onigiri

30

En el momento que sanzu observó que el azabache se levantaba de la mesa lo siguió con la mirada.

Estaba claro que está supuesta misión era solo un intento de su capitán para que se llevará bien con el chico pero mierda es imposible, el hanagaki es tan irritante con su voz tan delicada, sus feos ojos saltones y ese cuerpo que parece de niña.

¿De verdad hanagaki era un chico?

Sanzu lo tenía en duda.

Las cosas eran más incómodas por el beso que se dieron pero lo peor es que el único que lo recordaba era él, eso era tan injusto.

A veces se sentía tan deseoso.. tan deseoso de probar de nuevo esos labios.. pero.. ¿Que se lo impedía?.

Si bien el que comenzó todo esto fue el hanagaki sanzu solo estaba devolviendoselo.

Además, solo sería una vez, solo tiene que confirmar una vez y todo terminará ya que eso no es la gran cosa.

Con eso en mente el akashi se levantó de su asiento y fue en la misma dirección que el azabache cuando lo vio en el lavo no lo dudo ni un segundo y se colocó a sus espaldas.

Y así fue como llegaron a esto.

Sanzu besando desesperadamente a un takemichi que estaba muy confundido y tratando de alejarlo.

"S-sanzu n-no mmgh puedo r-respirar". Trataba de decir takemichi pero el contrario no le daba tregua.

Cuando sanzu ya no aguanto más se separó del beso y observo como takemichi trataba de respirar bien, sus mejillas estaban rojas, pequeñas lágrimas querían salir mientras su pequeña boquita estaba abierta, roja y un poco brillante.

Eso excito más a haruchiyo.

"Tks, que mierda me hiciste?". Susurro el albino.

Sanzu bajo su mirada y noto algo en su cuello parecía un piquete de mosquito pero se veía extraño así que sin pensarlo dos veces le quitó la camisa al hanagaki.

"¡¿Q-qué haces?! AHHH!".grito takemichi cuando sanzu mordio su hombro con fuerza.

Haruchiyo estaba molesto muy molesto cuando vio todos esos malditos chupetes que adornaban la lechosa piel del hanagaki, sanzu tenía claro que eso significa solo una cosa.

Algun hijo de puta lo hizo a propósito para demostrar que el de ojos azules era suyo, no pudo contenerse y lo mordió para también marca territorio.

Pero ¿Territorio de que?

Ni el mismo lo sabía pero cuando se separó del hombro del menor noto un poco de sangre en la mordida así que sin dudarlo la lamio quitando los restos de esta para luego besar al chico de manera dominante.

La cabeza de takemichi era un lío, se suponían que estaban en una misión ¿Como es que llegaron a esta situación? El menor tenía tantas preguntas.

¿Sanzu no lo odiaba?¿Por que lo besaba? ¿Sanzu era gay?...¿El mismo era gay? Estaba confundido no lo entendía y la lengua de sanzu sobre la suya no lo dejaba procesar las cosas bien.

De pronto sanzu lo tomo por la cintura y lo subió al lavado.

"Solo.. solo será una vez.. nada mas". Susurro ronco el akashi mientras el bulto entre sus pantalones se hacía más grande.

"S-sanzu..". La voz de takemichi y esa mirada perdida lo estaba volviendo loco.

Tocaba sus muslos y sonreía como psicópata al imaginar marcar ese lechoso y suave cuerpo de tan solo imaginar entrar en el hace que su miembro despierte más.

No lo podían culpar todo era culpa de takemichi por haberlo provocado de esa manera.

Antes de que pudiera continuar el sonido de su teléfono lo distrajo al ver de qué se trataba solo era un mensaje de Muto diciendole que no llegaría a casa esta noche.

Al parecer alguien se estaba divirtiendo así como el haria ahora mismo.

De pronto sintió unas suaves manos en sus mejillas y alzó el rostro sonrojado por la cálida sensación y luego este se intensificó más al ver la sonrisa que le regalaba takemichi.

"Sanzu.."

El menor se acercó lentamente y por reflejo el akashi cerro sus ojos esperando un beso pero se extraño cuando no lo sintió en el momento que iba a abrir sus ojos un fuerte golpe llego.

Takemichi al ver la distracción decidió aprovechar el decidio que iba a salir de ese bar virgen como fuera.

Cuando vio que el albino cerro sus ojos aprovecho y echó su cabeza un hacia atrás para luego darle un fuerte cabezazo al contrario, a él también le había dolido pero cuando vio al mayor caer hacia atrás no lo dudo y agarró su camisa y chaqueta.

Al acercarse a la puerta se dio cuenta de que no tenía seguro ¡¿Y si alguien los hubiera visto?!.

Volteo su mirada al albino que lo veía confundido y adolorido por el golpe y le gritó.

"¡Pervertido!" Y se fue corriendo como alma que lleva el diablo.

Sanzu lo miro incrédulo otra vez el de ojos azules lo había golpeado y huido, ahora no solo le dolía la cabeza por el golpe también su miembro por la excitación y extrañamente su pecho dolía un poco cuando miro los ojos molestos del hanagaki.