Cookies (Jikookmin)

4

Jimin caminó a regañadientes a casa. 

Antes siempre tenía prisa por llegar a su casa, pero ahora ya no tiene prisa. 

Por la noche, nunca salió de la habitación y escuchó a Jungkook tratando de establecer contacto con su hija, pero aparentemente no funcionó del todo. La niña lloraba constantemente y llamaba a su madre, Jungkook intentó consultar con Jimin, y él espetó y lo envió a... bueno, lo envió lejos y enterró su cabeza debajo de la almohada, solo para no escuchar el llanto de la niña.  

Por la mañana, salió corriendo de la casa temprano, sin siquiera prestar atención a la pelea en la cocina que Jungkook comenzó allí en un intento de cocinar para la bebé. 

Dejó su teléfono en modo silencio en el casillero, ya que el menor, en un ataque de pánico, le escribía y llamaba constantemente. 

Dejará que él mismo resuelva los problemas con su hija. 

Logró hacerla, que ahora aprenda a cuidarla. 

La cabeza de Jimin estuvo llena de pensamientos similares todo el día y todo se le cayó de las manos, razón por la cual el chef pronto lo echó de la cocina. 

Después de eso, Jimin llamó la atención de su padre y decidió que su hijo estaba enfermo, por lo que lo envió a casa. 

Pero Jimin realmente no quería volver a casa. 

Pasó la hora del almuerzo en el centro comercial, deambulando sin rumbo fijo. 

Jungkook no lo ha atormentado en su teléfono con llamadas y mensajes durante tres horas, lo que en sí mismo es sospechoso, y Jimin estaba preocupado si todo estaba bien con ellos. 

Ya se acercaba a su entrada cuando una vecina saltó por la puerta y comenzó a gritarle: "¡Ya llegaste, querido!. ¿Adónde has estado yendo todo este tiempo? ¿Olvidaste apagar la televisión o es una nueva broma entre los jóvenes? Ayer su hijo rompió a llorar y ahora volvió a empezar. Lleva ya media hora gritando. Dudo que a ustedes, holgazanes, se les haya confiado un niño, así que apaguen esa sirena, ¡de lo contrario llamaré a la policía! 

Jimin se disculpó con la mujer, hizo una reverencia y corrió hacia el ascensor. 

Escuchó el llanto de un niño tan pronto como llegó a su piso. 

Ni siquiera es un llanto, es un rugido. 

¿Qué está pasando ahí que Miyeon grita así? 

Jimin rápidamente abrió la puerta y entró al departamento, quitándose los zapatos y desnudándose mientras caminaba. Corrió hacia el pasillo con una zapatilla en la mano y vio a Jungkook, que estaba jugando a sus juegos de computadora con los auriculares puestos. 

Park sabía por experiencia que si alguien se quedaba atrapado en un juego online, no podías arrancarlo de la computadora por las orejas. E incluso estando a una distancia de dos metros de él, escuchó disparos y conversaciones que sonaban en sus auriculares. 

No es de extrañar que no escuche llorar a la niña. 

Jimin le arrojó sus zapatos al menor con todas sus fuerzas, golpeándolo en el hombro y, sin esperar reacción, se dirigió inmediatamente a la habitación donde ayer habían instalado al bebé. 

No usaron esta habitación y guardaron todo tipo de cosas allí, pero ayer Jungkook limpió parte del espacio, puso una cuna y las cosas que les trajeron. 

Jungkook saltó de su silla por el impacto e inmediatamente se quitó los auriculares cuando vio al mayor enojado. 

Inmediatamente lo siguió, y ambos se alejaron de la puerta después de que Jimin la abrió y el aire apestoso de la habitación los golpeó.