Hacker [Kooktae-Kookv].

Capítulo 6: La Misión en las Montañas.

El viaje hacia el norte fue largo y peligroso. La carretera que los llevaba fuera de la ciudad estaba desierta, pero eso no significaba que estuvieran a salvo. Jungkook se mantenía alerta, sus ojos barrían constantemente los alrededores, buscando cualquier señal de amenaza. Taehyung, por otro lado, estaba en silencio, pero su mente no dejaba de trabajar. Cada vez que pasaba cerca de una ciudad o base militar abandonada, su mente se aceleraba, buscando cualquier pista que lo acercara más al Director.

Las montañas se alzaban ante ellos, un paisaje desolado que parecía reflejar el caos del mundo que habían dejado atrás. La estación de comunicaciones que estaban buscando se encontraba en lo profundo de esas montañas, oculta bajo una red de túneles subterráneos.

"Ya casi llegamos," dijo Jungkook, viendo la silueta de la instalación en la distancia. El viento soplaba fuerte, arrastrando la nieve que cubría el suelo. "Debemos movernos con cautela."

Taehyung asintió, aunque sus ojos no dejaban de estudiar el entorno. El frío cortante parecía helar el aire a su alrededor, pero ninguno de los dos lo sentía realmente. Lo que les esperaba en ese complejo subterráneo era mucho más aterrador que cualquier tormenta.

Cuando llegaron a la entrada de la instalación, Jungkook no tardó en detectar la presencia de guardias. Algunos patrullaban cerca, armados hasta los dientes. A pesar de la oscuridad, Taehyung no perdió el ritmo. Utilizó su habilidad para hackear las cámaras de seguridad e incapacitar las alarmas sin hacer ruido. Era un maestro en esto. Mientras tanto, Jungkook se encargaba de neutralizar a los guardias con rapidez y eficiencia, su entrenamiento militar sirviéndole para moverse como una sombra, casi imposible de detectar.

"Estamos dentro," susurró Taehyung después de unos minutos. "Ahora, al corazón del complejo."

Adentrándose en los pasillos oscuros y fríos, los dos hombres sabían que ya no podían dar un paso en falso. Estaban al borde de una revelación, pero también al borde del peligro más grande que jamás habían enfrentado.

Al llegar a la sala principal, Taehyung se acercó al terminal que controlaba la red de información del complejo. Jungkook lo observó con atención, consciente de que este podría ser su último movimiento. Taehyung introdujo sus credenciales, pero antes de que pudiera acceder a la información, un ruido interrumpió el ambiente silencioso. Unos pasos resonaron en los pasillos cercanos.

"Nos están siguiendo," dijo Jungkook, poniéndose en guardia.

"Es el Director," susurró Taehyung, casi sin aliento. "Lo sé por el código. Está cerca."

Y en ese momento, la puerta se abrió de golpe.

El Director apareció en el umbral, rodeado por sus soldados de élite, con una expresión tan fría y calculadora que Jungkook supo al instante que no se enfrentaban a un hombre común. Estaban frente al cerebro detrás del Proyecto Épsilon.

"Bienvenidos," dijo el Director, su voz resonando en la sala vacía. "Han llegado demasiado tarde."

Jungkook no dudó ni un segundo. Sin pensarlo, se lanzó hacia el Director, sabiendo que, al final, solo uno de ellos saldría con vida.