𝐒𝐓𝐀𝐑𝐒𝐓𝐑𝐔𝐂𝐊 [Rubius X Tú]

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Al día siguiente desperté, me levanté a darme una ducha y me arreglé un poco. Cuando bajé a desayunar noté que Rubén aún no estaba despierto así que solo calenté un poco de lo que había sobrado de la cena

Empecé a desayunar y como no tenía en que distraerme, simplemente mantuve mi mirada en un punto fijo. Terminé de desayunar y después de unos minutos escuché los pasos de Rubén

—Buenos días.— me saludó con una sonrisa —¿Dormiste bien?.—

Me levanté para dejar mis platos en el fregadero

—Si, pensé que me iba a costar dormir.— reí —Para ser la primera noche lejos de mi familia se siente raro.— 

—Ya era hora de que salieras de ahí.— se burló —Parece que le tienes mucho amor a tu familia, pero seguir viviendo con ellos podría crearte dependencia, ya estás grandecita.— 

—No iba a vivir toda mi vida con ellos.— dije como si fuera obvio —Solo estaba esperando el momento indicado para irme, ya sabes, con Felipe.— 

Hubo un ligero silencio, él se sentó así que me tomé la molestia de calentarle un poco de comida y dársela, así también desayunaba. Me agradeció con una pequeña sonrisa y me senté con él para acompañarlo

—Tengo una nueva condición para esta "relación".— exclamó después del primer bocado

—Lo que quieras.— dije, después de todo la que había puesto más condiciones había sido yo 

—No menciones más a tu exnovio.— pidió y lo miré confundida —Siento que afecta un poco nuestra convivencia.— 

—¿Por qué lo afectaría?.— cuestioné bastante intrigada 

—Estás muy aferrada a él, imagínate que no puedas cumplir con tu papel por andar pensando en eso.— intentó explicar, para mí no tenía mucho sentido —¿Qué te parece?.— 

—Si te resulta importante, puedo intentar no mencionarlo.— me comprometí —Estuve en una relación con él durante bastante tiempo, no puedo olvidarlo de la noche a la mañana.— 

—Con que lo intentes está bien.— parecía más tranquilo 

Asentí y lo dejé seguir desayunando. Él me empezó a contar algunos aspectos más privados de su trabajo y de su vida, supongo que me estaba preparando para cualquier ocasión, igual para mí era bastante entretenido escucharlo hablar

—Nicola me dijo que en un mes tenía planeado un evento con una revista, es extraño que me quieran para algo así.— contó de repente —Y también estoy organizando un torneo con distintos creadores que vendrán a concursar, muchos son colegas y amigos así que te necesitaré atenta.— 

—Sabré manejarlo.— dije confiada en mí —Solo es disimular una relación, ¿qué podría salir mal?.— 

—Cuando alguien pregunta "¿qué podría salir mal?" es una señal de que algo saldrá mal.— soltó y reí por aquella creencia 

—Pues eso no aplica conmigo, para esos eventos ya habremos pasado más tiempo juntos así que será más fácil todo.— lo tranquilicé —Lo haré bien, no arruinaré nada.— 

—Confiaré en ti ¿vale?.— se resignó 

—Vale.— asentí sonriente 

Seguimos charlando, ahora fue mi turno de hablar sobre mí, le conté lo más importante de mi vida; mi familia. Rubén me escuchaba atento y procuraba no interrumpirme, sentirme escuchada era lo más increíble del mundo

—¿Hoy prenderás?.— cuestioné cuando me quedé sin temas 

—Hoy no me apetece.— suspiró riendo un poco —¿Por qué? ¿Me vas a invitar a salir?.— alzó una ceja 

—Realmente no, tenía planeado salir a un parque cerca de mi casa para verme con mi hermano.— indiqué —Pero si quieres puedes acompañarme, no estaría mal que la gente nos vea juntos.— 

Lo pensó un poco y alzó su dedo dándome la razón

—Eres inteligente, me agrada.— soltó y reí —Me arreglaré y saldremos.— 

—¿Te arreglas para salir?.— cuestioné burlona 

—¿No se nota?.— dramatizó 

—Parece que te pones lo primero que ves.— reí al ver su expresión 

—Joder, creo que tengo mucho estilo para esta relación.— bufó 

Esperamos unos minutos hasta que terminó de desayunar y ambos nos levantamos de aquella mesa 

—Por cierto, ¿me acompañas?.— pidió —Nuestra plática de ayer me dejó algo pensativo y quiero darte algo que tenía guardado.— 

—Me da curiosidad lo que me quieras dar así que vamos.— accedí empezando a seguirlo 

Subimos y caminamos hasta su habitación. Entramos, pero él se quedó parado junto a un mueble, parecía buscar algo así que le di su espacio y me senté en la cama 

—Lo tenía aquí ayer, pero no lo encuentro.— justificó su tardanza 

—No te preocupes, yo espero.— indiqué 

Mientras él seguía buscando, yo di un pequeño recorrido con la mirada. Su habitación era bastante grande, tenía toques elegantes, pero a su vez bastante mercancía de animes o videojuegos que le gustaban, era justamente como cualquier fan se la imaginaría 

—¡Aquí está!.— exclamó así que lo miré 

Se giró y caminó hasta sentarse a mi lado. Lo miré sorprendida al ver como tenía en sus manos una cadena plateada 

—Me gusta mucho usar esta, pero no la uso diario.— contó —Dar un anillo es muy comprometedor así que te doy esto, lo siento como un detalle lindo y más importante. Es un accesorio sencillo, pero fraternal.— 

No me negaría así que me giré un poco y recogí mi cabello, él entendió y me ayudó a ponérmela. Cuando la tuve simplemente lo miré de regreso, sus ojos transmitían tanta paz que fue imposible no quedarme pasmada... Era muy rápido para empezar a olvidarme de mi ex ¿no?