Hinata Shoyo

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Soobin había sido dejado en la puerta de su casa, Seokjin ni Yeonjun mencionaron nada de su ausencia, nadie toco el tema. De cierta manera se sentia agradecido, mientras sus mayores llevaron el camino lleno de risas y anécdotas.

Lo dejaron frente a su puerta, ambos se despidieron de Soobin, deseándole una buena noche y recordándole que se cuidara.

Al quedar solo, Soobin se quedó parado un momento, observando el hogar de Beomgyu, que estaba a la vista. Desde su posición, notó que la casa estaba iluminada y parecía haber movimiento en el interior.

¿Habría llegado ya? Tal vez no.

Seguro ya lo sabría, pensó, mientras miraba la bolsa con un presente qué había comprando, hasta que recordo el osito de felpa que aún conservaba en su habitación. Con una mezcla de emoción y nervios, corrió dentro de su casa, subiendo a su cuarto, donde el oso estaba esperándolo.

Lo tomó con cuidado, casi como si fuera un pequeño tesoro, y lo guardó en una bolsa junto a una tortuguita de peluche que había comprado para él recientemente. Antes de salir, su mirada recayó en el frasco de perfume que solía usar. La imagen de Beomgyu abrazando el osito cruzó por su mente, y mordió su labio inferior en un gesto de indecisión. Finalmente, con un suspiro nervioso, roció un poco de su perfume en la tortuga de felpa. Al instante, un ligero escalofrío de vergüenza recorrió su cuerpo, pero sacudió la cabeza, decididamente. Antes de arrepentirse, salió de su habitación y fue directo al umbral de su casa, esperando ansiosamente.

Los minutos parecían eternos, pero finalmente, la lámpara de la calle iluminó la figura de Beomgyu, que caminaba con una mochila en la espalda, arrastrando los pies. Al verlo, Soobin sintió una explosión de emociones dentro de sí y, con el corazón latiendo aceleradamente, el recuerdo de ellos en el acuario generaba nervios, caminando hacia a él levanto la mano en un saludo tímido.

Beomgyu esbozo una sonrisa en cuanto lo miró.

—Llegaste primero —comentó Beomgyu con una pequeña sonrisa, que hacía que Soobin se sintiera cálido por dentro.

Soobin, asintió mientras mantenía la bolsa de papel oculta detrás de su espalda.

Ambos comenzaron a caminar juntos en dirección a la casa de Beomgyu. Los dos parecían compartir una timidez similar, que los hacía dar pasos pequeños y lentos, como si inconscientemente intentaran prolongar el tiempo que pasaban juntos.

Después de unos minutos, Beomgyu rompió el silencio, su tono curioso:

—Entonces, ¿quién te llevó a casa? No vi cuando te fuiste.

Soobin se detuvo un momento, usando una sola mano para hacer una seña que significaba "un amigo". Pero, al notar que se veía un poco torpe haciéndolo, Beomgyu arqueó una ceja, sonriendo con curiosidad.

—¿Por qué no usas ambas manos? —preguntó en tono juguetón, notando que Soobin mantenía su otra mano oculta detrás de su espalda.

Al escuchar la pregunta, Soobin sintió que sus mejillas se calentaban. Tragó saliva y, con un suspiro nervioso, extendió la bolsa de papel hacia Beomgyu, sin atreverse a mirarlo a los ojos.

Beomgyu tomó la bolsa con una mezcla de sorpresa y emoción. Miró a Soobin, intentando leer en su expresión alguna pista sobre el contenido del regalo. Cuando abrió la bolsa y vio a su osito junto con la pequeña tortuga, sus ojos se iluminaron y una leve sonrisa apareció en sus labios. Sacó la tortuga de la bolsa, notando el sutil aroma que la envolvía.

—¿Para mí? —preguntó en voz baja, todavía sorprendido y con un toque de timidez en sus ojos.

Soobin asintió rápidamente, desviando la mirada, sintiéndose abrumado por la mezcla de nervios y vergüenza.

"Dear name" 《SOOGYUN》 |Soobin×Beomgyu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora