Durmiendo Con El Enemigo » Larry Stylinson

XIX: Pesadilla.

«Siempre, he creído lo que me vendían la tele y el cine, que triste»

Dueles tan bien (Bruses)

Harry tenía quince años cuando se levantó una mañana por el llanto silencioso de su madre en la cocina. Ella sostenía un papel entre sus manos y lo apretaba con fuerza. No entendía nada de lo que pasaba. Miraba hacia todos lados sin entender el silencio y el vacío. Entonces logró quitarle el papel a su mamá y supo porque ese día estaba tan apagado. «Me voy no porque no te ame, sino porque lo hago. Porque no soy lo que esperas ni para ti ni para Harry» era lo que más sobresalía de ese escrito. Harry no quería creerlo, pero tenía que ser fuerte por él y por su mamá, y con el corazón ensangrentado la abrazó y le prometió que todo iba a estar bien.

Su padre había sido el mejor en esos años hasta esa partida inesperada. Un montón de palabras escrita que juntas en realidad sólo eran​ una excusa demasiado tonta para ocultar la verdad de su huida; en realidad él tenía a otra mujer, y lo descubrió después de todo un año buscándolo. Su papá tenía otra familia, otro bebé, otra sonrisa. Ningún dolor se había logrado asemejarse al que sintió ese día, ni siquiera su ruptura con Lisa.

Siempre consideró que eventos como eso le formaron el carácter duro que tenía. Había construido murallas para que nadie le atravesara. Experimentar de joven los desazones del corazón roto no había sido nada grato, sentía que había perdido experiencias memorables a partir de esos hechos.

Nunca se arrepintió de nada de lo que hizo o dijo. No que recordara al menos. Pero con Louis Tomlinson entraba en conflicto. Algo que se le quedó grabada en la mente, fueron sus ojos de un azul imposible

Y ahora no tenía el brillito que tenía cuando lo conoció. Sus ojos se oscurecieron y nada fue lo mismo desde ese día. Todo se volvió incómodo y tenso. Antes odiaba la voz chillona de Louis, ahora la extrañaba. Odiaba el silencio entre ellos.

Desde ese día, cada tarde Louis se sentaba en el piso, frente al hueco que había en la ventana y pasaba horas contemplando el cielo. En alguna ocasión creyó verlo llorar, pero por miedo no preguntó y por no saber que hacer al respecto. Sentía que ya no podía acercarse a él y por primera vez en la vida, se arrepintió de lo que dijo, porque cuando se despertó sin Louis entre sus brazos, entendió que había mentido.

Que de hecho, Louis le gustaba. Pero no solo en el sentido superficial de la palabra. No hablaba de su físico, ni de su sonrisa, hablaba de esa curiosidad, de esa dulzura en sus palabras, de sus movimientos suaves, de lo fácil que era hacerlo reír y de lo estúpidamente tierno que se veían sus ojos cuando se le formaban arruguitas alrededor. Le gustaba oírlo hablar de su vida fuera del encierro, amaba sus sueños, sus metas, la convicción en sus palabras, que se durmiera para historia pero que fuera el segundo mejor promedio de la escuela.

Sentía que había arruinado todo entre ellos. Podían estar en la misma habitación, dormir juntos por obligación, pero desde ese día, se sentía abandonado.

No compartían el desayuno, no dormía con él en brazos. No lo vió encender de nuevo la radio, y no lo vió bailar distraído. No volvió a hurgar entre los cajones, ni sonreír por casualidad.

Pocas noches Louis dormía y cuando lo hacía, una pesadilla lo asaltaba y lo dejaba despierto el resto de la madrugada. Aquella madrugada, no fue le excepción. Harry se despertó por los murmullos inentendible que soltaba Louis sin parar.

—¡No! -gritó Amelia. —No-no lo hagas, Joseph ¡Baja ese maldito bat y déjame explicarte!

Joseph negó empuñando con fuerza el bat —¿Qué quieres explicar? -preguntó Joseph con la voz temblorosa. Apretaba los labios con fuerza para no dejar salir ni un maldito sollozo. Ella ya no los merecía — Deje todo por ti, Ams. Todo.

—Escucha, hermano… -intentó persuadirlo con la voz calma.

—¡A ti no te quiero oír! -gritó más fuerte Joseph mirándolos a los dos todavía desnudos en la cama. Amelia tapaba su desnudez y todavía lloraba desconsolada y Joseph en esos momentos era incapaz de creerle. Con el corazón roto habló —Dame una buena razón para no matarte -le temblaba la voz y la traición que veía no le dejaba razonar. Cada parte de su cordura se deshacía poco a poco mirándolos en esa cama donde él fue el primero en tomar su cuerpo y que ahora, su propio hermano usurpaba —Dime en que fallé. -exigió intentando​ que la voz no le temblara; fracasó.

—En nada… mi amor, déjame explicarte -murmuró con la voz ahogada por el llanto. — Por favor déjame explicarte…

— No -dijo Joseph cegado por el dolor de esa traición —. Escuché lo que tenía que escuchar y vi lo que tenía que ver. Y vas a pagar todo Ams, lo vas a pagar todo.

En ese momento con el corazón desbocado, con la respiración agitada. Cada parte de su cuerpo se estremeció al reconocer la habitación de sus sueños. Se preguntó si en esa cama había sucedido todo o si Joseph había tenido la decencia de cambiarlo todo. Lo aterró la idea de terminar como ellos. Vivía sus días pensando en morir y lo que dejaría atrás. Extrañaba a su mamá, extrañaba a su papá, a sus amigas, incluso a ese aburrido profesor de Historia.

—Hey… -murmuró Harry a su lado, aparentemente acababa de levantarse. La luz del día asomándose por los barrotes le permitió ver su rostro.

Suspiró. Se sentó a la orilla de la cama y trató de calmarse.

—¿Estás bien? -insistió Harry en un tono de voz bajo. Se sentó también en la cama, observando la pequeña figura de Louis que parecía que solo le daría la espalda de ahora en más.

Louis tardó un par de minutos en contestar; se pasaba las manos por la cara intentando despertar del todo. No debían ser más de la siete u ocho de la mañana —Estoy bien -Pasó su mano por su nuca y cerró los ojos momentáneamente mientras lo hacía. El día recién comenzaba y todo pintaba que sería largo e incómodo como el de ayer.

—Si has tenido una pesadilla yo…

Louis ni siquiera lo miró —Vete a la mierda -se puso de pie para salir de la habitación​.

Harry lo observó irse todavía sentado en la cama.

***

¿vieron que Cowell confirmó la paternidad de Louis? Sinceramente ya ni se en que creer :'v The sun es el TKM británico jajaj bueno, no.

En fin

PREGUNTAAAA:

¿Pertenecen a otro fandom?

Yo soy Belieber :) Kidrauhl siempre (?)

Preguntenme que yo contesto todo (?)

En fin, nos leemos en el próximo capítulo bebés

All The Love - Vale

(NOTA 2023)

Y YO DUDABA, CUANDO EL PENDEJO SALIÓ IDÉNTICO A LOUIS KAHSGAHA m amo, era chiquito y pelotudo