Viajes al pasado y rencuentros inesperados

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ESTE CAP SE ENCUENTRA DE 2 SEMANAS DESPUES DE LOS EVENTOS DE LOS OTROS CAP ESPERO QUE LE GUSTE

La sala de investigación en el laboratorio de la U.A. estaba llena de equipo de alta tecnología. Jin y Kenji Kaminari, con la mente inquieta y la curiosidad al máximo, se habían desviado un poco del grupo mientras exploraban el área. Mientras tanto, sus gemelos menores, Raiden y Reiju, no estaban tan entusiasmados por el lugar, pero aún así los seguían, con una mezcla de cautela y curiosidad.

Entre las máquinas de alta gama, Raiden y Reiju se encontraron con un extraño dispositivo que no había sido registrado en los archivos de la U.A. El objeto era pequeño, con un diseño que parecía sacado de otro tiempo, pero los botones y luces brillaban con una intensidad inusual. Sin pensarlo demasiado, Kenji decidió presionar un botón.

—No...Kenji, ¿seguro? —le advirtió Jin, pero era demasiado tarde.

Un destello de luz brillante envolvió a los cuatro jóvenes antes de que pudieran reaccionar, y el aire se volvió denso, como si estuvieran siendo absorbidos por una corriente eléctrica. Cuando la luz se desvaneció, ya no estaban en el laboratorio. Los cuatro se miraron confundidos, sin comprender lo que había sucedido.

Raiden, rápidamente, se levantó y comenzó a observar el entorno. Estaban en un pasillo de la U.A., pero algo no encajaba. Todo se veía... diferente. Las paredes, las ventanas, incluso el estilo de la arquitectura, todo era más... antiguo.

—¿Dónde estamos? —preguntó Raiden, ajustándose los auriculares que siempre llevaba consigo, como si eso pudiera aclarar la situación.

Jin, un tanto desconcertado, se acercó a su hermano mayor.

—Esto no tiene sentido... ¿qué está pasando?

Reiju frunció el ceño y se cruzó de brazos, mirando a su alrededor con cautela.

—¿Esto es un juego o qué? —dijo, claramente incómoda.

Los gemelos menores, Kenji y Jin, intercambiaron miradas.

Perdon por decirlo pero no solo los 4 estamos aquí....diria Kenji con cara pálida

Se ve que Kasui, Mirai, Reo, Shota, Mia, Reiji, Katsu, Hannabi y Izaya habian viajado en el tiempo con ellos

 Que demonios hicieron donde estamos si esto es una broma les juro que esto no terminara bien para ustedes—dijo Kasui con un enojo bien visible para el resto

Mirai, que  mantenía una calma inquebrantable, fue la primera en empezar a analizar la situación.

— Parece que hemos viajado al pasado. —comentó, sin mostrar demasiada preocupación, como si ya estuviera familiarizada con situaciones complicadas.

Reo  más observador, se adelantó un paso.

—Sí, todo parece indicar que estamos en el pasado, en la época en la que nuestros padres estaban en la U.A. —dijo, mirando a su alrededor con un leve asentimiento.

Los chicos intercambiaron miradas. La declaración de Mirai dejó a todos en silencio por un momento. Todos sabian que Jin y Kenji habian provocado este viaje accidental pero no habia tiempo para enojarse hasta que........

— Alguien viene —dijo Shota el menor de los Todoroki

—¿Quiénes son esos? —murmuró Izaya, casi como un susurro.

Unos segundos después, se dieron cuenta de que se trataba de los estudiantes de la U.A., pero eran jóvenes, como si estuvieran viendo a sus padres en sus versiones de estudiantes. La confusión aumentaba. Raiden se acercó a un grupo de ellos, dispuesto a descubrir lo que sucedía.

—Eh... ¿perdón? —dijo, acercándose al grupo que pasaba por el pasillo.

Deku, que iba caminando junto a sus compañeros de la clase 1-A, se detuvo al ver a los chicos. En ese momento, fue como si algo extraño ocurriera, como si los reconociera pero no pudiera ubicar a qué se debían sus rostros familiares.

—¿Quiénes son ustedes niños? —preguntó Deku, dando un paso atrás con cautela.

Raiden se quedó mirándolo por un momento y luego se encogió de hombros, haciendo un gesto a sus compañeros para que no se alteraran.

—Vaya... esto es raro. —Raiden frunció el ceño, aún sin saber lo que estaba pasando.

Al ver el rostro desconcertado de Deku, Reiju intervino.

—Nos perdimos. Estamos buscando la salida. ¿Pueden decirnos en qué año estamos? —preguntó con tranquilidad, mientras todos los chicos la observaban con más intensidad.

Kirishima, quien siempre se mantenía tranquilo y sonriente, miró a los chicos con una mezcla de curiosidad y desconfianza.

—¿Están perdidos? ¿Y en qué año estamos? Eso es un poco raro. Nosotros estamos en el 1 A año en la U.A., si eso les ayuda... —dijo, pero su tono mostraba que no entendía nada de lo que estaba pasando.

De repente, Kasui Bakugo, quien hasta ese momento había permanecido en silencio, observó a los chicos más detenidamente. Algo en su rostro mostraba un leve atisbo de sorpresa.

—¿Quiénes son ustedes niños ademas como ingresaron aquí? No los he visto antes...  —dijo, frunciendo el ceño y cruzando los brazos, con una actitud desafiante.

Raiden decidió cambiar de estrategia. Con una sonrisa de lado, miró a su alrededor antes de responder.

—Perdon nos perdimos,persiguendo a un ave y en ese trayecto logramos entrar sin saberlo —dijo, pero su tono tranquilo no logró ocultar su incomodidad.

Lo que no sabían era que en este mismo momento, el grupo de la clase 1-A estaba empezando a sospechar algo extraño.

—Eso tiene mucho sentido son solo niños su curiosidad les ganó —dijo Momo, quien estaba un poco desconcertada, pero al mismo tiempo había algo familiar en la actitud de los chicos.

Sin embargo, la tensión aumentó rápidamente. Un rayo de electricidad brilló en el aire cuando Kenji, quien no había estado tan concentrado en la situación, dejó escapar un pequeño golpe de su poder. En un instante, un destello de energía recorrió el pasillo, haciendo que varios objetos en el entorno comenzaran a chisporrotear.

—¡Kenji! —gritaron todos al mismo tiempo, mirando aterrados cómo algunas luces del pasillo se apagaron y las paredes parecían estar vibrando.

Raiden reaccionó rápidamente, dando un paso adelante para calmar a su hermano.

—¡Cálmate! —gritó, mientras trataba de controlar la energía en el aire. La situación estaba a punto de volverse peligrosa.

Por suerte, no pasó a mayores. Los chicos de la clase 1-A miraron asombrados y algo preocupados, sin saber si se trataba de un accidente o si algo más estaba ocurriendo.

—Esto es... ¿de verdad no los hemos visto por ahí? —preguntó Bakugo, quien estaba empezando a sospechar que la situación no era tan simple como parecía.

Raiden, con los nervios a flor de piel, intentó disimular mientras miraba a sus compañeros. Afortunadamente, no había ocurrido ningún desastre mayor. Sin embargo, la preocupación seguía en el aire.

—Lo siento... es solo que él a veces... pierde el control —explicó Raiden, con tono serio, mientras Kenji comenzaba a disculparse avergonzado.

Con el incidente controlado, las miradas de todos los presentes se cruzaron. A pesar de que las explicaciones no se alineaban, había algo que mantenía la atmósfera llena de incertidumbre.

Jin, observando el pasillo de nuevo, comenzó a preguntarse si todo esto era realmente un error o si había algo más en juego.

Pero en ese momento, un leve temblor recorrió la academia, como si el mismo lugar estuviera reaccionando a la energía que había liberado Kenji. Todos se quedaron en silencio, mirando a su alrededor, sin saber qué hacer ni cómo reaccionar ante lo inexplicable de la situación.

—Esto se está volviendo más extraño de lo que pensaba —murmuró Jin, con una ligera sonrisa nerviosa.

𝕊𝕚𝕘𝕦𝕚𝕖𝕟𝕥𝕖 𝕟𝕚𝕧𝕖𝕝 (𝔹ℕℍ𝔸)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora