Zambrano llega a su casa con su hijo y le da un beso en la frente antes de irse a su habitación. Entrando a su habitación abrió WhatsApp y vió los mensajes de su querido gringo, rogándole que lo perdonara y que le explique que pasó porque él no creyó haber hecho nada malo.
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ijo lo que pudo y en las mejores palabras en las que se pudo expresar.
Quedar como mejores amigos con Oliver quizá aliviane las cosas entre ellos, total, solo era un capricho de Oliver su "romance homosexual".
O al menos eso pensaba.
Dinamarca. .
Sonne apenas escuchó una vibración en su celular fue a ver si era de Zambrano.
Y efectivamente si era, pero no de la forma en la que se esperaba.
Mientras Oliver leía cada mensaje sentía como micro cuchillos se clavaban en su corazón, sintió un nudote en la garganta y apagó el teléfono.
Sentía vergüenza.
Mejores amigos, pero cómo? Si el aún lo amaba, como haría para evitar sonrojarse cada vez que escuchaba su voz o sentía su presencia, para evitar sentir que está en el cielo cuando ve sus ojos, que le gusta verlo sonreír y que daría todo por hacerlo feliz.
Comenzó a lagrimear de nuevo, y de ahí a llorar nuevamente.
Se sentía como un llorón, llevaba todo el puto día llorando y por amor.
Después de un rato se levantó de su cama y compró un vuelo a Perú el línea, el vuelo salía en 3 días.
Estaba decidido, ya no aguantaba seguir en Dinamarca, y no era porque no extrañara a sus padres o le aburriera su país, si no por Isabella.
Era insoportable, se pegaba a él como chicle y que gracias a ella su relación con el defensa fue en declive.
