-Capitulo 28-

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-¿Cuanto te queda?- dice Alvaro desde el salón, creo.

-¡Ya voy!- le digo desde el vestidor.

Hoy es Noche Buena y vamos a comer a casa de sus padres. Ya me los presentó y también he ido mas de una vez allí, la madre de Alvaro me cae genial. Es amor.

Bajo las escaleras y Alvaro esta cruzado de brazos delante de la puerta.

-Vamos tarde- dice serio -Pero te perdono porque estas guapísima...- me coge de la cintura y me besa.

-Vamonos o no vamos a salir de aquí nunca- digo riendo

Sonríe y nos vamos. Después de un buen rato en coche llegamos a la casa de sus padres.

-¡Hola querida!- dice la madre de Alvaro y me abraza

-¡Hola!- digo feliz y se lo correspondo.

-Pasad- dice su padre

Entramos y ya tiene toda la mesa preparada.

-Tu hermana ya estará al llegar- dice Mercedes, su madre con una sonrisa muy tierna.

Alvaro asiente sonriente y a los cinco minutos llaman a la puerta.

Es su hermana.

-¡Cuchufletito!- le dice su hermana a Alvaro y el se pone rojo.

-No me digas eso- dice mas rojo que un tomate

-Yo también me alegro de verte- le dice y empieza a tirarle d ellos mofletes

-¡Hola Lidia!- dice su hermana y me abraza. Rio y la abrazo.

La madre de Alvaro nos dice que nos sentemos y eso hacemos.

La comida que ha hecho su madre está riquisima. Lo pasamos muy bien alli y sobre las doce y media de la noche nos fuimos para el piso de Blas.

Cuando llegamos Alvaro llama a la puerta.

De dentro del piso se escuchan risas y carcajadas. Están cono una cuba. Seguro.

Alvaro vuelve a llamar pero esta vez riéndose.

-Tu también escuchas eso ¿No?- digo riendo

-Si te refieres a las risas y a las tonterías que dicen. Si.-

Al fin alguien se acerca a la puerta y abre. Es Maria y se queda sorprendida al vernos.

-¿Cuanto rato lleváis aquí?- pregunta ella, lleva el móvil y el monedero en la mano.

-Un poco- dice Alvaro y ella suelta una carcajada.

-Pues que sepas que si no fuese por que voy a comprar, no os fuese ñn habierto nadie- vuelve a reír

Alvaro entra y yo me quedo con Maria.

-¿Que se supone que vas a comprar, el día de noche buena, a las una de la mañana?- digo

-Tabaco- dice con total normalidad

-¿¡Que!? ¡Pero si tu no fumas!- digo y la meto dentro de la casa

-Ah, es verdad- dice y se sienta en el sillón

«Nunca va a cambiar esto» pienso y me río.

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Me despierto y miro a mi alrededor ¿Donde coño estoy? Entonces me fijo en un cuadro que tiene la cara de Blas. El piso de Blas.

Miro a mi derecha y veo a Alvaro con la cara pintada, tiene un bigote, pecas y un rayo en la frente. Me toco la cara ¿Yo también estaré pintada?

Me levanto y me miro a un pequeño espejo que hay en esa habitación, tengo los labios rojos y dos corazones en la mejilla. Eso me lo han echo las chicas sin duda.

Salgo de la habitación y entro en el salón, que se escuchan ronquidos. Carlos esta sentado en una silla y frito, tiene marcas de besos con pintalabios rojo por todo el cuello y la cara. A mi derecha en el sofá están alguien y marian encima de ella. Es una chica pero no se cual de las tres. Le toco a Marian el hombro y se quita de encima de la chica, que resulta ser Marina. Marian y Marina también tienen los labios rojos. ¿Ayer que nos dedicamos a pintarnos los labios o que?

Marian tiene un corazón en la frente y Marina dos en el escote. Que liantas.

¿Y los demás? ¿Soy la única que se ha despertado?

Me voy por el pasillo y me encuentro a David durmiendo en el suelo. Tiene toda la cara pintada con boli negro o rotulador, no se. No puedo evitarlo y me río. Sigo avanzando por el pasillo y el cuarto de baño esta abierto, miro de reojo pero me paro al instante, hay alguien. Me acero y Marta tiene la cabeza metida en el bater, se que es ella por su vestido. La agarro de los hombros y la echo para atrás.

-¿Lidia?- dice y se toca la cabeza con las manos

-Duerme, tu duerme- digo intentando no reír

Parece que me hace caso y se echa en la pared.

Salgo del cuarto de baño y entró en una habitación que esta medio cerrada.

Solo esta Maria echada en la cama, parece que está... Agusto.

Salho sin hacer ruido y entro en la ultima habitación que hay, que no es un cuarto es la cocina.

Allí están Dani y Blas con un vaso de algo transparente en la mano.Que no es agua, cojo los vasos y los dejo en la encimera.

¿Deberia despertarlos a todos, o, me río un poco? Vamos, es Navidad, así que voy a ser buena.

Voy uno por uno y los voy despertando a todos. Por ultimo voy a la habitación donde estabamos a Alvaro y yo.

-Alvaro...- digo dándole besos

Hace un ruido con la garganta y me río.

-Alvaro, despierta- me pongo totalmente encima de él y no dejo de darle besos

-Si quieres que lo que aga es que me levante, así vas mal- ríe

-Pues entonces voy a parar...- digo con malicia

Me coge con los dos brazos y con un rápido movimiento me pone debajo de él.

-Tenemos que irnos, estamos en casa de Blas- digo y su cara cambia

-¿Que?- dice, mira para todos los lados y se ríe -¿Te puedes creer que no me había dado cuenta?

Nos levantamos y salimos de la habitación, ya están todos despiertos y recogiendo todo el desaste de anoche. Nos ponemos a ayudar. Cuando terminamos nos despedimos de todos y nos vamos.

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Kiseeess

Hasta el final de mis dias (Alvaro Auryn)™Donde viven las historias. Descúbrelo ahora