8- El plan de Enkek y Anek

5 1 1
                                    

Horus y Anket han estado toda la noche en el Nilo pasándola bien y vivir un momento feliz en pareja, regresan a casa para no preocupar a Ra, al llegar se encuentran a Anubis y a Kytzia saliendo del palacio.

- Vengan acá a dónde diantres van?. - Dijo Anket algo sospechosa. -

- A una cita que planeamos, por qué la pregunta? - Contestó y preguntó Kytzia a la vez. -

- Era para saber, ahhh estás casada con Anubis, felicidades hermanita.

- Gracias, supongo, dónde estaban que no aparecieron en toda la noche? - Pregunta la ojos azules. -

- Pues....en el Nilo, pasándola juntos.

- Son pareja?. - Mirada pícara. -

- Si.....lo somos, no lo creerás pero nos hicimos una promesa.

- Lo mismo que hicimos Anubis y yo, felicidades Horus.

- Gracias. - Contestó Horus. -

- Ya se que me vas a echar de lado.

- No digas eso, los amigos no se echan de lado, aunque tengan pareja. - Le da palmaditas en la cabeza. -

- Espero sea así, bueno hermanita, solo me queda desearles lo mejor, y que logren sus metas juntos, así como lo hacemos Anubis y yo.

- Gracias, significa mucho para nosotros, y yo espero hermanita mía, que Anubis y tú sigan teniendo ese amor verdadero.

- Lo es y lo será siempre.

- ¿Quieres que le diga a nuestro padre que les dé la bendición de estar juntos?

- Si hermana. - Dijo Anket. -

- Vamos.

Los cuatro se fueron directo a Ra y al llegar lo ven sentado en el trono del medio, Kytzia hace una reverencia ante el dios supremo y le habla con su tono de voz tan lindo que Ra ama oír siempre de su hija.

- Padre mío. - Hablo la ojos azules. -

- Hija mía, a qué se debe tu visita?

- Padre mío, vine a hacerte una petición y espero puedas aceptarlo.

- Pide lo que sea hija mía.

- Puedes darle la bendición a mi hermana y a Horus para casarse, tal y como aceptaste que estuviera con Anubis?

- Hija mía, con todo el amor que tengo hacia ti y a Anket. - Mira a Anket. - Hija mía, te daré la bendición para que estés con Horus.

- Kytzia sonríe ante la respuesta de su padre. - Gracias padre.

- Todo por verlas felices, yo permití que estuvieras con Anubis porque sabía desde el principio que tenían una promesa entre manos y por lo bien que se llevaban los dos, son tal para cual. - Contestó el dios supremo. -

- Te quiero padre, no sabes cuánto. - Lo abraza. -

- corresponde el abrazo. - Siempre voy a amarte hija mía.

- se separa suavemente del abrazo. - haremos los preparativos mañana.

          ♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪

Por otro lado, en la ciudad lejana de Egipto, en el palacio se encontraba el faraón Enkek y su hermana, la hechicera Anek.

- Ya te lo dije, Kytzia nunca aceptará ser tu mujer. - Le dijo Anek de un tono algo molesto. -

- Ella será mía cueste lo que cueste hermana, ella será mía y de nadie más, quitaré a los dioses del camino y así ella será mía. - Dijo Enkek algo posesivo. - Puedes hacer algo que me ayude en esto?

- Si, tengo algo que te ayudará, crearé un arma mata dioses, te parece?

- Por supuesto, me servirá para matar al dios principal que me no me permite estar con Kytzia, como mismo lo dije, ella será mía, a cualquier precio, haré lo que sea para que sea mía, y de nadie más.

- De acuerdo, tu ganas, solo dame una semana para terminarla y estará lista para ti.

- También podríamos hacer un plan, entre los dos y me serás útil en esto.

- Tu igual me serás útil, parece que estamos pensando lo mismo, esta es una parte del plan, crearé un conjuro para poseerla.

- Entonces lo que debo hacer es secuestrarla, traerla para acá y entonces puedas meterle ese conjuro.

- Exacto, entonces cuando la traigas le pongo el conjuro y cuando esté lista, le daremos la lanza mata dioses, tomaré el control de ella y le ordenaré que mate a su amado, y así desaparecerá del mapa, y ella será tuya, no tendrá de otra.

- Si este plan falla, morirás sabes? - Dice Enkek amenazadoramente. -

- Si si como digas.....- dijo haciendo algunas muecas. -

- Pronto serás mía Kytzia, pronto lo serás. - Dijo frotándose las manos con maldad. -

       ♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪•••♪

Kytzia fue tranquilamente a tomar agua del Nilo, siente a alguien detrás de ella, al momento reacciona pero ve que era un mensajero y le habla amablemente.

- Hola. - Saluda con la mano. -

- Su Majestad. - Hace una reverencia. - Amada hija de Ra, traje un mensaje del faraón Tutankamón para usted. - Extiende un rollo de papiro. -

- Gracias. - Agarra el papiro. -

El mensajero se marcha dejando a Kytzia en la soledad una vez más, Kytzia tenía muchísima curiosidad, porque el faraón le mandó un mensaje, abre el papiro y encuentra estás palabras.

•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•

Ω° Mi querida amada hija de Ra°Ω

      Le escribo esta carta porque necesito su ayuda para una construcción de un nuevo palacio a mi nombre, y me gustaría que partícipe, si no es mucha molestia, amada esposa del embalsamador divino, espero puedas responder este llamado que te estoy dando a través de este papiro, te espero aqui en el palacio por la noche, es una cita de construcción, pide al dios Thot que venga para que también ayude, ya que necesito que me den ideas para el nuevo palacio, te esperaré hoy, nos vemos.

                      Atte: Tutankamón

•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•

Después de que Kytzia terminó de leer puso una carita de amargada, cierra el papiro y va a escribir la respuesta para enviarla al faraón y escribe estás palabras en respuesta a la cita.

•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•

Ω° Estimado faraón °Ω

       Te mando este papiro como respuesta a tu mensaje, iré a la cita que me otorgaste, iré por la noche pero con la condición de no quedarme mucho tiempo, porque tengo planes con los dioses estos días, pero con gusto aceptaré la cita, nos vemos.

               Atte: Kytzia.

•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•§•

Kytzia llama a un mensajero y le ordena que le lleve el mensaje al faraón, de paso Kytzia se va de vuelta al palacio, al llegar lo primero que hizo fue echarse aceites para la piel, ya que cuando agarra sol le da irritación y molestia, después de echarse los aceites se va a la sala del trono a sentarse, se quedó pensativa esperando la llegada de su marido.




Continuará.........

Mi vida pasada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora