|Capitulo 4: Fisiatra.

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Por fin iba camino a la cita con el fisioterapeuta, nada más seria para conocerlo, para explicarle lo que pasaba y estaba bien con eso, el hombre le explicaría que iba a pasar.

Por petición propia había ido solo en el auto de su mamá, no quería que sus padres estuvieran presente en eso, ya era suficiente con que supieran que tenía un problema eréctil. Le daba vergüenza a pesar de que no era su culpa.

Su cuerpo se excitaba, pero su miembro no quería elevarse, como había estado cargando tanto peso pudo sentir como la presión ayuda a estimularlo para que se moviera, estaba empezando a sentir algo pero aun no se erguía.

Habían pasado otras cuantas semanas, sin embargo en medio del desespero no se preocupo por otra cosa que ir a esa cita.

Bajo del auto blanco de su madre y se adentro al lugar, eran oficinas individuales en un tipo de centro comercial, no era algo grande y estaba bien con eso. Iba vestido de un pantalón de deporte negro, un suéter manga larga del mismo color, unas botas altas negras y un tapa bocas negro. Todo de color negro porque era su favorito. Tenía algunos accesorios pero nada extravagante.

Se adentró al lugar y verifico en su teléfono la dirección, decía el tercer piso a cinco puertas del ascensor. Él siguió las indicaciones y llego a un local pequeño con ventanas oscuras, por ende no se veía nada hacía adentro.

Toco el timbré y seguido de eso fue abierta la puerta, al entrar el frío lo recibió y también una sala pequeña con dos sofá, cuadros y un mostrador con una computadora.

Por la puerta trasera apareció un rubio realmente hermoso y se acerco al mostrador.

–¡Hola! Tú debes ser Jeon Wonwoo..–. Dijo más que una pregunta.

Wonwoo se acerco también e hizo una pequeña reverencia.

–Hola, si soy yo.– se presento al rubio hermoso.

–Soy Wen Junhui, ya sabes el fisiatra.– sonrió mostrando su bella dentadura. Sentía que algo en su interior se movía.

–Un gusto, Junhui.– se bajo el tapa bocas negro y sonrió de igual forma para Junhui.

–Bueno, Wonwoo. Pasa adelante por favor.– lo guió hacía la puerta trasera donde estaba como la oficina del mismo tamaño. Wonwoo se sentó enfrente del escritorio, él rubio también lo hizo–. De acuerdo, puedes empezar diciéndome que tienes porque te veo completamente bien.

Wonwoo sonrió y carraspeo enderezándose en la silla.

–Pues.. Es algo más.. Íntimo.– rió nervioso, Junhui alzo una ceja–. ¿El doctor Kim no le comentó?

–Él no puede exponer a sus pacientes, lo lamento no. Tiene que decirme..

–Bien.. Eh, veras, Junhui..– hizo una pequeña pausa y lo miro a los ojos–. Tengo problemas eréctiles, mi pene no se levanta, no puedo.. No he podido tener relaciones sexuales, ni nada de eso desde hace como tres meses y se que eso no lo es todo en la vida pero me preocupa mucho.. – confesó rápidamente. Junhui se sorprendió un poco pero asintió.

–Si Mingyu me llamó fue porque antes tuviste.. ¿No se, algún accidente?

–Si, tuve un accidente de moto y me hicieron una cirugía en la médula espinal por una fisura.

–Ya.. ¿Fumas, bebes, te drogas?

–Si fumaba antes del accidente, también bebía antes pero ya lo deje. Y jamás me he drogado.

–Mm, ¿Tienes buena alimentación?

–Claro, el doctor Mingyu me dio varias indicaciones.

–Perfecto, supongo que ya dejaste de tomar las pastillas que él te recetó, ¿no?

–Si, desde hace un mes y medio las deje.

–Bien, por favor levantate y sube tu suéter.–. Pidió el rubio, entonces ambos se levantaron y Junhui se paro frente a él, Wonwoo subió su suéter mostrando su perfecto abdomen marcado– Voy a hacer varias presiones y me dirás si duele o sientes algo más.

–Esta bien.

Él acerco su mano al abdomen del azabache y empezó con sus dos dedos a presionar en diferentes partes de su barriga, a la derecha, nada. A la izquierda, nada. En el centro.

–Ahí, sentí algo.

–Si, aquí esta tú centro, es muy estimulante.– concordó Junhui presionando otras zonas.

Bajo su mano a la marcada "V" de Wonwoo y presionó el abdomen bajo.

–¿Y aquí?– presionó a los lados, en centro y hacia abajo.

–No, ahí no.

–Bien, volteate por favor.– el azabache lo hizo.

Junhui presionó parte de su espalda baja, esa fuerte espalda baja, igual imito lo de antes, a los lados, en el centro, arriba y abajo.

–Okey, ya puedes bajarte el suéter.– concedió el rubio alejando sus manos, se devolvió a su asiento y Wonwoo también se sentó– No estas sensible, si en otro momento hubiera hecho eso ya estarías erecto. ¿No sentiste algo? ¿No sientes algo en tu pene?

Wonwoo bajo su vista y llevo su mano a su miembro y sintió un movimiento, adentro su mano y sintió su pene algo húmedo pero no erecto del todo.

–Si, esta húmedo y se mueve.

–¿Puedes mostrármelo?–. Preguntó el rubio. Wonwoo asintió y se levantó bajando su pantalón y su bóxer dejando al aire su miembro. Obviamente estaba flácido. Junhui se acerco y miro la humedad, llevo su mano a los muslos de Wonwoo– voy a hacer presión en esta zona, veremos si pasa algo.

Wonwoo asintió mirando su miembro. Como hizo antes, el rubio presionó un lado del muslo interno derecho, el miembro brinco levemente. Wonwoo amplio la vista, el rubio lo hizo del otro lado y paso lo mismo, luego se acerco un poco más y ya el miembro botaba más pre-semen.

–No esta muerto o inválido, aun tiene su sensibilidad, pero debemos practicar para que puede elevarse.– le informo.– Dejame pasarte una servilleta.

Estiro la mano a su gaveta y saco una de esas dándole la servilleta. Wonwoo limpio el líquido, y luego lo boto en la cubeta de basura subiéndose el bóxer e igualmente el pantalón deportivo.

–¿Y ahora?– preguntó volviendo a sentarse. Junhui estaba anotando algo en un cuaderno.

–Tendremos una cita cada sábado, puedes venir en la tarde, yo te recibire. Y tranquilo, solo te falta la estumilación adecuada.

–Gracias, Junhui. Esto.. No sabes cuanto me alivia, enserio.

–Lo entiendo, nos vemos la semana que viene, Wonwoo.– le guiño un ojo y cerro la puerta, viendo como el azabache se alejaba de su consultorio, era tan hermoso y fuerte. Le había encantado tanto, con gusto lo ayudaría.

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Una buena mano | WonhuiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora