-¡Esta despertando!- escuche que alguien gritó.
Sentía calor, y no podía abrir los ojos ni mover ninguna parte de mi cuerpo. Entro un hombre el cual abrió mis párpados y los ilumino con una pequeña lamparita pero de inmediato los cerré.
-traigan algo de comer y llamen al pariente a cargo!-ordenó a la enfermera.
-¿recuerdas tu nombre?- solo lo observaba asustada, no sabía lo que pasaba.
-tranquila- sonrió y yo me senté en la cama y comencé a ver a todos lados.
-¿Dónde estoy?- mi vos era a penas audible.
-En el hospital, sufriste un pequeño accidente- el doctor me veía a los ojos.
-Mi nombre...¿Cual es mi nombre?- comenzó a dolerme la cabeza
-¿No recuerdas tu nombre?- preguntó nervioso.
-No- me mordí el labio inferior.
Después de esto me dieron un jugo de naranja y un sándwich y me volví a dormir.
Comenzó a faltarme la respiración y me desperté de inmediato, no dejaba de temblar y mi corazón lo sentía muy acelerado, las palabras no me salían así que comencé a gritar y de inmediato varias enfermeras trataron de tranquilizarme.
-¿Dónde esta el ?- estaba muy asustada y de la nada salió esa pregunta.
Las enfermeras me inyectaron tranquilizantes y fue de la manera que pude dormir.
-¿podemos hablar?- entró el doctor. -toma- me entregó una libreta blanca con el dibujo de una rosa azul y un candado.
-¿que es esto?- la tomé
-El hombre a cargo de ti lo trajo, dijo que con eso tal vez recuerdes tu pasado- me entregó una llave y se fue.
"El accidente" decía la primera hoja.
Nota: Bi-ina esto ocurrió 3 años atrás y algunas cosas ocurrieron durante tu estado de coma... Por cierto tu nombre es Danbi Mi Hi.
~25 de Enero, Cumpleaños de Bi-ina.
Al despertar mamá y papá estaban frente a ti con un gran pastel de chocolate.
"Feliz cumpleaños Mi Hi" sonreías felizmente estaba muy emocionada pues era tu cumpleaños numero 18.
"Vistete, te tenemos una sorpresa" mamá se veía hermosa y emocionada lo cual asía que te emociónaras más.
A las 3 de la tarde subiste al coche, abrochaste el cinturón y se pusieron en marcha. Todo el camino no parabas de hablar y cantar pero después de 5 horas de camino te quedaste dormida.
"¡No frena!" escuchaste gritar a papá, lo siguiente que escuchaste fue un horrible golpe y lo ultimo que viste era el carro cayendo de un barranco.~
Mi corazón empezó a doler y mis lágrimas brotaban una tras otra des controladamente pero seguí leyendo.
~Cuando llegaron los paramédicos escuchaste su conversación en la cual decían que mamá y papá habían salido volando del coche lo que causo la muerte instantánea al tocar el suelo.
Al llegar al hospital seguías viva pero con muy poca probabilidad de permanecerlo, tu alma estaba dañada, lo que te daba tu vida estaba perdida y fuera de si, tu cuerpo seguía funcionando pero sin tu espíritu.~
La primera hoja terminaba ahí pero atrás de esta había una nota. "Lee una hoja cada lunes" cerré el diario y lo puse a un lado de mi cama, abrace mis piernas cubriendo mi rostro y comencé a llorar.
Al siguiente Lunes quince volver a leer el diario pero la llave no estaba, había desaparecido.
Después de dos semanas vi a los doctores muy preocupados, corrían de un lado para otro y de pronto a un lado mio pasó un un hombre moribundo en una camilla, el corazón se me encogió y sentí un nudo en el estómago por algún motivo. Después de varias horas analizándolo lo llevaron a un cuarto que estaba al lado del mio.
-Mi hi- me hablo la doctora.
-¿Si?- me acerque a ella.
-¿podrías llevar esto a tu doctora a cargo? Es la misma que se encarga de este paciente. Voltee a verlo.
Tenía piel blanca lechosa, sus labios eran delgados pero muy hermosos tenia ojos rasgados y cabello despeinado color castaño.
-claro- tome las cosas y me puse en marcha, era la ropa y cosas que llevaba consigo a la hora del accidente.
-Doctora- corrí al verla y cuando pude alcanzarla le entregue las cosas.
-gracias Mi Hi- sonrió
Cuando tomó las pertenencias de aquel hombre pude ver mi llave que tanto había buscado.
-Disculpa ¿que le ocurrió a ese chico?- pregunte a la enfermera que le había entregado las cosas.
-Al parecer fue atropellado-
-oh- ayude a la enfermera con varias cosas y me fui de ahí.
Fui a visitar al chico por cuarta vez pero seguía sin despertar por alguna extraña razón estos dos días no me han dado ataques de pánico o lo que sea que me da.
-Mi Hi, hoy no podrás ir a ver al paciente- dijo la enfermera.
-¿por que?- trate de levantarme pero me lo impidió.
-te haremos otros estudios sobre tus ataques- torció la boca y se encogió de hombros dicho eso se fue de ahí.
Dieron las 12 am cuando terminaron los estudios, las preguntas y varias cosas más, me recoste cansada y cerré los ojos pero de pronto volvió a mi aquel miedo. Todo mi cuerpo temblaba y lloraba desconsolada, comencé a gritar de desesperación y ahí fue cuando las enfermeras llegaron.
Ya no me inyectaban tranquilizantes simplemente me daban agua y daban masajes a mis brazos y piernas para que dejaran de temblar, así poco a poco me iba calmando.
Cuando todo termino todos se fueron menos mi doctora.
-¿Quieres ver al paciente? - sonrió. -A despertado- Sonreí de oreja a oreja y de inmediato fui a su habitación al llegar pude ver que tenia un diario y mi llave.
-¿Quien eres tu?- me emocionaba saber su nombre pero me intrigaba mas otra cosa -¿y por que tienes mi llave?- la cara del chico palideció
-¿tu llave? - su voz era profunda y dulce me ponía los pelos de punta.
-Si, mi llave, dice mi nombre - después de leer la llave volteo de inmediato conmigo.
-¿Cual es tu nombre? - parecía que había visto un fantasma ¿tan mal me veía?.
-Danbi, Danbi Mi hi- Sonreí y el se sorprendió a un más -¿como te llamas ?- pregunté.
-kyuhyun- sonrió. Algo raro en mi me dominó ese chico tonto que no sabia cruzar calles dominaba una parte de mi.
"Kyuhyun"
