Mi Pequeño Tonto

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La boda de Luo Shang será en diez días, y el tiempo es bastante ajustado. La razón principal es que no quiere llevar un vestido de novia con la panza grande; eso sería simplemente demasiado feo. Sin embargo, a pesar de los pocos preparativos, su boda es extremadamente ostentosa. Pocos saben que, además de ser la exesposa de Luo Jun Tian, Luo Shang también es la hija adoptiva de la familia Luo.

En la iglesia, la multitud se distingue claramente: un lado está lleno de hombres con trajes oscuros, cuyas expresiones son muy serias, lo que hace que la atmósfera, que debería ser festiva, se sienta especialmente silenciosa. Mu Tian, junto al niño y Gu Liwei, se sientan; el niño, vestido con un traje blanco que lo hace parecer un príncipe, destaca entre la multitud de trajes negros junto a Gu Liwei.

"¿Mu Ge, hoy venimos a una boda, ¿verdad?" Gu Liwei pregunta en voz baja, un poco inseguro, al ver a todos los hombres de negro a su alrededor.

Mu Tian no puede evitar reírse y asiente con firmeza.

"Pero..." Gu Liwei mira a su alrededor y, asegurándose de que nadie está prestando atención, susurra: "Creo que estos hombres parecen estar en un funeral."

Antes de que termine de hablar, los hombres de negro, claramente con buenos oídos, lo miran furiosos, haciendo que su voz se apague y que le brote un sudor frío en la frente.

"¡No, no, no! ¡No he dicho nada!" Gu Liwei agita las manos en un ataque de pánico.

"¡Exacto! ¿Ustedes están aquí para un funeral o para la boda de Xiao Shang? ¡¿Por qué están tan serios en un día tan alegre?! ¡Hahaha!" Una voz repentinamente interrumpe, acompañada de una risa alegre.

"¡Cierto! Lo que dice Yang Ge es correcto, ¡deberíamos reír! ¿Verdad, hahaha?" Al terminar, otro hombre se une con entusiasmo y comienza a reírse a carcajadas.

Los demás también se unen, riendo a carcajadas, haciendo que la atmósfera sombría se disipe instantáneamente y se convierta en una de alegría.

"Eh, pequeño, no cualquiera se atreve a decir algo así, ¡eres muy honesto!" El primer hombre que habló se gira hacia Gu Liwei y lo abraza por los hombros, sonriendo de manera burlona.

Es un joven de poco más de veinte años, apuesto, con una sonrisa despreocupada en su rostro que lo hace parecer un poco alocado.

Gu Liwei se acerca un poco a Mu Tian, sintiéndose incómodo, y dice con una sonrisa forzada: "Es un cumplido."

"¡Ja! No te estoy elogiando!" El joven dice sin rodeos, dándole una fuerte palmada en el hombro a Gu Liwei, casi haciéndolo caer al suelo.

"¡Ay, lo siento! ¡Soy demasiado fuerte! Pero no es culpa mía, ¿cómo iba a saber que te caías tan fácil?" El joven rápidamente agarra a Gu Liwei, hablando sin parar.

Gu Liwei, con el rostro pálido y la expresión torcida, siente cómo la ira crece en su interior. De repente, se levanta y grita:

"¡Cállate!"

Su grito deja a todos atónitos, y el eco de su voz resuena en toda la iglesia; incluso Mu Tian se sorprende por su inusual rabia.

"¿Quién te crees para hablarme así? ¿Quién es el que no para de hablar sin sentido? ¡¿Quién es el que se comporta como una mujer?! ¡Cuánto tiempo ha pasado desde que hablaste, que ahora agarras a alguien y no dejas de hablar! ¡Es insoportable!" Gu Liwei grita, su rostro enrojecido y su pecho subiendo y bajando con furia.

"¡Jaja! No he dicho nada, ¿por qué reaccionas así?" el joven se ríe de manera burlona.

Gu Liwei respira hondo, levantando la cabeza como un pavo real orgulloso, sus ojos brillantes llenos de desafío. Su hermoso rostro brilla con tal intensidad que atrae la atención de todos en la iglesia; en este momento, él es realmente el hijo de la familia Gu, que no teme a nada.

"Si no me agradas, ¿qué pasa?" Le lanza una mirada despectiva al joven, luego se dirige hacia Mo Xiao, lo agarra y lo lleva a los brazos de Mu Tian, ocupando el lugar de Mo Xiao.

Su movimiento es tan natural que deja a los demás atónitos. Mu Tian sostiene al niño, sonriendo al ver la valentía de Gu Liwei. Esa explosión de rabia parece haber disipado toda su frustración acumulada.

"Vaya, es la primera vez que alguien me habla así en este mundo." El joven se rasca la cabeza, hablando para sí mismo, con una chispa de diversión en sus ojos.

"¡Realmente parece un pequeño pavo real orgulloso!"