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Capítulo Cuatro

Mu Tian despertó nuevamente debido al ruido del timbre de su teléfono. Justo antes, Mo Xiao había insistido en que se quedara a dormir con él. Mu Tian solo había planeado acompañarlo hasta que se durmiera, pero sin darse cuenta, él también se había quedado dormido.

El ruido del timbre seguía sonando, y la persona que tenía en sus brazos se quejó descontenta. Mu Tian tomó su teléfono, presionó el botón de respuesta y le dio unas palmaditas en la espalda a Mo Xiao para que se acomodara mejor antes de levantarse para atender la llamada.

"¡Hola!"

"¡Ah Tian!" La voz familiar y extraña que provenía del teléfono hizo que Mu Tian se detuviera en seco. Era familiar porque había escuchado esa voz durante diez años, pero extraña porque la última vez que la oyó fue dos años después.

Mu Tian encendió un cigarrillo y dio una calada. El sabor de la nicotina le ayudó a aclarar sus pensamientos confusos. Abrió la boca y llamó al hombre por su nombre: "¡Ah Yu!"

Quería preguntar: "¿Por qué hiciste eso? ¿Cuándo comenzaste a salir con Huo Ran? ¿Cuándo pensaste en matarlo?"

Tenía demasiadas preguntas que brotaron sin poder contenerse al escuchar esa voz. Mu Tian sonrió amargamente al inhalar del cigarrillo; se dio cuenta de que no estaba tan tranquilo como pensaba.

Si Tu Yu, reconociendo el cambio en el tono de Mu Tian, le preguntó: "¿Dónde estás ahora?"

Mu Tian dudó y respondió: "Estoy afuera, ¿hay algún problema?" Reflexionó sobre lo que había sucedido el mismo día dos años atrás.

Recordó que, a pesar de que él y Si Tu Yu ya habían salido del armario, su madre había aceptado su orientación sexual, pero no estaba contenta con Si Tu Yu, diciendo que aunque parecía atractivo, tenía una mente muy profunda y no era una buena persona. Ahora que lo pensaba, su madre había tenido razón; había elegido mal. Al pensar esto, Mu Tian no pudo evitar sonreír amargamente y sacudir la cabeza.

"¡Ah Tian, Ah Tian!" Si Tu Yu, sin recibir respuesta, volvió a llamarlo.

"¿Qué sucede?" Mu Tian salió de sus pensamientos y preguntó.

Si Tu Yu frunció el ceño y preguntó: "Te sientes extraño hoy, ¿qué te pasa?"

La expresión de Mu Tian se oscureció, pero respondió: "Nada, ¿no se supone que tu mamá nos llamó a cenar hoy? Está bien, lo tengo. ¿Hay algo más?"

Si Tu Yu dudó y preguntó: "¿No vas a venir a recogerme?" Normalmente, Mu Tian siempre lo recogía y le recordaba que lo esperara, así que esta vez le pareció raro.

Una sonrisa sarcástica se asomó en los labios de Mu Tian mientras respondía: "Ah Yu, aunque me alegra que dependas tanto de mí, ya eres lo suficientemente mayor como para aprender a ser independiente. Hoy no voy a recogerte, ¡bueno! Ah, hay alguien que me llama, así que tengo que colgar primero."

Mu Tian presionó el botón para colgar de manera decisiva.

"Eh, Ah Tian, Ah Tian, ¡corte!"

La voz al otro lado del teléfono se interrumpió de repente. Si Tu Yu miraba su teléfono con preocupación. No sabía por qué, pero sentía que Mu Tian estaba actuando de manera extraña hoy.

"¿Qué pasa, cariño?" Una mano se envolvió alrededor de su cintura, y un aliento cálido le acarició la oreja, provocándole un escalofrío.

La persona le dejó pequeños besos en la oreja y bromeó: "Cariño, ¡eres muy sensible!"

Si Tu Yu se sintió débil en las piernas y se dejó caer en los brazos de esa persona. Sujetó la mano que lo abrazaba, y una ligera sonrojez apareció en su rostro. "Mmm~ Huo Ran, siento que Mu Tian está actuando de manera extraña."

Huo Ran detuvo sus besos por un momento, y luego respondió sin preocupación: "¿Qué tiene de extraño?"

Si Tu Yu sacudió la cabeza: "No lo sé, simplemente lo siento. Normalmente, él vendría a recogerme, pero hoy no lo ha hecho."

"¿Y qué?" Huo Ran deslizó su mano por debajo de la camisa de Si Tu Yu, acariciando su piel delicada. "¿Te sientes descuidado? ¿Aún te importa tanto Ah Tian?"

Sus caricias en su abdomen se volvieron más fuertes, y Si Tu Yu sintió un dolor en su vientre, pero no se enojó.

Se giró y le dio un beso en la mejilla a Huo Ran, disfrutando: "¿Tienes celos?"

Huo Ran capturó sus labios y lo besó con fervor. La intensidad de su beso parecía querer deshacer a Si Tu Yu. Sus lenguas se entrelazaron, y los sonidos húmedos de su intercambio resonaron, haciendo que sus corazones latieran con fuerza.

Al separarse, Huo Ran acarició los labios de Si Tu Yu, con una mirada oscura en sus ojos: "Sí, estoy celoso."

Después de hablar, de repente desgarró la camisa de Si Tu Yu, revelando su piel pálida y delgada. Lo abrazó por la cintura, sus dedos recorrían su cuerpo como si tocaran un piano, provocándole escalofríos.

"Solo de pensar que tú y Mu Tian pueden estar haciendo algo a mis espaldas, mi tarro de celos se ha volcado."

Visiblemente complacido por sus palabras, Si Tu Yu sonrió: "No te preocupes, tampoco quiero que él me toque. Solo pensarlo me da asco."

Huo Ran detuvo sus caricias por un momento, y luego continuó: "Lo siento, Ah Yu, por hacerte sentir así. No te preocupes, una vez que obtengamos su dinero, ya no tendremos que actuar con tanto sigilo."

Si Tu Yu sonrió y dijo: "Lo sé."

Los dos se miraron a los ojos y sus labios se unieron una vez más, llenando la habitación de pasión y deseo.

Mi Pequeño TontoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora