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Estaba acostada en mi cama ya que eran mis vacaciones, pronto iba a iniciar segundo de preparatoria, pero bueno eso no me preocupaba tenía dos meses para relajarme con Karly mi mejor amiga quien no tardaba en entrar por mi puerta y gritar que soy una anormal por ser como soy.

- ¡Niña anormal!

-Karly no inicies

-Es que vete ni siquiera te has arreglado

- ¿Para qué?

-Vamos a salir

-¿Cuándo? Dudo que mi papá me dé permiso

-Ya me encargué de eso le dije que tendríamos una noche de pijamas para chicas y accedió así que mueve tu trasero y nos vamos

-No quiero salir hoy

-No me importa, te mueves o te muevo

Bueno no quería que ella metiera mi trasero a la ducha así que fui a tomar la ducha, cuando salí en mi cama ya había ropa interior algo atrevida junto a un vestido blanco.

-No me pondré esa ropa interior

-Hazlo o te la pongo yo

-Ash, lo hago yo

Me vestí como quiso ella, no podía negar que me veía bien dentro de esta ropa, pero no era de mis gustos, para mí era mejor usar un pantalón y una blusa. Salimos de casa y mi papá no estaba, pero le dejé una nota para recordarle que iba a quedarme con Karly.

-Vamos que no me haces joven

-Eres joven no te quejes

Salimos y bueno no esperaba que afuera estuviera un auto con dos chicos esperando sobre el capote. Detuve a Karly porque ni loca iba a subir a ese auto con los dos chicos, eran sexys, pero no podía hacerlo me daba miedo, pero como siempre ella se soltó y fue al coche de ellos.

-Hola linda- Karly besó a musculoso número uno, él segundo no dejaba de mirarme y me ponía más que nerviosa eso, alcé mi mirada tenía unos ojos negros preciosos que te perdías, era alto, piel bronceada y un cabello obscuro como la noche, su ropa era algo ajustada pero no se le veía mal.

-Kevin ella es mi hermana Allison

-Hola

-¿Puedes decirle a tu amigo que me deje de mirar?

-No seas así Allison

-Karly...

-Es hora de irnos

Kevin manejó y obviamente Karly iba de copiloto, mientras yo estaba en el asiento de atrás con su amigo que no dejaba de mirarme como pervertido.

-Deja de mirarme

-No te miro a ti

-Claro y no te creo eso- Era una maldita mentira, ya que todo el camino sentí su mirada.

-De hecho, miraba tus piernas

-Eres un idiota, Kevin ¿puedes parar el auto?

-¿Por qué?

-Quiero bajarme

-¿Por?

-Simplemente detén tu auto

Detuvo el auto, bajé como una loca y estaba enojada con ese tipo, Karly me estaba gritando, pero no le hice caso, fui jalada hacia atrás y frente a mis ojos pasó una moto con exceso de velocidad. Quedé en los brazos del idiota que me miraba las piernas.

-Para estar en mis brazos no era necesario esto

-Eres un idiota

-Pero te gusto

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