⋆｡˚୨ La Niñera ୧˚｡⋆ ˗ˏˋ☭ ×🇨🇴 ˎˊ.

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Colombia  suspiro . Llevaba viendo al pequeño niño hacer su tarea desde hace media hora, Tampoco es como si estuviera desesperado por ayudarle con una tarea que el posiblemente no vaya a entender. Pero estar sin hacer nada le irritaba.

Intento acercarse para ver en que podía colaborar pero se dio cuenta de que joven se había quedado completamente dormido con la cara reposando en su mano.

El pelinegro al ver esto retiro los tapones de Rusia y  abrió la puerta de la habitación y vio a la mucama cargar a un bebé por el pasillo mientras lo alimentaba con un biberón,  caminaba a la vez que lo mecia y le cantaba.

La mujer estaba agotada y aun había otro bebé llorando.

Colombia cruzo miradas con ella y esta simplemente hizo una cara de desesperación y como si necesitará ayuda.

— Que aconteció?— pregunto con voz baja esperando lo peor.

— El joven se quedo dormido — dijo con tranquilidad mientras que la mujer se mordió el labio inferior derrotada. Se había quedado quieta y el pequeño niño comenzó a llorar con más fuerza.

El de ojos negros se acercó y miró de reojo las puerta qué había. No parecían estar desocupadas , pero buscaba mas puntualmente la oficina del hombre dueño del territorio y se acercó a la mujer. Esta dio un paso atrás.

— Puede ir a la sala yo me encargo — dijo intentando que el tutor se retirara. URSS le había prohibido estrictamente que se acercaran a los niños. Solo ella podía. Era su trabajo después de todo.

Pero el llanto que veía de todos lados la abrumo de sobremanera y sin darse cuenta le entregó al bebé a Colombia y se dirigió al cuarto de Rusia.  Colombia lo recibió algo confundido y rápidamente el ruido del insoportable llanto invadió sus oídos.

Acercó el biberón a la boca abierta del infante que lloraba y empezó a recorrer todo el pasillo y mecia al niño como antes lo había hecho la niñera.

Era una excusa perfecta para mirar más a fondo todo. Aunque aun no descubría cual de todas las puertas era la oficina o cual de todos era el cuarto de la unión.

Echo un vistazo al cuarto abierto. Habían dos cunas en la habitación donde Colombia suponía que estaba el otro niño que lloraba . Este cuarto era igual de triste y desolado que el del mayor.
Con razón el pequeño niño lloraba.  Estaba pidiendo a gritos que lo sacaran de ahí.

Cuando la mucama acostó al pesado niño en la cama y uno de los llantos de los bebes se dicipo se dio cuenta del error que había cometido y rápidamente vio como aquel tutor le daba pequeñas palmadas en la espalda del niño para sacarle los gases.
La mucama  al ver como el bebé eructaba se relajo y justo cuando iba a retirar al niño de los brazos del más alto , el bebé le vomito el hombro a Colombia.

El liquido blanco y poco denso cayó y el cafetero puso sus ojos en blanco.
La joven  abrió sus ojos apenada y retiro al niño que por fin se había quedado dormido.

— lo lamento.— se disculpo y al ver el desastre que hizo el pequeño bebé quería morirse.

Y temblo del miedo cuando escucho la puerta de la casa abrirse. Eso solo podía significar que el señor ya había llegado.

Colombia no entendió a que se debía el miedo y como en la casa había calefactor se quito el abrigo sintiendo un poco de frío pero prefería eso a pasear por ahí, todo vomitado.

— Moscú,  estoy aqui— Hablo una voz firme y gruesa desde el piso de abajo y Colombia miro confundido a la mujer. Así debía de llamarse pues enseguida bajo con el bebé en brazos y Colombia bajo con ella instintivamente.