Mi Pequeño Tonto

3

Capítulo Tres

¡1 de enero de 2014!

Al ver esta fecha, aunque Mu Tian ya estaba seguro en su corazón, no pudo evitar tomar una profunda respiración. Este tipo de cosas que superan la ciencia, si no las hubiera experimentado en carne propia, probablemente habría pensado que eran tonterías.

No cabe duda, ha regresado a hace dos años, ¡Mu Tian ha vuelto al pasado!

Mu Tian quería gritar, quería vociferar para liberar sus emociones desbordantes. Sin embargo, aunque lo deseaba, no era una persona que mostrara fácilmente sus sentimientos; solo apretó sus manos repetidamente, en un ciclo continuo.

Es fácil imaginar cómo se siente una persona al morir y luego volver a la vida.

Después de calmarse un poco, Mu Tian pudo concentrarse en reflexionar sobre su situación actual.

Hace dos años, había estado con Si Tu Yu durante seis años. Aunque no podrían describir su relación como una unión perfecta, él pensaba que eran felices. Al menos, eso era lo que creía. Pero tal vez, solo él lo pensaba.

Mu Tian apretó los dientes, temiendo no poder contenerse y salir corriendo a matar a Si Tu Yu.

Él, en el futuro, había sido asesinado por esa persona en una cama de hospital. Al pensar en esto, la sed de venganza comenzó a burbujear en su interior. Los humanos son emocionales, pero, ¿qué hay de Si Tu Yu? Ocho años de relación, y por otro hombre, tuvo el corazón de matarlo; eso era verdaderamente más bajo que los animales.

Lo que no entendía era cuándo Si Tu Yu y Huo Ran se habían involucrado. Ambos eran su amante y su mejor amigo, pero estos dos, que eran tan cercanos a él, lo habían apuñalado por la espalda.

Dicho esto, quizás el accidente automovilístico que había sufrido no había sido un accidente después de todo. Sin embargo, aunque dudara, no había forma de investigar la verdad.

Además, Huo Ran, él había crecido junto a ellos. Podrían decirse que se conocían como la palma de su mano, pero Mu Tian, en el presente, no se atrevería a decir eso. Los dos habían sido capaces de involucrarse a sus espaldas sin que él lo notara, y cada vez que Huo Ran estaba frente a él, no mostraba ninguna señal de anormalidad; la astucia de ese hombre era evidente.

Sin embargo, de cualquier forma, ahora él ya sabía lo que eran esos dos, y no caería fácilmente en sus trampas.

¡Si Tu Yu, Huo Ran!

Las personas que lo traicionan no deberían existir en este mundo. Mu Tian siempre había sido de los que devuelven el rencor, así que, dado el caso, no deberían culparlo por ser implacable.

Una mirada de dureza cruzó los ojos de Mu Tian. Él no era más el tonto cegado por el amor, sino el temido "Lobo Lujurioso" en el mundo empresarial.

Justo cuando Mu Tian estaba sumido en sus pensamientos de venganza, algo suave y cálido cayó en su mano.

Mu Tian se quedó atónito, se dio la vuelta y descubrió que era la pequeña mano blanca y tierna de Mo Xiao. Ese chico tenía unos ojos oscuros y limpios que lo miraban fijamente, con un ligero rubor en el rostro por la fiebre. Al verlo, sonrió ampliamente.

"¡Tian Tian~!"

Mo Xiao se lanzó hacia los brazos de Mu Tian, medio arrodillándose en la cama, abrazando su cuello, con su rostro al mismo nivel que el de Mu Tian. Su pequeña boca soplaba suavemente sobre su cara.

"¡Hoo hoo, Tian Tian! ¡Hoo hoo~ voló, Tian Tian, Xiao Xiao!"

Mo Xiao, con un cociente intelectual bajo, era muy sensible a las emociones. No entendía lo que era el dolor, solo sabía que su Tian Tian no estaba feliz; si Tian Tian no estaba feliz, entonces Xiao Xiao tampoco lo estaba. Normalmente, cuando no estaba feliz, su familia le soplaba en la cara y eso lo hacía sentirse mejor, así que decidió hacer lo mismo con Tian Tian. De esa manera, Tian Tian estaría feliz.

Mu Tian no comprendía del todo a Mo Xiao, por lo que no entendía el significado de sus acciones, pero podía sentir su preocupación, lo que le calentó el corazón.

Con una leve sonrisa, Mu Tian no pudo evitar abrazar al chico frente a él.

¡Qué calidez!

Mo Xiao, que había sido criado bien y estaba suave y gordito, se sentía tan cómodo en sus brazos, especialmente con su temperatura elevada por la fiebre.

Mu Tian abrazó fuertemente a la persona en sus brazos, como si fuera la única salvación en un mar de odio.

Mo Xiao no sabía que, gracias a su acción de hoy, había redimido a Mu Tian, que estaba lleno de rencor. Y en este día, Mu Tian decidió que, incluso si no amaba a Mo Xiao, haría todo lo posible por él.

Por supuesto, más tarde, cuando se enamoró de este pequeño tonto, Mu Tian pensó que su decisión de hoy había sido realmente sabia.