Hasta el final de mis dias (Alvaro Auryn)™

-Capitulo 15-

POV: Lidia

Estamos en el sofá de casa, todas echadas sin nada que hacer, aburridas, muertas del asco, que triste todo.

—Vamonos a algún lado— dice Maria la que esta haciéndole un moño raro a Marian

—Vamos a llamar a los chicos— dice Marina con cara picara

—¡No! Hoy toca cena de chicas— digo

—¡Si Si!— dice Marian

—Bueno tu es que no quieres ver a Carlos— dice Marta riendo

—Pues... ¡No!— dice Marian y se hace la ofendida

—No es por nada, pero, son las ocho de la noche y es miércoles. Mejor salimos ya el Sábado— dice Marta

—Ui...— rio. ¿Como no me podía aveg acordado de eso? Voy a tener que comprarme un calendario, estoy empana ¿Pues no creía que era sábado y las seis de la tarde o porai?

—De verdad... Hoy es 29 de Julio del 2015.— nos dice Marta como si fuesemos niñas pequeñas

—Tranquila, el año si se cual es— digo con superioridad

—Tonta— dice Marta

—Guarra— contraataco

—Puta de carretera—

—Moco con patas—

—¿Moco con patas?—

—Exacto— digo y me empiezo a reír como una loca

—Pues yo quiero un chino— dice Marian —Osea de comer— dice y ponemos todas una cara perversa —Sois unas mal pensadas. Quiero la comida que hacen alli— dice

—Pues yo no así que pedimos del McDonal's— dice Marta

Al final Marta consiguió su hamburguesa de allí porque daban de regalo un minion y es la perdición de Marian.

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—¡Ooohh! ¡Tiene un disfraz de hawaiana!— dice Marian con su minion en la mano

—El mio es un pirata que da la voltereta hacia atras— dice Marina con el suyo en la mano

—Yo no tengo— decimos al unisono Marta, Maria y yo y reímos todas.

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El resto de la semana estuvimos haciendo limpieza a fondo de todo el piso, hemos decorado el balcón grande de el salón con unos pequeños sillones y lucecitas de colores. Mola un montón.

—Viernes ¡Santo viernes!— dice Marta haciendo un baile raro

—Llegas, todo esta en silencio, yo finjo que duermo y tu te acercas a mi...—se escucha a Marian cantar

— ¡Con la mirada congelada y ausente y una palabra que me deja indiferente un gesto amable y un beso en la frente que no estaba en el guión! — me uno a ella y cantamos las dos  —Sabes mi vida que el tiempo pasa y ya no eres una niña! Ya no me engañas ¡¡¡Ooooooo ooooooo ooooo!!!—