Psycho. {Larry Stylinson}

Capítulo doce.

El plan era simple y claro. No necesitaba demasiado, sólo mucha ayuda de parte de Harry. Obviamente si el chico enamorado se decidía a ayudarme, todo saldría de maravilla y por fin Harry podría tener a su Louis. Me aclaré la garganta con mucha decisión, quería que Harry sea feliz; creo que esa era mi misión en la tierra, hacer que las personas sean felices.

Mis nervios estaban actuando y mis dedos jugueteaban entre sí. ­-Harry, ¿quieres escuchar algo?

Asintió sin darle demasiada importancia al tema.

-Tengo un plan. Es simple, es claro. Lo que tenemos que hacer es persuadir a Louis, sacarle el miedo y las ganas de perder algo. Podrían salir sin que nadie se de cuenta.

-¿Cómo? -dijo con su voz ronca.

-Escápate -dije y sonreí malvadamente.

Harry miró hacia el piso y luego se rascó la nuca. Seguro lo estaba evaluando.

✖Harry's POV✖

Evalué todas las posibilidades. Mi cabeza daba vueltas, necesitaba llegar a estabilizarme, pero con tal propuesta no sabía que hacer. Escaparme era lo que más quería, pero no era la mejor opción. El miedo se apoderó de mí y mi corazón latía muy rápido.

-Bueno -susurré.

-¿Eh? -preguntó el muchacho a mi lado.

-Que bueno, acepto el trato.

-¿Puedes intentar convencerlo?

-Oh, no. Claro que no. Bastante con que me escaparé. Igualmente perfeccionaré tu plan -lo miré directo a los ojos-. ¿Qué pasa si me escapo y lo sigo hasta su casa para darle una linda sorpresita luego?

-Mmm, me encanta el tono con el que lo dices -exclamó y rió.

Tenía miedo, no podía negarlo. Las cosas malas seguramente se apoderarían de la situación. Louis me iba a odiar, por escaparme y por intentar violarlo. Aunque pensándolo bien... creo que no se resistiría así que no sería violación. Vamos ya, ¿qué hago pensando en todo esto?

×××

La noche se aproximaba y esperaba con ansias poder cumplir mi deseado objetivo. No solo por amor a Louis, sino porque me iba a sentir mejor conmigo mismo. Me iba a sentir libre, sin barreras ni obstáculos que impidieran tales intenciones.
Sobre mi cama pobre con el colchón más fino de la historia tenía un par de zapatillas cómodas y ligeras, un cuchillo de esos que de llevan a un campamento, un conjunto de campera y pantalón negro y una mochila en la que había una linterna, un invisible, dinero para comida, dos latas de energizante y cinta.

Tenía todo malditamente planeado y con mi mente que no podía asimilar bien las cosas, todo saldría perfecto. Esperaba que Dios aún me amara después de muchos años sin ir a la iglesia.

Abrí la puerta girando la cabeza hacia ambos lados para comprobar que nadie estuviera ahí. Cerré la puerta y me puse los pantalones, la campera y las zapatillas sin olvidar atar mi mata de rizos antes.

Nuevamente abrí la puerta, pero esta vez con la mochila colgada de hombro y procurando cerrarla muy suavemente. Caminé por el pasillo cargado de depresión y sumido en la oscuridad. Llegué a un anexo del piso donde habían dos ventanas enormes que ocupaban dos metros de pared y abrí una de ellas. Un viento molesto entró. De pie junto a mi escape, miré hacia abajo. Estaba en el tercer piso.

Las voces en mi interior me decían que debía arriesgar todo por el maldito médico que me había logrado quitar el sueño. El resto de la cordura adentro mío me decía que no arriesgue la enorme posibilidad de curarme en alguien que no daba una mierda por mi. Mi cordura no quería que Louis y yo estuvieramos juntos. O tal vez él no te ama y te está avisando, pensé.

Demasiado preámbulo. Subí un pie al marco de la vieja ventana y luego el otro. Si tardaba mucho me iban a atrapar.

Sentí que los pies hacían el típico ruido al pisar el pasto sin cortar. Gracias a un caño de algo que verdaderamente desconocía, pude bajar. Ya estaba afuera pero no sabía muy bien como salir sin ser pillado. Corrí por la parte trasera de la locación hasta chocarme con una especie de zanja que iniciaba en el terreno sin construcción del hospital y terminaba del otro lado. Sin pensarlo dos veces me metí, y contuve la respiración, hasta que, luego de mucho esfuerzo pude estar del otro lado.

Con un olor terrible corrí a la estación de servicio más cercana que quedaba a aproximadamente una cuadra. Entré al baño y cerré con seguro. Me saqué la ropa negra, y también el uniforme de paciente del hospital y me dejé la camiseta blanca que tenía abajo. Saqué un pantalón corto de mi mochila y me lo puse. Era negro y tenia rayas blancas a los costados. Finalmente me puse un buzo gris y guardé la ropa sucia en el fondo de la mochila. Salí del baño y respiré airefresco. Definitivamente no había algo peor que los baños de las estaciones de servicio.

Crucé la calle y me senté en la parada del autobús. El próximo venía en tres minutos. Iba directo a... al pueblo de Louis.

Subí al autobús y pagué. Busqué de entre todos uno donde nadie me molestara ni invadiera mi sagrada privacidad. Verdaderamente no sé cuanto tiempo estuve ahí arriba porque estuve sumido en una especie de sueño. Me bajé al final del recorrido y lo vi. Estaba en el café que solía frecuentar. Aquél que Niall me había avisado.

Con el pelo aún recogido y unos lentes negros de sol, fui al teléfono público justo en la esquina paralela a ese café. Puse un par de monedas y llamé al hospital.

-Buenas noches. Me gustaría comunicarme con un paciente -dije fingiendo mi voz-. Su nombre es Niall Horan.

-¿De parte de quién?

-Soy su primo. Edward Granelli.

-Aguarde en la línea un momento señor Granelli, lo comunicaremos en la brevedad.

Sentía el ruido de los grillos y el palpitar de mi corazón en mis oídos. Los nervios eran demasiados. Sentí un ruido del otro lado del auricular.

-Edward -era la voz de un hombre, entusiasmada.

-Escucha, llegué al pueblucho este. Estoy en el teléfono público frente al café que me mandaste. Lo vi, lo voy a seguir. Hasta ahora no hay nada que me lo impida.

-Oye, Ed, recuerda algo. Diviertete.

-Lo haré. Cuídate.

-Tú igual.

Y sonó el ruido de un teléfono colgado. La parte uno de mi plan estaba hecha. Sólo dos partes más.

-¿Harry?

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•Volviiii al finnn. Bueno sé que no es la gran cosa, pero espero que les guste y a partir de hoy voy a actualizar mas seguido y demás. Gracias por leer y por todo Se merecen más que un capítulo, pero no tengo mucha inspiración.