Naruto se ejercitaba bajo el sol en los grandes terrenos de la finca de su familia. Sudaba mucho, pero estaba concentrado en su entrenamiento. Estaba driblando muy bien una pelota de baloncesto y moviéndose por la cancha con rapidez y suavidad.
Hinata estaba de pie detrás de él, lista para empezar. Tenía una pelota de baloncesto en las manos y observaba atentamente a Naruto. Esperaba el momento oportuno para lanzarle la pelota, poniendo a prueba sus reflejos y agilidad.
Mientras Naruto seguía driblando el balón, fue consciente de la presencia de Hinata detrás de él, con su energía llena de expectación. Rápidamente se giró hacia ella, con los músculos tensos y listos para la acción.
De repente, Hinata lanzó el balón hacia él, su lanzamiento fue realmente rápido y preciso. Naruto reaccionó al instante y saltó, atrapando el balón en pleno vuelo con las manos extendidas. Aterrizó suavemente sobre sus pies, sonriendo triunfante.
Hinata observó con una sonrisa como Naruto interceptaba con éxito su lanzamiento, impresionada por sus rápidos reflejos y su agudo instinto. "¡Buena atrapada!" gritó, con voz llena de admiración.
Naruto le devolvió la sonrisa, con los ojos brillantes de emoción. "Gracias, Hinata. Tus lanzamientos son cada día más rápidos", respondió, con un entusiasmo evidente en cada palabra.
Naruto siguió entrenando en la cancha, sintiéndose reflexivo. Pensaba en los extraños momentos que había vivido recientemente. Mientras driblaba la pelota y se movía, se sentía más consciente del juego que se desarrollaba a su alrededor. Era como si hubiera adquirido una nueva comprensión.
Naruto se volvió hacia Hinata, que lo observaba con interés, y habló en tono pensativo. "Hinata, últimamente he tenido momentos extraños en la cancha", comenzó, con el ceño fruncido por la concentración. "Es como si... mis instintos se activaran y de repente pudiera ver todo el campo con una claridad cristalina. Entiendo el juego a un nivel que nunca creí posible".
Hinata escuchaba atentamente, con la mirada fija en Naruto mientras hablaba. "No se trata sólo de hacer tiros o defenderse de los rivales", explicó, con la voz teñida de asombro. "Puedo percibir sus movimientos antes incluso de que se produzcan, anticiparme a sus estrategias y ajustar mi propio juego en consecuencia. Es como... si estuviera sincronizado con el propio juego".
Mientras Naruto hablaba, los ojos de Hinata se abrieron de par en par, y una sonrisa de complicidad se dibujó en sus labios.
"Es como si tuvieras una forma de conciencia espacial", dijo Hinata, con los ojos llenos de comprensión. "No sólo reaccionas a lo que ocurre delante de ti, sino que también percibes intuitivamente el espacio que te rodea, la posición de tus oponentes, los movimientos de tus compañeros de equipo e incluso la trayectoria de la pelota".
Los ojos de Naruto se abrieron de par en par cuando las palabras de Hinata cobraron sentido para él. "Conciencia espacial...", repitió, pensando en lo que significaba. "No se trata solo de reaccionar a lo que ocurre en el momento, sino también de comprender la dinámica de todo el campo de juego".
Hinata asintió, con expresión animada. "Exacto", afirmó. "Al aprovechar esta conciencia espacial, eres capaz de anticiparte a las jugadas antes de que sucedan, ajustar tu posición en consecuencia y tomar decisiones en fracciones de segundo con mayor precisión."
Mientras Naruto asimilaba lo que Hinata había dicho, sintió una sensación de claridad, que le ayudó a comprender las nuevas habilidades que había estado experimentando en la cancha. Con una sonrisa decidida, volvió a su entrenamiento, ansioso por seguir desarrollando sus habilidades y explorando las profundidades de su conciencia espacial.
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Naruto - El milagro olvidado
RandomNaruto Uzumaki, un joven con problemas personales, descubre su pasión por el baloncesto tras ver un apasionante vídeo. Ingresa en el Instituto Teikō con el objetivo de convertirse en una leyenda del baloncesto, uniéndose a la legendaria Generación d...