˚꠵ ★ I know my age and I act like it. Got what you can't resist𖥔 ࣪˖ .
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006—night, vegas.
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POV LANDO NORRIS
Las luces de Las Vegas eran distintas. Brillaban más, como si intentaran competir con la energía eléctrica que llenaba el paddock. Todo parecía exagerado, desde las pantallas gigantes que mostraban los rostros de los pilotos hasta el escenario enorme que se había montado junto a la recta principal. Yo estaba acostumbrado al espectáculo que era la Fórmula 1, pero esa noche se sentía diferente, como si incluso el deporte rey estuviera tomando un respiro para mirar algo más grande.
Y ese algo era Olivia Leclerc.
—¿Entonces ella va a cantar? —preguntó Oscar, ajustándose su gorra mientras mirábamos hacia el escenario desde la zona VIP. —Sí —respondí, metiendo las manos en los bolsillos. —Hermana de Charles, pero no sé por qué siento que nadie la ve solo como eso.
Oscar rió.
—Bueno, considerando que tiene como cinco premios y más seguidores en Instagram que todos nosotros juntos, probablemente tengas razón.
—Cinco premios y un álbum que estuvo meses en el número uno —añadió Max Verstappen, que acababa de unirse con una bebida en la mano.
—Nada mal para una Leclerc —comentó Oscar, riendo. Antes de que pudiera responder, sentí una presencia conocida. Charles se acercó a nosotros, con las manos en los bolsillos y una leve sonrisa que no lograba ocultar su orgullo.
—¿Cómo está el hermano mayor más famoso del paddock? —le pregunté, dándole un ligero codazo. Charles rió, pero había algo más en su expresión, un brillo en los ojos que decía cuánto significaba esta noche para él.
—No me lo perdería por nada —respondió. Las luces del escenario se apagaron, y la multitud enloqueció. Un solo foco se encendió en el centro, y allí estaba ella: Olivia. Llevaba un top blanco con unas letras escritas en él y un short brillante, también unas botas negras Dr. Martens que golpearon el escenario con fuerza cuando caminó hacia el centro. Su cabello caía en ondas desordenadas, pero había una precisión en su postura que hacía evidente que sabía exactamente lo que estaba haciendo. Los primeros acordes de guitarra llenaron el aire. Era una melodía lenta, casi etérea, que poco a poco se convirtió en un ritmo más intenso. Olivia tomó el micrófono, y su voz empezó suave, como si hablara directamente a cada persona en el público. —Es impresionante cómo puede hacerte sentir que está cantando solo para ti —comentó Charles en voz baja, y por un momento, todos estuvimos de acuerdo en silencio.
La canción creció. La batería se unió con un ritmo pulsante, y Olivia empezó a moverse, marcando cada golpe con el movimiento de sus botas. Su voz, que había comenzado como un susurro, ahora era poderosa, rasgada en los momentos justos, llena de emoción.
Cuando llegó al estribillo, extendió el brazo hacia el público, y ellos respondieron cantando junto a ella, sus voces mezclándose en el aire cálido de la noche. —Esto es... diferente —dijo Oscar, con una mezcla de admiración e incredulidad. —Es pura magia —añadió Max, cruzando los brazos mientras observaba la escena. La canción terminó con Olivia sosteniendo una nota alta mientras la guitarra se desvanecía lentamente, dejando a todos en un silencio reverente por unos segundos antes de que la multitud explotara en aplausos. Ella sonrió, respirando profundamente, y tomó un megáfono rojo que estaba junto al pie del micrófono. —¡Las Vegas! —gritó, su voz distorsionada amplificada a través del megáfono. —¿Están listos para una noche inolvidable? ¡Quiero escucharlos gritar! La multitud rugió, y yo sentí que incluso el suelo temblaba bajo mis pies. Olivia no perdió tiempo y comenzó la siguiente canción directamente con el megáfono. Su voz adquirió un tono crudo, casi punk, mientras caminaba de un lado a otro del escenario, golpeando el ritmo con sus botas. Saltó, se inclinó hacia la multitud y manejó el megáfono con una confianza que era imposible ignorar. Cuando llegó al coro, dejó caer el megáfono, y un técnico lo atrapó al vuelo mientras ella tomaba el micrófono con un movimiento fluido. Su voz se transformó de nuevo, volviendo a ser melódica, abierta y emocional. Era un contraste que solo alguien con su nivel de control podía manejar. Charles no apartaba la vista, su sonrisa creciendo con cada movimiento de Olivia. —Ella nació para esto —murmuró, y no había dudas en su voz. La tercera canción llegó con una energía frenética. Olivia corría por el escenario, saltando y moviéndose al ritmo de la batería mientras el público cantaba con ella. Era imposible no sentirse atrapado en la intensidad del momento. Cuando terminó su set, Olivia se quedó quieta en el centro del escenario, respirando profundamente mientras la multitud seguía ovacionándola. Levantó el micrófono una última vez y habló con una sonrisa que iluminaba toda la noche. —Gracias, Las Vegas. ¡Suerte a los pilotos en su clasificación mañana! La ovación fue inmediata, y mientras las luces se apagaban y Olivia desaparecía entre bambalinas, no pude evitar mirar a Charles. —Estás orgulloso, ¿verdad? —le dije, sonriendo. Charles asintió, con los ojos brillando. —Siempre lo estoy. Ella es mi hermana pequeña. Pero ahora, el mundo también lo sabe.
Olivia Leclerc está hecha para brillar y en Las Vegas, bajo las luces más brillantes, había demostrado que el espectáculo no era solo de la Fórmula 1. También era suyo.
livbedumb
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— las vegas eso fue increíble! agardecida por la oportunidad 🤍 Liked by 3.097.692 people
