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Parecía ser otra tarde tranquila para los tres roomies. Panda había regresado de su pequeño viaje con algunos recuerditos para ellos (chocolates, bebidas y llaveros), ahora los tres estaban disfrutando de sus regalos mientras jugaban a las cartas y devoraban algunos snacks salados que preparó Yuta.

—PERO, PANDA ¡¿CÓMO ME VAS A LANZAR OTRO MÁS CUATRO?! —Ya ni se podía saber cuántas cartas tenía Yuta en las manos, gracias a Toge y Panda que se confabularon para joderlo jugando al Uno— ¡TOGE! ¿CÓMO QUE REVERSA? ¡NO!

Sus roomies se echaron a reír en toda su cara, los dos casi al borde de las lágrimas. Panda quiso levantarse para buscar unas cervezas y no pudo, la risa no lo dejaba. Cartas de +2, +4, reversa y salta turno eran las que jugaban los dos amigos contra el pelinegro.

—¡LES JURO QUE LOS VOY A...!

La tarde de panas fue interrumpida por el timbre de llamada de Toge, que abrió mucho los ojos cuando vio el contacto de la persona que lo estaba llamando. Cuando comenzó a temblar, el pánico ya se notaba en su cara, de hecho, parecía que no iba a atender, hasta que Panda le tranquilizó posando una mano sobre su hombro.

"Tú puedes hacerlo, te daremos privacidad para que hables".

Toge se fue al balcón, dejando a los otros dos en la sala. Luego de unos pocos minutos de conversación, el rubio llegó a donde estaban sus amigos con la cara de felicidad más grande que jamás le vieron hasta ahora.

—¡¡ME ESCOGIERON!! —gritó dando saltitos por toda la sala, sin dar más explicaciones todavía— ¡¡NO LO PUEDO CREER!! ¡¡SI!!

Yuta no tenía ni idea de lo que estaba hablando Toge, mientras que Panda, que estaba mucho más al tanto que él, corrió a abrazarlo.

—Te felicito, Toge. ¿Quién te llamó?

—El señor Nanami, me dijo que Satoru Gojo me vio aquí en tu fiesta y me recomendó.

—¡Eso es genial!

Yuta, que se estaba devanando los sesos por saber qué estaba pasando y también ser parte de la celebración, tuvo que hablar para preguntar. Tenía la idea de que podría ser algo del trabajo, su roomie era asistente en una agencia de modelaje, pero hasta ahí no tenía más detalles. Ver a Toge feliz le produjo un sentimiento de calidez muy grande en el corazón, pero sentía que no podía disfrutar del todo de eso.

—¡Me seleccionaron para ser modelo oficial de la nueva temporada de H&M! ¡A mí! —le explicó su amigo, con los ojos más brillantes que cualquier estrella— ¡Me voy a Estocolmo! ¡Me voy! ¡Soy tan feliz!

Oh.

¿Qué?

Si hasta hace tres segundos Yuta estaba sonriendo, ahora no. Veía a Toge dar saltos por toda la casa como en cámara lenta, parecía que el mundo se estaba deteniendo porque su propio corazón estaba paralizándose también.

Toge se iba.

¿Indefinido?

¿Por cuánto tiempo?

No tenía ni idea de que Toge soñaba con ser modelo internacional. Ahora se daba cuenta que no sabía de sus sueños, de sus metas ni de las cosas que le hacían ilusión.

Gracias a sus excelentes modales y su poder innato de ser cordial, Yuta logró felicitarlo en medio del shock que estaba viviendo. Los tres amigos brindaron con cervezas frías, sin retomar la partida de Uno, ahora todo giraba en torno a Inumaki Toge y su trabajo en el exterior como modelo. Panda quería detalles jugosos de la oferta laboral, fechas, logística y hasta saber por qué Gojo recomendó a su amigo en una campaña como esa.

Volver a Amar ♥ Yuta x TogeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora