momento de la película, Jisung sintió que la mano de Minho rozaba la suya. Se sintió un poco nervioso, pero también emocionado, así que decidió no apartar su mano. Minho, al notar la conexión, entrelazó sus dedos con los de Jisung.

En ese instante, una sensación cálida llenó el pecho de Jisung. No era solo una amistad; había algo más profundo creciendo entre ellos. Durante las risas y los momentos divertidos de la película, Jisung se dio cuenta de que estar con Minho le hacía sentir bien, como si estuviera en casa.

Cuando la película terminó, Minho se volvió hacia Jisung con una sonrisa suave.

—Gracias por venir hoy, Jisung. Siempre disfruto de tu compañía.

—Yo también, Minho. Gracias por ser un gran amigo —respondió Jisung, sintiendo que sus palabras estaban impregnadas de más significado del que él mismo podía comprender.

Mientras el ambiente se volvía más íntimo, Jisung supo que su relación había alcanzado un nuevo nivel. Era un nuevo capítulo que ambos estaban listos para explorar, y no podía esperar a ver a dónde los llevaría.

...

Los días pasaron, y la relación entre Jisung y Minho se volvía cada vez más especial. Habían compartido risas, preocupaciones y momentos de vulnerabilidad, creando un lazo que ninguno de los dos había anticipado. Un día, mientras disfrutaban de un almuerzo en el parque, Jisung decidió abrirse un poco más.