Capitulo 7: Agridulce

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Río:

Llegamos a la habitación milagrosamente en silencio deteniéndonos para pegarnos contra la  pared

—Esto no es lo que planeaba— susurro sobre sus labios

—Es perfecto para mi

Tiro de su camisa sobre su cabeza y la lanzo a algunas parte de nuestra habitación, ella hace lo mismo con mi pijama.

Mi boca va hasta su cuello poninedo a prueba su resistencia, recorro su piel en una danza de mordidas y caricias con mi lengua su reaccion es inmediata me toma por el cabello y empuja mi cabeza hacia ella

Ha pasado un tiempo desde la ultima vez que estuvimos en esta situación

Mis manos van directo a sus senos y los masajeo con delicadeza, quiero volverla loca y hacer que se desespere por mis caricias, quiero que sienta la necesidad de pedir que haga con ella lo que quiera

—Eres hermosa— digo sobre su piel— muy hermosa, mi amor... eres perfecta

Bajo hasta su seno izquierdo, dejando un pequeño beso a la altura del corazón, quiero que ella se sienta amada y olvide el dolor de hace unos minutos, quiero que  se sienta querida con cada caricia y beso sobre su piel.

Me tomo mi tiempo lamiendo y mordiendo su pezon con la fuerza suficiente para hacerla temblar entre mis brazos.

—Rio— jadea un poco alto

—Baja la voz— la miro desde mi posición, con su cabeza hacia atrás ojos cerrados y su boca levemente abierta con su  lengua asomándose tímidamente entre sus dientes

Se ve como la mismísima reencarnación de Afrodita

Tenerla de nuevo así de entregada me calienta a niveles alarmantes, ella siempre me ha gustado y todavía no me creo que ella es mi esposa

—Rio—, vuelve a jadear importandole poco mis peticiones

Me separo de ella y le doy un recorrido de pies a cabeza verla hace que involuntariamente junte mis piernas. aun llevamos parte de nuestra ropa.

Me alejo aún más dejándola en medio de nuestra habitación con cara de molestia

Camino hacia la cama dejando el resto de mi ropa en la alfombra, me siento en la orilla apoyando mis palmas en el colchón, estoy completamente desnuda frente a ella esperando que se acerque

Adelante cariño, soy completamente tuya

Agatha no pierde tiempo, se deshace de su ropa de trabajo y se acerca a mi, recorriendo mi cuerpo  con hambre

—¿Ansiosa?— me burlo al verla temblar

Mis manos recorren su espalda presionando mis uñas sobre la piel expuesta, bajo hasta su trasero para apretarlo sin ninguna delicadeza

—¡Ah!

—Creo que si— vuelvo a apretarla esta vez atrayéndola hacia mi

—Cierra la boca— intenta simular molestia pero según mis ojos esta más cerca de correrse que de enfadarse.

—Mi amor, si la cierro— finjo un tono inocente tomando una de sus manos— No podría hacer esto

Tears in heaven | AgatharioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora