Eres Solo mío bebé (jikook)

𝑒𝑠𝑝𝑒𝑐𝑖𝑎𝑙 𝑑𝑒 𝐻𝑎𝑙𝑙𝑜𝑤𝑒𝑒𝑛 𝑝𝑡/1

- jiminSsi!!! -se escucharon los gritos de su lindo bebé resonando por la habitación. - hoy es halloween -dijo mientras se sentaba en las piernas de su novio.

- ¿Y? - el mayor nunca había celebrado halloween, por lo que no le parecía muy importante. Pero al ver el puchero de Jungkook automáticamente sonrió y beso sus labios con ternura. - si tú quieres celebrarlo, adelante, conejito. - hablo después de aquel dulce beso. - pero yo no participo.

- jimin... - jungkook realizó un pequeño berrinche, dando leves saltitos en las piernas del pelinegro. El cual se mordió el labio ante la acción de Jungkook.

Las caderas del más alto fueron sujetadas por el más bajo, logrando que quedará quieto en su lugar. Jungkook no perdió el tiempo, ya que al ver a jimin así de nervioso lo incitaba a provocar más al pelinegro.

Comenzó a mover sus caderas de un lado a otro en las piernas de jimin, el cual, soltó un par de jadeos, mientras se resistía a la tentación de su conejito.

¿La razón?

Estaban en la oficina de jimin. Su jefe estaba cerca y no quería ser descubierto mientras follaba a su pequeño.

Jimin apoyo su frente en la nuca de Jungkook mientras trataba de frenar sus movimientos, lo cual solo logro que jungkook comenzará a dar pequeños saltitos en su entrepierna. El calor comenzó a incrementar en aquella habitación, jimin estaba perdiendo la cabeza y Jungkook lo estaba disfrutando. Aunque el golpe en la puerta hizo que se levantará rápidamente del regazo de su novio, ganando un gruñido de parte del mayor. El más alto se dirigió hacia un sofá en dicha oficina y tomo su celular, fingiendo que nada había pasado.

Jimin se aclaro la voz y luego hablo - pase...

Un chico sumamente guapo y musculoso entro por la puerta de la oficina. Su nombre era Chá Eun-woo y era el jefe de jimin. Jungkook miro por un momento al chico de unos aparentemente 27 años. A simple vista, se veía sumamente guapo, pero no era su tipo.

¿Cuál era su tipo? Alguien como jimin, dulce, tierno, protector, que le cumple todos sus caprichos, y lo más importante para el, que le de hasta quedarse sin energías. Ese era el tipo de hombres que a Jungkook le gustaba.

El menor dió una pequeña, pero respetuosa, reverencia - hola, señor - menciono en tono serio pero a la vez amable.

- hola, pequeño - respondió en el mismo tono - tu debes de ser la pareja de jimin ¿O me equivoco?

- no, no se equivoca Eun-woo - respondió jimin antes que el menor lo pudiera hacer.

- uy, perdón hyung. No sabía que se pondría celoso, bueno, quien no lo haría con tremenda belleza - sujeto la barbilla del menor entre sus manos, este en respuesta frunció el ceño claramente molesto.

- suéltalo, Eun-woo.

El mencionado soltó la barbilla de Jungkook - perdóname, hyung, pero es demasiado lindo, tiene mucha suerte. - se acercó al escritorio de jimin y se apoyo en este - es demasiado lindo. Creo que sería mejor que lo dejes a cuidado de alguien está noche,  porque alguien puede abusar del pequeño.

Jimin lo miro confundido - ¿A qué te refieres?

- Que está noche y la mitad del día, mañana, tu tienes que ir a Busán para recoger unos papeles importantes... Muy importantes.

- y eso no lo puede hacer alguien más?

- hyung, sabes muy bien que mi padre solo confía en ti, si mando a otra persona, tal vez me cuelgue. - Jimin asintió con la cabeza, comprendiendo de inmediato.

El señor Cha era muy estricto con el tema de su empresa, solo confiaba en muy pocos, y jimin era uno de ellos. Al principio el desconfiaba completamente del pelinegro, pero luego comenzó a quererlo como si fuera su propio hijo, al punto de darle las llaves de una de sus empresas, situada en Jeju.