𝐓𝐡𝐞 𝐅𝐚𝐥𝐥𝐞𝐧 𝐉𝐞𝐝𝐢 || Al morir el Rey de Onderon; no quedó nada más que coronar a su esposa, la reina Mila, con esto todo cambiaba, Mila estaba preocupada por su hija Moon, al ser mujer y ser la única heredera al trono decidió que lo mejor...
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Después de un rato más de charla entre los Sith y el senador Organa; estos decidieron irse; excusándose con temas más importantes y la razón por la cual ellos estaban ahí fue solo para saber que seguían apoyándolos. Breha y su marido sabían que eso había sido absurdo por parte de estos. Sabían que era mentira; pero no podían tener a Moon a las afueras de la ciudad tanto tiempo así que horas más tarde la trajeron de vuelta.
—Estaba tan aterrada Nala.— Allena le exclamó a Moon.
—Me imagino.—
—La armadura que utiliza es tan macabea y da tanto miedo.— Kyo entro a la habitación y le dijo a Nala que el senador le hablaba.
...
—Tengo miedo.— Dijo de la nada Moon hacia Kyo; aún iban camino al gran salón.
—No debes tener Moon.—
—Como no lo voy a hacer si literalmente si el me encuentra me asesinara y de paso a todos aquí por ocultarme, y tú ahora estás metido en esto.— Kyo se detuvo en seco y se giró hacia ella.
—Moon; eres una persona importante para mi, y siempre te consideraré mi confidente. Siempre te protegeré, mientras tenga vida. Se lo jure a tu reino cuando nos comportemos.— Moon negó.
—Ya no somos prometidos Kyo. Esa promesa quedó en el olvido.—
—No para mi. Siempre cumplo con mi palabra; no importa si ya no somos nada.— Moon intento sonreír pero salió más una mueca; se sentía feliz de aquello; no porque lo amara, era una persona que simplemente le tenía aprecio.
—Significa mucho Kyo.—
—No es nada; y acelera el paso que nos esperan.— Moon asintió y juntos continuaron su camino.
—Nala... yo y Breha queremos hablar contigo a solas.— Kyo entendió eso y salió cerrando la puerta tras el.
—Si?—
—Ya no estás a salvo aquí. Sabemos que el sospecha de algo de aquí y sabemos que siempre te dijimos que mientras no salieras, estarías a salvo. — Breha tomó las manos de Moon.
—Pero no podemos permitirnos poner en peligro el reino, este siempre será tu hogar, eres como nuestra segunda hija — El senador Organa tomó el hombro de Moon. —Pero mientras tanto; te enviaremos a Naboo; la Senadora Amidala ah aceptado tú estancia con ella mientras las aguas se calmen aquí, Kaila y Owen Iran contigo, al igual que 3PO. — Moon sintió una gran tristeza al saber que se alejaría de aquellos que amaba.
