Hospital Fantasma

Don Quixote Rosinante

"La vida es magnifica" se repetía para no caer en sus pensamientos, tenia que hacerlo, no podía dejarse caer como su hermano, el destino cruelmente acabo con la vida de su amorosa madre, su hermano y el esperaban una esperanza para ella pero todo fue en vano.

Tenían que seguir, había notado oscuridad en el pero no le tomo la importancia debida, no sabia como reaccionar a ello, su padre murió por una bala perdida, eso decían las noticias pero sospechaba que debió verlo venir, esa oscuridad cada vez era mas profunda, como cómplice sentía la gran culpa que el debía tener el autor de dicha tragedia.

Una luz de esperanza, en aquella fiesta los conoció, esas dos personas cargaban con una gran luz, estaba agradecido de al fin conocer a alguien de buen corazón pero los terribles ojos de anhelo de esa oscuridad ensombrecía cualquier destello, de nuevo estaba cometiendo un gran error, estaba ignorando nuevamente esa maldad.

Ese llanto de esperanza lo hacia sentir con vida nuevamente, lo cargo con amor, una nueva vida estaba delante de el, juro protegerlo, deseaba tanto ayudar a esas luces que iluminaron su apagada vida, se había encariñado con ese nuevo ser, adoraba lo mucho que se parecía a esos dos y no permitiría que algo malo le pasara.

Ese cruel destino no solo le llegaba a el, después de dar luz a una nueva vida esta misma se encargo de arrebatarselas a ellos dos, destrozado vio como esas dos luces se quedaban en orfandad, una dejo de brillar opacandose en tristeza guardada mientras la otra trataba de no apagarse, estaban heridas pero ningún doctor podría volver a encenderlas.

No se rendiría de nuevo, no esta vez, renuncio a todo lo que alguna vez le pertenecería y fue en búsqueda de proteger lo que ellos habían dejado, no dejaría que se apagaran, con esfuerzo, amor y dedicación los protegió de todos aquellos que quisieran hacerles daño, miraba con tristeza como esa luz seguía apagada ahogando el sufrimiento detrás de un rostro indiferente.

Ese día su gran deseo de protegerlos casi apaga su propia luz, miro con sorpresa como ese rostro lleno de indiferencia derramaba lagrimas de pesar mismas que desde ese día cuando los perdió no había dejado escapar, se había convertido en un ser especial para el, tenia que seguir.

Que dolor era ver que aun seguía guardando ese pesar pero un día el lo logro, nunca espero que su mejor amigo lograra hacer que sentara cabeza y liberara esas cadenas que aun lo apresaban, noto una mejoría en su expresión pero aun faltaba mucho para que fuera libre.

Se dio cuenta que el estaba en su propio mundo, Corazon hacia de todo para que ellos se comunicaran mas pero era algo difícil, el muchacho tenia barrera tras barrera, quería ayudarlo y estar junto a el, apoyarlo y guiarlo.

Era una gran oportunidad, no lo invitaba a ningún lado así que esta vez podría estar mas tiempo con el, preparo todas las cámaras y baterías, cargadores y todo con tal de sacar buenos momentos con el.

Que decepción al ser literalmente obligado a beber como si no hubiera un mañana el primer día, en cuanto intentaba escapar los dos hombres lo retenían en el bar haciendo que bebiera mas, sin saber en que momento comenzó a sentirse realmente bien, comenzó a parlotear

-Verán, Law se aparta mucho y no me esta contando algunas cosas, soy su padre joder y quiero saber mas de el- se estaba tambaleando, Roger sostuvo una botella y la choco con la de el

-Los chicos son difíciles amigo, les gusta hacer sus cosas a su ritmo y modo- declaraba como una gran verdad

-Pero este chico es muy apartado, no me cuenta nada hasta incluso presiento que me esta ocultando algo- miraba con tristeza la copa en su mano, los dos se observaron preocupados por lo que decía, sabían perfectamente el porque lo hacia