𝗞𝗶𝘀𝘀 𝗠𝗲, 𝗗𝗼𝗻'𝘁 𝘀𝗮𝘆 𝗻𝗼 - 𝖩𝖺𝗄𝖾 𝖲𝗁𝗂𝗆

Episodio 11

Is it too late now to say sorry?

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Hoy nuevamente fui a la universidad, el chisme de la fiesta ya se había regado así que todos me miraban como si fuera una especie de bicho, me sentía incomoda así que decidí salirme del edificio y sentarme en las gradas, no tenía ninguna clase a primera hora así que podría evitar a cualquier estudiante.

— Hana....

Esa voz que siempre me ponía feliz escuchar ahora solo provocaba un sentimiento de tristeza en mi, mire hacía atrás encontrándome con Jake quien tenía la cabeza agachada. No iba a quedarme allí como idiota escuchando sus lamentos, esta vez de verdad había lastimado mi corazón.

Me levante de las gradas y camine hasta salir de ellas, ni siquiera había tenido el valor de enfrentarse a mi. Pero de pronto, siento como me abrazan por la espalda, volteo mi cabeza un poco y veo a Jake escondido en mi clavícula.

— Habla ya.

— Por favor, tienes que escucharme. Todo fue un malentendido , una tramo de Jiwong.

— ¿sabes? Me molesta que le hayas creído semejante cosa como que me acoste con el.

— Lo siento, es que yo... tuve problemas con el en la secundaria. Conocí a una chica llamada Ruby la cual me gustaba y parecía que yo a ella también, empezamos a hablar y nos volvimos novios. Todo iba bien hasta que en su cumpleaños nos acostamos, desde eso ella dejo de responder mis mensajes y llamadas. Pronto sentí como todos en la escuela me miraban raro y se reían de mi y descubrí la verdad.

— Ella había apostado con su novio Jiwong, diciendo que podría enamorarme, volverse mi pareja y sacarme un video intimo. Jiwong siempre me ha odiado así que el acepto, por eso pensé que era verdad, lo siento.

Estuve a punto de perdonar a Jake, pero recordar aquel momento y recordar lo humillada que me sentí me lo impidieron. Me solté de sus brazos y lo mire fijamente a sus ojos.

— Hice de todo para demostraste que yo no me acercaba por sexo, no me creíste hasta que me acosté contigo y te dije lo que sentía. Pero s Jiwong le creíste enseguida, eso no se puede perdonar.

Le di la espalda y me fui de allí.

— Amigo ya basta! — me grito Beomgyu.

Después de haber sido botado por Hana simplemente me salí de la universidad, no me importo mi beca en ese momento, la tristeza que sentía era mayor. Me hacía sentir miserable y no podía concentrarme en nada que no fuera buscarme una forma en que me perdone.

— Jake, deja de tomar. Mira como estas, estas dando un espectáculo. — me pidió Felix.

— Tu cállate.

Tome mi celular para meterme a las llamadas, y escuchar a la única persona  que quería conmigo en ese momento.

— ¿Que quieres Shim?

— Hana! Lamento haber sido un idiota — dije sintiendo como las lagrimas empezaban a salir.

— ¿Estas borracho?

Antes de que pudiera responder Sunghoon me arrebató el teléfono,

— Hola, Hana. Lamentamos mucho que Jake te este llamando para molestarte, estaba... algo borracho.

— Si, vamos a llevarlo a mi casa.

— Dile que venga por mi — dije.

— El quiere... que vengas por el.  ¿Si lo harás? Gracias, te mando la dirección.

Sunghoon me entregó el celular, solo me dedique a llorar mientras sentía como poco a poco se cerraban mis ojos. Cuando los abrí nuevamente ya no había música, solo silencio y frente a mi estaba Hana, la jale de su brazo y la acoste en la cama, la pegue a mi y deje pequeños besos en su frente.

— ¿Que haces?

— Por favor bonita, escúchame. No es tan difícil.

— Si es difícil Jake y no deberíamos tener esta conversación ahora, estas borracho.

— Estoy más que bien.

Tome las piernas de Hana y las enrollé a mi alrededor, tome su rostro y empecé a besarle, algo lento pero apasionado, pensé que no iba a seguirlo pero si lo hizo. Tomándola de su cintura recosté su espalda en la cama mientras yo quedaba arriba de ella, empecé a besar su cuello mientras mis manos subían por su blusa.

— Ja-jake, no — pidió mientras se alejaba de mi.

— Por favor, perdóname. Estaría dispuesto hacer lo que sea con tal de tenerte conmigo aquí.

Vi como Hana solo me ignoraba, se levantó de la cama y se arregló para después irse. Me tire en la cama sintiéndome con un idiota, aunque eso es lo que era.

— ¿Será muy tarde para recuperarte?