instant fever (heehoon)

xxiv [Extra 4, Fin]

El día siguiente se hizo presente,  Sunghoon abrió los ojos para encontrar el otro lado de la cama vacío,  suspiró antes de levantarse y pestañear un par de veces para acostumbrarse a la luz mañanera, entonces vio a Heeseung salir del baño con la toalla en la cintura, levantó una ceja antes de acercarse a él y atraerlo a su cuerpo depositando un beso rápido en los labios contrarios, recibiendo un sonrojo de Heeseung que no se esperaba aquello.

— B-buenos días Hoon — Heeseung dijo intentando no mirar a Sunghoon a los ojos.

— Días, por que bueno estas tú, mi amor — Sunghoon pasó su palma por el abdomen de Heeseung quien suspiró entrecortado.

Y si, la última vez que lo habían hecho había sido en el cumpleaños de Heeseung, donde obviamente Sunghoon le regaló, aparte de regalos, una satisfacción extra.

Pero esta vez Sunghoon tenia otros planes para no dejar que eso ocurriera nuevamente,  o por lo menos no de la misma manera.

Tomando a Heeseung de la cintura lo empujó sobre la cama recibiendo un quejido del mayor, después rió levemente con los ojos cerrados y cuando se dispuso a levantarse, el peso del cuerpo ajeno lo mantuvo quieto, por eso abrió los ojos de golpe notando la sonrisa ladina de Sunghoon.

— ¿Qué haces?

— Deberíamos hacerlo de nuevo — Dijo Sunghoon besando el cuello de Heeseung sacandole algunos suspiros.

— ¿Seguro? — Una sonrisa apareció en el rostro de Heeseung,  para decir verdad se había estado conteniendo, principalmente por que su novio estaba ocupado en diversos papeles como actor, y dejarlo adolorido no era una buena opción.

— Sí — Murmuró cerca del oído del contrario — Pero un poco diferente.

— Me gusta experimentar — Heeseung posó sus manos en los muslos ajenos pero Sunghoon se apresuró a alejarlo — ¿Mm?

— Esta vez yo estoy al mando — Sunghoon presenció alegre la expresión confusa de Heeseung, quien negaba con la cabeza repetidas veces — ¿No quieres? — Heeseung pausó sus movimientosirando fijamente el cuerpo de Sunghoon.

Con el cabello desorganizado, unos ojos que lo miraban con lujuria y unos brazos de los que comenzaba a hacerse consciente, titubeó cuando logró ver esa sonrisa que dejaba ver los colmillos blancos de Sunghoon sobresaliendo.

— Yo... Uh... — Se quedó ensimismado al ver al chico frente suyo, era hermoso, muy hermoso, y había cambiado un poco,  había madurado y tenía unos rasgos más marcados ahora que era todo un adulto.

— ¿Por qué lo piensas tanto? ¿No quieres dejarme disfrutar un poco de ese hermos-?— Fue interrumpido por Heeseung.

— Esta bien... — Las mejillas sonrojadas del mayor no se comparaban con las orejas color carmesí de Sunghoon quien saltaba en su lugar presionando a Heeseung que estaba abajo suyo — Hazlo bien, lúcete.

Los ojos de Sunghoon brillaron antes de tomar a Heeseung y acercarlo a él (más de lo que ya estaba) y comenzar a besarlo desde el cuello hasta el abdomen.

Heeseung tapaba con la mano su boca para evitar detrás escuchar nada a Sunghoon,  pero el menor al notar esto, dejo de recorrer todo el torso para enfocarse en una zona en especifico, sus pezones.

Heeseung dejó caer su cabeza hacia atrás alejando la mano de su boca y disfrutando la sensación que la boca de Sunghoon estaba provocando,  uno que otro gemido fue música para los oídos de Sunghoon, pero antes de que lo pudiera asimilar, Heeseung volvió a cubrir su boca.

— Déjame oírte — Pidió Sunghoon y Heeseung lo miró de reojo antes de hacer caso omiso a su petición mordiendo una almohada.

— Mo — (No) Dijo Heeseung.