Behind The Sun - Jhope

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La tarde avanzó, y cuando el sol ya se estaba ocultando, Lina y yo nos dirigimos a mi casa. No pude evitar sentir un cosquilleo en el estómago, algo entre la ansiedad y la expectativa. ¿Qué pensaría mi abuela de tener una amiga en casa después de tanto tiempo?

Al llegar, mi abuela nos recibió en la puerta, sorprendida, como si fuera una rara ocasión. Mi abuela, siempre tan tranquila y observadora, me miró por un momento, y luego a Lina, con una sonrisa curiosa.

—¿Quién es esta chica? —preguntó con amabilidad, aunque no pude evitar notar que algo en su mirada denotaba que había captado la sorpresa en mí. Tal vez lo había notado, que algo no estaba del todo bien.

—Es Lina —dije, sonriendo de forma nerviosa mientras le daba la bienvenida—. Es una amiga de la universidad. Pensé que sería divertido que viniera a pasar la noche con nosotros.

Mi abuela, aunque sorprendida, no dijo nada más, simplemente se inclinó un poco hacia Lina y la saludó con cortesía.

—Qué gusto conocerte, Lina —dijo, dándole una sonrisa cálida, algo que aligeró un poco la atmósfera. Aunque al principio no sabía qué esperar, mi abuela siempre había sido amable y respetuosa con las pocas personas que habían entrado en su vida.

Lina, como siempre, no se hizo de rogar y respondió con un brillo en los ojos.

—¡El gusto es mío, señora Kim! —respondió, exagerando un poco su entusiasmo, lo que hizo reír a mi abuela—. Sun-Hee me ha hablado mucho de usted. ¡Gracias por dejarnos hacer la pijamada aquí!

Mi abuela asintió, aunque con una leve mirada curiosa en sus ojos, como si estuviera evaluando algo en la situación. Mientras nos dirigíamos a la sala, Lina comenzó a hablar sin parar sobre BTS y cómo sería la noche perfecta para ver videos, cantar sus canciones favoritas y, por supuesto, hablar más de J-Hope, mientras yo trataba de mantener una conversación tranquila.

Cuando llegamos a la sala y nos preparamos para la noche, me sentí un poco nerviosa por la situación. Sabía que mi abuela, aunque siempre tan discreta, estaría observando más de cerca todo lo que pasaba, especialmente porque hacía mucho tiempo que no traía a nadie a casa. La casa siempre había sido un espacio muy privado para nosotras, pero hoy todo parecía diferente.

Lina no paraba de hablar sobre cómo se sentiría si pudiera ver a BTS en vivo algún día, mientras yo, por mi parte, me sentaba en el sillón, mirando a mi abuela de reojo. Me preguntaba si ella pensaba algo sobre mi relación con J-Hope, especialmente después de lo que le había contado hace poco. Pero, para mi alivio, mi abuela no mencionó nada al respecto.

La noche avanzó rápidamente. Lina me mostró algunos videos y conciertos de BTS mientras yo trataba de entender todo lo que me contaba. Pero mi mente no dejaba de regresar a J-Hope, a la llamada, a las decisiones que tomé. ¿Realmente iba a ver a J-Hope en ese concierto? ¿Estaba preparada para enfrentar todo lo que eso significaba para mí?

La tranquilidad de la noche se interrumpió solo por el sonido de la televisión, el movimiento de las tazas de té y las risas de Lina. A pesar de todo lo que había en mi mente, no pude evitar relajarme un poco. Quizá, por una vez, podría dejar que todo fluyera y disfrutar de lo que tenía en el presente.

—¿Así que aún no estás en la universidad, querida? —le preguntó la abuela a Lina mientras nos traía otra ronda de galletas de chocolate.

Lina, siempre tan segura de sí misma, le respondió rápidamente, sin vacilar.

—No aún, señora Kim. Pero pronto, seguro —dijo, y su tono de voz fue tan confiado que parecía que la universidad fuera una meta que ya estuviera al alcance de su mano—. Ahora estoy trabajando con Sun-Hee en la cafetería. ¡Y es genial!