Capítulo 5

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Me desperté con una luz intensa que me daba directamente los ojos. Abrí éstos lentamente, intentando acostumbrarme a la claridad. Cuando lo hice, miré a mi alrededor. ¿Dónde estaba? No recuerdo nada de lo que pasó antes de venir aquí. O.... ah, sí ya recuerdo. Lo que me pasó con Alex y esas zorras. ¿pero qué hacía yo en esta habitación? Miré a mi derecha, donde había una ventana pequeña, donde se veía el exterior. Me acerqué a mirar, porque estaba muy alta y yo no llegaba, cuando de pronto, una mujer joven entró por la puerta.

—Eh, chica, no puedes levantarte de la camilla. Jade, ¿verdad?— Me dijo ella.

—Sí—le respondí yo, algo confusa del por qué esa mujer sabía mi nombre.

—Encantada Jade, yo soy Nicole, tu doctora. Te desmayaste ayer por la tarde, y al caer al suelo el impacto te provocó una herida justo aquí—dijo ella, señalando una parte de mi cabeza

—auuuuch—vaya, eso me había dolido

—No es nada grave, el desmayo se produjo por tu falta de alimentación, me dijeron que tú no desayunaste nada, y además tampoco almorzaste, con lo cual estás un poco débil. Debes tomarte esto—añadió, dandome un tarro con algo que olía muuy mal—. Te ayudará a reponer fuerzas; te quedarás un par de horas más aquí, y después ya podrás marcharte.— finalizó con una gran sonrisa.

Yo se la correspondí, seguida de un «gracias» y luego ella se marchó. Abrí el tarro y, de nuevo, la puerta se abrió. Pero esta vez no era la doctora.

—Hola, Jade. Me tenías muy preocupado. ¿qué tal estás? ¿Te sientes mal? ¿Qué dijo la doctora?—preguntó Alex, con mucho interés, demasiado.

—Alex estoy bien. Solo me desmayé porque no comí y ya. Sí, me encuentro bien y la doctora dijo que tomara esto y en 2 horas puedo marcharme—dije yo, riéndome por la cara de pánico que puso antes haciendo tantas preguntas.

—Ehhh, no te rías, de verdad me tenías muy preocupado—me dijo él, acercándose peligrosamente.

—Ey Alex, espacio personal, ¿sí?—le dije yo, poniendo una mano en su pecho y alejándolo, algo nerviosa por su cercanía.

—Es que esa bata te sienta tan bien...—dijo, mirándome de arriba a abajo sin ningún descaro. Yo me sonrojé intensamente, en estos momentos parecería seguro un tomate.

Él se acercó más, como quedando a 5 cm de mi cara, puso su rostro en mi cuello, respiró profundamente y me susurró:

—Me encanta cuando te sonrojas.

Él me abrazó por la cintura, y a mí no me quedó mas remedio que abrazarlo por el cuello. Estaba disfrutando realmente de este momento, solo nuestras respiraciones se oían en la sala, cuando otra vez la maldita puerta se abrió, y Jenny pasó sin avisar. Yo empujé rápidamente a Alex y me coloqué bien el cabello, aunque era para nada, porque ya nos había visto.

—emmm, siento no haber llamado chicos... ¿interrumpo algo?

—No.

—Sí.—dijimos Alex y yo a la vez. Él con cierto tono de enfado.

—Vaya, pues entonces me voy. Solo quería preguntar cómo estabas, Jade, pero ya veo que bien. Luego nos vemos y me cuentas, ehh—añadió Jenny, guiñándome un ojo. Después de eso se dio media vuelta y se fue.

—Emm... estooo... Alex, creo que sería mejor que te fueras—dije, algo incómoda

—Como quieras,preciosa— me dijo Alex, acompañando con una sonrisa perfecta.

Después de esto, salió él también, dejándome totalmente sola en la habitación. Genial, ahora no viene nadie, ¿no? Encima mi sopa se enfrió. Vaya día que llevo.

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Holaaaa a todos. Espero que os haya gustado el capítulo. Creo que ahora subiré otro, porque este ha sido algo corto. Lo siento, pero no se me da bien escribir capítulos largos.¿Qué les pareció el capítulo?

¿Les gustaría que hiciera un capitulo narrado por Alex?
¿O preferirían que lo narrase otro personaje?

No olviden votar y comentar. Nos leemos ahora. Beesoos, MissMagicMike :)

Simplemente casualidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora