Capítulo 14

2.4K 169 21
                                    

Jeff POV

Pasaron los días y Juliet seguía sedienta de sangre. No paraba de matar...lo hacía de acuerdo a su estado de ánimo. Cuando estaba de buen humor, torturaba a sus víctimas de una forma inimaginable. Desde simplemente atarlos a una silla y torturarlos físicamente, hasta hacerles cortes profundos con un cuchillo afilado.

Yo ya no podía detenerla...hacia lo que deseaba. Me partía el alma ver a la mujer que amaba matar gente. Pero era inevitable... Laughing la había convertido en un monstruo, en un ser desalmado que asesinaba gente por placer.

Estaba en aquella cabaña en el bosque, pensando y reflexionando sobre la atrocidad que habían creado.

No puedo soportarlo más, tengo que detener a Juliet. Si no lo hago, esta masacre innecesaria continuará, e incluso, perderé a la persona que amo.

Volví a pensarlo de nuevo...
¿Por qué demonios me importaba tanto que se hiciera una masacre? Yo soy un asesino en serie. ¡¿Qué demonios me pasa?!

No me siento bien. Siento un vacío en mi pecho. Como si algo me faltara...

"Jeff, llevas días sin matar gente. Tal vez te falta divertirte... Vamos a alguna casa para escuchar los gritos desesperados de alguna persona."

Pero no puedo, con la situación de Juliet...

"Jeff, sabes muy buen que ahora es problema de ella. Ve y diviertete como solías hacerlo. Puede que esto mejore tu tensión. Escuchar a alguien suplicar por su vida será muy bueno para tu situación"

Habiendo escuchado a mi mente, decidí salir a torturar algunas almas inocentes. Cortar cuerpos inocentes y escuchar gritos desesperados era lo que más me gustaba.

(...)

Caminé por un largo rato por un barrio viejo y muy peligroso. Las casas eran de apenas dos pisos, algunas tenían ventanas rotas, otras puertas rechinantes y otras apenas se sostenían en sus cimientos.

La gente que vivía allí eran mayormente prostitutas, drogadictos, alcohólicos y alguno que otro desauciado. No le servía de nada matar gente que ya, en sí, quería morir. Seria como hacerles un favor.

En mi largo caminar por aquellas calles oscuras, pude oír una respiración tranquila. Había alguien que aún valoraba su vida. Pude sentir aquella inocente presencia proveniente de una de las casas.

Cuando entré por la ventana, un niño dormía plácidamente. No debería tener más de 8 años. Tenia el pelo oscuro y era de contextura pequeña. Se veía muy adorable allí tendido en su cama, durmiendo, soñando.
Lástima que que nunca volverá a gee la luz del día.

El infante comenzó a moverse un poco. Me moví, quedando frente suyo. Cuando el niño hubo despertado, miró al lugar donde yo estaba.
Noté una mirada de miedo y desesperación.

-¿Qui...quién e..eres?- preguntó aquel niño

- Go to sleep - le respondí.

Una noche Inolvidable (#CreepyAwards2016)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora