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Termine la canción y hubo un silencio sepulcral en el salón, de pronto se escucharon aplausos estruendosos, y fue una gran sorpresa ver a todos de pie aplaudiendo, me levante de la butaca he ice un par de reverencias.
Al terminar la presentación Raquel se acercó a mí
-Mei, que te paso? No te vez muy bien- dijo preocupada
No podía controlar más mis lágrimas así que me acerque a ella y la abrace, llore, me desahogue y le conté todo lo que paso con Emiliano
Llegue a casa muy cansada, así que después de cambiarme la ropa y desmaquillarme me perdí entre mis cobijas y me dormí
El día siguiente fue uno de los más pesados de mi vida, recordaba todo lo que paso con Emiliano, pareciese que lo estuviese viviendo otra vez, las lágrimas brotaban por montones, los segundos parecían pasar lentamente, como si se confabularan contra mí.
Emiliano me ha llamado muchas veces pero no le he contestado, el solo hecho de pensar que me engaño, es terrible y me lastima.
Raquel ha venido un par de veces a mi casa y no hemos hablado de cosas relacionadas con Emiliano, Raquel dice que hablar de otras cosas me ayudara a olvidarme de él, pero desgraciadamente no lo consigo, ojala y algún día lo logre.
Ya han paso 2 meses desde que encontré a Emiliano besando a Diana, ese recuerdo me atormente todos los días, me aniquila poco a poco.
Una tarde Raquel fue a mi casa para según ella, invitarme a salir un rato
-Mei, por favor vamos, te divertirás lo prometo
-Raquel, no tengo ganas de salir
-Mei, no puedes pasar todos los días encerrada en casa, yo ya estoy empezando a creer que vas a la Universidad por que no te queda de otra.
-Pues bien pensado, no me queda de otra- dije con todo el sarcasmo que podía salir de mí
Raquel era muy insistente y al ver mi negativa se acercó un poco a mí y me zarandeo un poco
-Vamos, y no me importa lo que pienses
-Hasshh, Raquel ya está bien.
Me levante y fui al armario y me puse unos vaqueros negros, una blusa celeste con magas y unos convers negros y salimos de casa.
Raquel me hizo caminar tanto, que llegar al cine fue un momento glorioso, me dijo que escogiera la película, había algunas pero la mayoría eran románticas, y solo había una de terror "el juego del miedo", así que me decidí por esa película, nos sentamos cómodamente a ver la película y para mi suerte no había ni un poquito de amor, pero había mucha sangre para mi gusto.
Salimos del cine y fuimos a comer una hamburguesa y luego nos fuimos a mi casa.
Al llegar, Emiliano estaba afuera en la entrada, al verlo el dolor que sentía se transformó en coraje y acercándome a él, dije
-Qué haces aquí?
-Mei, por favor escúchame, déjame explicarte lo que paso, ya han paso dos meses y no has querido responder mis llamadas
-Emiliano yo no tengo nada que hablar contigo y te agradecería que me dejes en paz- grite
Raquel, que como siempre se mantenía al margen de mis discusiones, intervino y dijo
-Mei, no te pongas así, tranquilízate
-No me tranquilizo nada, el me engaña y tú te pones de su parte- grite
-No Mei, sabes que, mejor entra a tu casa y así podrás tranquilizarte.
Ingrese a mi casa, tal como Raquel me lo indicaba
-Emiliano, que se supone que haces??- dijo Raquel muy sorprendida
-Raquel, tú no sabes cómo estoy sufriendo, estos dos meses sin Mei, han sido una tortura.
-Mei está sufriendo también, creo que hasta más que tú
-Yo quiero explicarle que paso pero ella no quiere escucharme.
-Pero que fue lo que pasó??, según lo que me conto Mei, dice que te vio besando a Diana
-No es lo que parece, Diana me beso por que se estaba despidiendo y me agarro desprevenido, Raquel tienes que creerme y de paso ayudarme
-Está bien yo te ayudo, pero yo no me responsabilizo de lo que Mei le pueda hacerle a Diana cuando se entere de la verdad
-Bueno está bien, mañana yo llevare a Diana a la entrada de la Universidad y tú encárgate de que Mei escuche la conversación que voy a tener con ella.
-Ok, yo me encargo de eso
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